El cierre de los shoppings, las galerías de compra y los locales por la pandemia se llevó puesto a un sector completo. El sector de indumentaria (que incluye ropa y calzado) mostró en la Argentina una caída de casi 30% respecto al mismo período del año anterior.
El parate puede verse a simple vista en los principales polos textiles de la Ciudad: desde los elegantes centros comerciales, pasando por las zonas de outlets -que eran ruta obligada de la clase media- hasta la siempre concurrida y popular zona de la avenida Avellaneda o Santa Fe.
"El sector se está dedicando a liquidar para pagar sueldos. La cuarentena terminó terminó de darle un golpe fatal a las empresas, que encima arrastraban un rojo de meses", remarca una fuente de peso en la industria.
En efecto, los centros de compras registraron un retroceso de 7% en su facturación según el INDEC, golpeando fuertemente al rubro indumentaria, que concentra 45% de las ventas en estos establecimientos. No solo eso: los ingresos correspondientes a los locales de moda ni siquiera pudieron acompañar a la inflación anual acumulada, quedando 11 puntos por debajo.
Las vidrieras, que solían mostrar las últimas colecciones y oportunidades, hace más de dos meses están cubiertas por cortinas metálicas.
En este complejo escenario, la tecnología aparece como una luz al final del túnel. Y no solo desde el ya clásico modelo de tiendas online (que parece crecer a gran velocidad por un marcado ocaso del retail), sino que empiezan a relucir los nuevos formatos de consumo y las oportunidades que brinda la innovación.
Fundado en 2015, Bacan es un emprendimiento que combina moda y tecnología. Se trata de una plataforma creada por Ramiro Gramajo y Guadalupe Corbi que permite a los usuarios encontrar su estilo gracias a un cuestionario online, inteligencia artificial y el trabajo de asesoras especializadas, que seleccionan los mejores items y looks para cada cliente.
Sus fundadores experimentaron un "boom" de ventas durante la pandemia.
"En nuestro caso, la pandemia se convirtió en una oportunidad. Llevamos varios años buscando la mejor forma de llevar el shopping a las casas de nuestros clientes y en este contexto cobra mucho sentido esa propuesta. En los últimos meses nuestros envíos y consultas crecieron alrededor de 80%", explica Gramajo a iProUP.
Un modelo a medida
Para entender esta afirmación hay que comprender cómo funciona Bacan. sn palabras simples, la indumentaria se envía en una caja a la casa de cada cliente para que se lo pruebe: conserva lo que le gusta y lo que no, lo devuelve.
Este modelo Tech Fashion ofrece una propuesta de valor para aquellas personas que no disfrutan de ir a los centros comerciales, que no tienen tiempo o no saben qué comprar. Desde que inició el emprendimiento, ya se enviaron 40 mil cajas a más de 200 mil clientes que pasaron por todo el proceso.
Cabe destacar que desde Bacan aseguran que los clientes no pagan de más por las prendas, sino que el precio es el mismo que en las tiendas. "El modelo de negocios es muy simple: nosotros compramos o consignamos mercadería a precio mayorista, al igual que un multimarca tradicional, y luego la revendemos al mismo precio que las tiendas, pero con un alto nivel de servicio", aseguran.
Otro punto interesante es que su plataforma usa algoritmos que permite estudiar los distintos perfiles y buscar las mejores opciones en vestuario. También suma inteligencia artificial y machine learning, que se incorpora a la visión personal que cada asesora aporta.
"Nuestros usuarios completan una encuesta de estilos en donde seleccionan los looks que mejor los representan para diferentes ocasiones: trabajo, salidas, fin de semana, etc. Luego, al momento de pedir una caja, nuestro algoritmo realiza el match entre la información del cliente y las principales características de las prendas en stock para ofrecer al cliente una primera vista virtual del contenido de la caja y que nos diga qué le parece", comenta Corbi, la otra socia fundadora.
Después de recibir el pedido, cada usuario tiene asignado un "asesor" que interviene para ajustar la selección según el feedback y confirmar el contenido.
Cabe destacar que, en plena pandemia, muchas marcas se acercaron para ofrecer sus productos a través de la firma. "A su vez, desarrollamos una plataforma B2B para que puedan ofrecer el servicio de Bacan apalancados en nuestra tecnología y experiencia", suman los fundadores.
¿Adiós al shopping?
Actualmente, y en el contexto de shoppings y locales cerrados a raíz del aislamiento social obligatorio, Bacan está lanzando una nueva iniciativa: el livestream shopping, que busca ofrecer la experiencia del shopping físico pero de manera online.
Los "hosts" o asesores de imagen se prueban la indumentaria de múltiples etiquetas en vivo, al mismo tiempo que explican detalles sobre las prendas y las nuevas tendencias. Así, los usuarios pueden ver en forma online cómo lucen las distintas combinaciones, evaluar una gran variedad de opciones e interactuar en vivo con los asesores.
En este sentido, desde Bacan explicaron la iniciativa surgió como una oportunidad de "virtualizar la experiencia del shopping", que si bien se ve potenciada en un momento como el actual, es una tendencia que está creciendo a nivel mundial.
Y van por más: "Las redes sociales van a ofrecer la posibilidad de comprar mientras el usuario está viendo un vivo. En ese sentido, apuntamos a tener un espacio que haga de minishopping, con la colección de las principales firmas al solo efecto de poder mostrarlas y generar contenido".
Los shoppings y las tiendas experimentan una fuerte caída en sus ventas.
También adelantaron que se están integrando con las marcas para que nos permitan tener información de su stock en tiempo real y así vender los productos que exhibimos en el momento.
Asimismo, los clientes de la plataforma pueden acordar una entrevista con alguno de los asesores de moda, que elabora un look en función de su perfil y llevar adelante la experiencia de shopping virtual en forma personalizada. "Así, pueden comprar prendas y looks al mismo precio que en las tiendas".
"El tech fashion va a crecer mucho en los próximos años impulsado por las nuevas tendencias. Nos queda mucho por sumar de tecnología en el punto de venta, realidad virtual, realidad aumentada, impresión 3D, soluciones logísticas, entre otras", concluyen desde la empresa. ¿Se termina la era de los shoppings?