Hace tres meses, el Banco Central lanzó los controles de cambio para poner paños fríos a la fiebre de ahorristas por el billete verde. Desde allí, el "cepo" fue sumando mayores restricciones.
El límite original fue de u$s10.000 mensuales por persona. Luego, la autoridad monetaria bajó ese tope a apenas u$s200 ni bien terminados los comicios que confirmaron a Alberto Fernández como el próximo presidente.
Es que la sangría había continuado a pesar de las restricciones: según el informe monetario del BCRA, los argentinos compraron casi u$s4.200 millones sólo en octubre. Y, apenas comenzado noviembre, el organismo dirigido por Guido Sandleris embistió contra las operaciones con tarjeta en aplicaciones digitales del exterior, último resquicio hallado por los argentinos para refugiar sus ahorros en moneda dura.
Dentro de ese listado de prohibiciones se encontraban las plataformas de pago digitales que, tal como informó iProUP, pasaron a ser el mecanismo utilizado para eludir el cepo. En concreto, los usuarios les pedían a terceros que les transfieran saldos con tarjeta y así lograban hacerse de divisas en sus cuentas de PayPal.
Pasó el tiempo y el cepo, lejos de morigerarse, se fue endureciendo. Tanto es así que hoy día gran cantidad de profesionales elevan sus reclamos al percatarse del bloqueo en los pagos efectuados a través de Paypal y otras aplicaciones. Incluso, se ven imposibilitados de enviar o recibir fondos por servicios contratados a través plataformas internacionales.
Restricciones al uso de tarjetas
Desde el Banco Central informan a iProUP que las billeteras de empresas extranjeras pueden tener dos funciones:
1) Agregar un instrumento de pago de terceros para transacciones, tales como tarjetas de débito y crédito (se denomina "pasarela" de pagos)
2) Fondear cuentas propias para usarlas como instrumento de ahorro (como es el caso del dinero ocioso que se deja en Mercado Pago para que brinde una renta)
"Paypal, al igual que MercadoPago, ofrece ambas funciones. La política cambiaria sólo afecta directamente a la función 2) en este caso", remarcan desde la autoridad monetaria.
Sin embargo, economistas como Ariel Setton señalan que varias tarjetas están rechazando operaciones para abonar servicios a través del sistema de pagos estadounidense. Es decir el uso permitido por el BCRA y detallado en el ítem 1
"Desde PayPal señalan que han efectuado cambios en su sistema. Consideran que el procesamiento mediante la pasarela está limitado también a u$s200 cuando, en realidad, no existe normativa alguna que fije un tope para compras online con tarjeta", explica Setton a iProUP.
En su visión, el problema "no pasa con todos los plásticos, de modo que la falla está relacionada con los diferentes procesadores de pagos". Y asegura que esto comenzó a suceder en estas últimas dos semanas. Entre las entidades que presetaron problemas se encuentran los bancos Santander, Galicia y Patagonia, además de la fintech Wilobank, con tarjetas Visa, Mastercard y AMEX.
"Muchas personas me dicen que hace 15 días empezaron a detectar esto con mucha mayor regularidad. Tienen suscripciones que implican pagos recurrentes -como por ejemplo la contratacion de hosting y servidores- que también ahora salen rebotados", enfatiza.
Así, gran cantidad de usuarios argentinos se está encontrando con el problema de operaciones canceladas –por ejemplo– en plataformas de comercio electrónico como eBay o tiendas online que utilizan PayPal como pasarela de pago. Más aun, el problema también se ha extendido a otras prestaciones contratadas por Internet.
"Profesionales que están en México no pueden pagar importes muy bajos como los de Uber. Si el sitio tiene su propio sistema para procesar tarjetas, el inconveniente se reduce, pero el problema surge cuando se utiliza PayPal para la app de viajes", agrega.
Según Setton, todo esto está relacionado con la incapacidad de los procesadores de los bancos emisores que procesan las operaciones de plásticos argentinos: Prisma y First Data. Desde unas de las tarjetas líderes consultadas por iProUP coinciden en el diagnóstico.
En concreto, ambos sistemas no pueden discriminar si una operación vía PayPal está destinada a un fondeo de cuenta (prohibido por el Central) o para abonar en un sitio web que implementa el servicio de la empresa estadounidense para recibir cobros con tarjetas.
"Nosotros ejecutamos lo que está en la norma de acuerdo con lo que nos indicó el Banco Central", remarca el ejecutivo de una de las procesadoras de pago, que prefiere no ser identificado.
Además del filtro eventual de First Data o Prisma, el circuito puede cortarse directamente por orden de los propios bancos. Por eso varios usuarios se están quejando puntualmente por el accionar de algunas entidades.
"El banco emisor puede indicarle Prisma o a First Data si aprueba o no una transacción. Es probable que directamente limiten todo lo que sea PayPal y utilicen como excusa la regulación del Banco Central por miedo a una sanción", remarca un alto ejecutivo que recorre a diario la City.
No termina ahí
PayPal no sólo es utilizado como medio de pago en tiendas de ecommerce con proyección internacional: además se usa para enviar o recibir fondos en concepto de honorarios profesionales.
"Nuestra empresa tiene un proveedor de diseño gráfico de la India al que se le abona vía PayPal, pero ahora nos vemos obligados a buscar algún otro método de pago alternativo", aseguran desde una empresa argentina vinculada con la Economía del Conocimiento.
De hecho, quienes presten o demanden servicios a través de plataformas como Guru (una de las más usadas para hallar trabajos en el rubro tecnológico de modo independiente), utilizan a PayPal como plataforma de pagos.
Sebastián Siseles, vicepresidente de Freelancer, plataforma que ya posee cerca de 460.000 trabajadores argentinos, afirma a iProUP que, al tener su propio sistema transaccional no registraron mayores reclamos de profesionales locales contratados a través de su plataforma.
No obstante, remarca que "sí hay malestar por el alto spread del tipo de cambio", ya que los profesionales deben liquidar sus honorarios dentro de los cinco días hábiles a la cotización compradora ($58) cuando los bancos lo ofrecen a la venta casi a seis pesos más.
Guillermo Bracciaforte, CEO de Workana, que ya nuclea a 360.000 freelancers argentinos, afirma: "Por ahora, no tenemos el problema del spread, pero dependiendo de cómo se mueva el mercado tal vez tomemos alguna acción. Estamos a la espera de las medidas que adopte el nuevo gobierno", afirma Bracciaforte.
Según un ejecutivo de historia en el sector financiero argentino, ahora reconvertido como consultor fintech, resolver la actual situación "no será un tema prioritario de la nueva administración al menos hasta marzo".
"En la industria estamos todos esperando una señal del presidente electo: billeteras, empresas de préstamos, remesadoras, etcétera. Pero existen otras prioridades, sólo nos resta esperar", afirma la fuente, cercana a las negociaciones de las firmas con las nuevas autoridades.
Otra de las firmas que sufrió el golpe fue Nubi, una fintech que se alió con PayPal para ofrecer retiros y carga de saldo en el medio de pagos estadounidense. Tras el cepo, las extracciones sólo pueden hacerse en pesos.
"Nubi, como todos los argentinos, debió ajustarse al cepo cambiario y a las medidas del BCRA. Cabe destacar que nuestro servicio de retiros en pesos sigue operando con normalidad y continúa siendo una gran solución para vos", señalan en la empresa, que promete que la acreditación se realiza "en apenas 3 días hábiles y con una experiencia de retiro súper sencilla y 100% digital".
Y remarca: "En este momento, ajustándonos al cepo cambiario y a las últimas medidas del BCRA, cualquier dinero que retires deberá obligatoriamente pasarse a pesos. Toda operación que realices, siempre que asocies una cuenta bancaria en pesos, se acreditará en tu banco al tipo de cambio del tercer día hábil".
Guardián de las reservas
Tres años después de que Federico Sturzenegger lo "jubilara", el Banco Central volvió a contar con Jorge Rodríguez, un economista de extensa trayectoria conocido bajo el apodo de "Guardián de las Reservas" por sus colegas.
Su regreso estuvo relacionado con la necesidad del Gobierno de contar con funcionarios con experiencia en el control de capitales y el cuidado de las reservas internacionales.
"Es como si el Gobierno de Macri trajera a Guillermo Moreno a controlar los precios. Jamás lo haría porque no cree en el trabajo de Moreno. Ni en las regulaciones de precios. Pero acá no les quedó otra alternativa: una vez que volviste al cepo, lo mejor es que traigas al que más sabe de regulaciones y normas", afirmó un dirigente de extensa trayectoria.
Rodríguez es uno de los personajes más conocidos en los pasillos de Reconquista 266 y su jubilación anticipada a principios de 2016, cuando era gerente general del organismo, sorprendió a más de uno. Pero antes fue clave en distintos momentos de los últimos 25 años de historia económica argentina.
"Es la persona que más conoce sobre movimientos de divisas y regulaciones de entrada y salida de capitales", coinciden distintos economistas que lo trataron en las últimas décadas, según consignó iProfesional.
El funcionario ya había tomado notoriedad en los ‘90, cuando también Carlos Menem liberalizó el mercado de capitales y el funcionario de carrera mandó a pedirle que mantuviera a salvo las estadísticas sobre movimiento de capitales. Lo logró.
También fue quien armó la base de datos del sector externo, tanto en el BCRA como para el Indec. En aquellos años de la crisis 2001-2002, fue el encargado del diseño del Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), que rigió el sistema cambiario desde entonces.
Una de las frases de Sturzenegger cuando asumió al frente del Banco Central era que vender dólares era como vender manzanas. Por eso impulsó una resolución para que un kiosco, un supermercado, una ferretería o veterinaria o cualquier comercio minorista que lo deseara podría -previo trámite de autorización- expender dólares.
Un año y medio después de esa normativa, la Argentina volvió a tener un "cepo" en medio de una grave crisis económica. Y ni siquiera un peso pesado internacional como PayPal pudo escabullirse.