El ministro de Economía busca mitigar el impacto en los mercados tras la recomendación del presidente Milei sobre la criptomoneda $Libra
19.02.2025 • 17:56hs • acciones e inversiones
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Caputo realizó compras de bonos y acciones con fondos de ANSES para frenar las consecuencias del criptogate
Sergio Caputo, ministro de Economía argentino, decidió tomar medidas drásticas para atenuar los efectos negativos en los mercados que trajo el escándalo del criptogate.
Durante la jornada del 14 de febrero, el presidente Javier Milei recomendó invertir en una criptomoneda llamada $Libra que a las horas se desplomó, algo que generó que miles de usuarios perdieran todo su dinero.
Desde que Caputo asumió el control del Anses, utiliza el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) del organismo para realizar compras masivas de bonos y acciones.
Su objetivo principal es frenar la caída del mercado argentino, especialmente el Merval, que refleja la evolución de las acciones más importantes que cotizan en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.
Durante el día 17 de febrero pasado, Anses invirtió millones de pesos de los fondos jubilatorios en activos financieros.
Se estima que para mitigar el impacto de la crisis y estabilizar la situación, el gobierno deberá gastar u$s650 millones en el CCL (Contado con Liquidación) y unos u$s350 millones en acciones del Merval.
El bono AL30D, uno de los principales bonos soberanos en pesos, experimentó una fuerte transacción, con más de u$s152 millones negociados durante el lunes y u$s110 millones en la jornada del martes.
¿Se debilita el gobierno de Milei tras el criptogate?
Con el correr de los días, la desconfianza en la capacidad del gobierno de Milei para el manejo de crisis aumentó de manera rápida.
Uno de los principales indicadores de esta pérdida de confianza fue la rebaja de la calificación de la deuda en pesos de Argentina por parte de S&P Global Ratings.
El informe de la calificadora internacional rebajó la deuda en pesos a "Default Selectivo", debido a la creciente incertidumbre sobre la capacidad del gobierno para cumplir con sus obligaciones de pago.
La caída de las acciones y los bonos fue acompañada por una fuerte suba en el riesgo país, que superó los 700 puntos básicos.
La deuda soberana en moneda extranjera también se resintió, con los mayores descensos en los bonos Global 2035, 2041 y 2030, que perdieron entre 1% y 1,8%.