La iniciativa de blanqueo de capitales impulsada por el gobierno de Javier Milei generó un fuerte impacto en el mercado cambiario argentino.
Según los últimos datos de Portfolio Personal Inversiones (PPI), los depósitos en dólares experimentaron un crecimiento exponencial, alcanzando niveles no vistos desde octubre de 2019.
En septiembre se superó la barrera de los u$s20.000 millones, lo que representa un incremento de más de u$s1.300 millones desde mediados de agosto.
Este flujo constante de divisas hacia el sistema financiero se atribuye en gran medida a los incentivos fiscales y beneficios ofrecidos por el régimen, que permiten a los contribuyentes regularizar activos no declarados a cambio de importantes ventajas.
No es la primera vez que Argentina lleva a cabo un programa de blanqueo. El más notable fue el de 2016, bajo la presidencia de Mauricio Macri. En ese momento fue considerado un éxito, ya que atrajo alrededor de u$s116.000 millones en activos no declarados.
Si bien el blanqueo se encuentra todavía en marcha, incluso con una especulación muy fuerte en cuanto a una posible extensión, ya es posible arribar a una conclusión sobre su resultado.
"Este nivel de depósitos en dólares es el más alto en cinco años, lo cual sugiere una respuesta positiva del sector privado, en parte impulsada por la promesa de estabilidad y seguridad para aquellos que regularizan su capital", asegura a iProUP la economista Gisela Veritier.
"Es un blanqueo más barato que el de Macri y con diferentes opciones de inversión que en el contexto argentino, muchos inversores prefieren seguir teniendo en dólares sus ahorros y el régimen ofrece una vía legal y menos riesgosa para hacerlo", agrega.
Para Ana Viganó, otra economista de vasta experiencia, "es difícil evaluar el éxito de un blanqueo si aún no terminó, sobre todo porque la decisión de adherirse o no nunca es lineal".
La experta afirma que "las decisiones financieras siempre se dejan para lo último, ya que está en su naturaleza, es lo que las hace especulativas". No obstante, la especialista reconoce que el incremento en los depósitos "no es un dato menor".
A la hora de explicar los buenos números del blanqueo propuesto por el Tobierno, Gisela Veritier repasa que "Milei basó su campaña en promesas de liberalización económica y estabilidad, lo que incentivó a muchos a traer su capital al sistema formal".
Para la economista, la reducción o eliminación de impuestos para quienes blanqueen capitales "genera un atractivo fuerte para inversores, sobre todo en un país con alta presión tributaria como Argentina".
Finalmente, Veritier asegura que "muchas personas con capitales en el exterior ven en el blanqueo una oportunidad para regularizar su situación frente a la ley y acceder a instrumentos financieros dentro del país".
A través de la apertura de una Cuenta Especial de Activos (CERA) en una entidad bancaria y una cuenta complementaria en un agente de liquidación y compensación (ALyC), los ahorristas podrán acceder a una serie de beneficios fiscales.
También es posible adherirse si se poseen criptoactivos en una exchange registrada como proveedor de servicios de activos virtuales ante la CNV, entre las que más de 76 empresas, incluyendo a Binance.
Entre los beneficios se destacan:
Cualquier persona física o jurídica puede adherirse al régimen, siempre y cuando cumpla con los requisitos establecidos y abra las cuentas especiales correspondientes.
La detallada inyección de dólares contribuyó a estabilizar el mercado cambiario, con los dólares alternativos cotizando por debajo de los $1.300 y la brecha cambiaria en baja.
Otro factor que influyó en la dinámica cambiaria es el pago adelantado del impuesto a los Bienes Personales. La posibilidad de adelantar el pago a una tasa fija para los activos blanqueados atrajo a muchos ahorristas a vender dólares para aprovechar este beneficio.
"Una vez que venza el plazo para adherirse al blanqueo, no está claro si el contado con liquidación se mantendrá en estos niveles. La amenaza de intervención del Banco Central podría limitar su apreciación", advierte PPI.