Personal presentó su dispositivo de internet de las cosas (IoT) para las mascotas. Y, así, completa el círculo de soluciones orientado a quienes uno quiere proteger, tras haber lanzado en el último año Bipy Niños y Bipi Adultos mayores. En todos los casos se trata de aparatos vinculados con una aplicación que permiten hacer un seguimiento de lo que ocurre con cada uno de ellos en determinadas situaciones, sea que están lejos o cerca.
Los dispositivos Bipy, sean para niños, adultos mayores o mascotas, funcionan como un localizador inteligente conectado a la red 4G de Personal. Y es un modo de ir “evangelizando” a los usuarios en la internet de las cosas, la próxima evolución del mundo digital.
Para el año próximo, la compañía prevé lanzar soluciones de IoT para el hogar (Smart home) y para las ciudades (Smart cities). Todo lo que en este último año estuvo orientado hacia los usuarios finales, aún cuando se trate en uno de los casos a las mascotas, terminará integrado luego en una solución más grande donde hogar e individuo sean parte de una misma solución tecnológica.
Tal como ocurre con los desarrollos anteriores, Bipy Mascotas está dotado de sensores que permiten conocer diversas actividades de la mascota, especialmente cuando no se está cerca de ella.
Cuenta con un localizador GPS y 4G, ideal para cuando el perro se escapa del dominio de su dueño, a lo que se suma una funcionalidad que permite que se hagan llamadas y se disparen alertas cuando se perdió.
También es posible tener un historial del recorrido de la mascota, que sirve para los casos en que un paseador se hace cargo de su actividad diaria, al igual que un monitor de actividad física.
Como en los otros casos, el dispositivo se conecta con una app descargada en el Smartphone desde el cual se accede a la información, alertas y demás actividades que se hayan predefinido.
El servicio es, por ahora, para una sola mascota. El costo es de $4.999 y el abono es de $130 por mes. El dispositivo, además de contar con los diversos sensores descriptos, posee además dos adaptadores para cada tipo de collar y un cargador aparte. La duración de la batería es de 12 horas.
“Estas soluciones representan nuestra manera de ir al consumidor final, estrategia que iniciamos hace un año con Bipy Niños y que este año continuamos con Adultos, y ahora con Mascotas. Con este desarrollo seguimos profundizando nuestra estrategia IoT, ocupando un rol relevante en la cadena de valor a través del desarrollo de soluciones end to end tanto para el hogar como para ciudades inteligentes y agroindustria”, dijo Fernando Freytes, gerente de negocios no tradicionales y estrategias de dispositivos de Personal.
El mercado de internet de las cosas viene creciendo de manera acelerada en la región. En 2017 habían 444 millones de dispositivos conectados mediante esta tecnología mientras que la proyección es que, hacia 2025, esa cantidad ascienda hasta los 1.300 millones de objetos conectados a la red. Y esto lleva a que se replanteen diversas variables del negocio.
Sobre estas proyecciones es que se vienen replanteando los negocios de conectividad. Freytes reconoció que abordar la IoT con servicios sencillos de utilizar por los usuarios finales, permitirá avanzar con soluciones más sofisticadas, pero también de fácil implementación en el hogar.
Y en ese marco, anticipó que los servicios de IoT que se lanzarán para la vivienda se podrán integrar con las existentes actualmente. Un ejemplo es, justamente, el que se dio con la mascota.
Como la solución permite ver, por ejemplo, si el animal se encuentra en un ambiente con temperatura confortable, o no, con la solución actual uno no puede tomar muchas decisiones, más que preocuparse que pueda estar sufriendo frío o calor. Pero si esa advertencia surge cuando el perro está en el hogar y los dispositivos de esa vivienda están conectados a una solución de IoT posiblemente puedan tomarse decisiones que permitan que vuelva a estar en un ambiente con la temperatura conveniente, sea manejar los niveles de un equipo de climatización o abrir una ventana, entre otras chances que abre esta tecnología.
La conectividad, en el marco de la IoT, será cada vez más un commodittie. Como los paquetes de datos que se transmiten son pequeños en tamaño también lo son en facturación. De ahí que el negocio necesite apalancarse en el volumen por un lado, y en las soluciones de valor agregado por el otro.