Los ADRs argentinos en Wall Street tuvieron otra semana para el olvido en Wall Street y experimentaron pérdidas significativas.
IRSA (casi 20%), Telecom Argentina (hasta 20%), Cresud (19%) y el sector bancario (con retrocesos de entre 8% y 16%) fueron algunos de los papeles y sectores más castigados.
Estas fuertes caídas se produjeron en un contexto de volatilidad y cambios en el mercado financiero.
Algunos de los factores que influyeron en los rendimientos de ADRs fueron la demora en la sanción de la Ley Bases, el retraso cambiario, y los rumores sobre posibles cambios en el Gabinete, entre otros.
Además, se trató de una semana atípica a partir de la combinación de tres feriados locales y un día sin operaciones en los Estados Unidos, que suele servir de guía al mercado local.
"Los ADRs tuvieron una semana complicada, el mercado entró en bear market y, seguramente, a partir de la semana que viene se van a ver reflejados los precios de las acciones argentinas en Buenos Aires, salvo que el contado con liquidación empiece a subir, algo que me parece muy probable y eso ralentice la caída de las acciones argentinas en pesos en el mercado local", explica a iProUP Marcelo Trovato, manager de Pronóstico Bursátil.
Un bear market (mercado bajista) ocurre cuando existe una baja de 20% (o más) desde los máximos recientes.
Con el mercado expectante al arribo de avances en las reformas económicas, y si se tiene en cuenta el actual contexto, es probable que el mercado arranque con sesgo bajista el próximo lunes 24 de junio.
"La paliza que sufrieron los ADRs fue durante toda la semana, no tanto en esta última rueda. No obstante, creo que el bear market de los ADRs en Nueva York va a continuar varias semanas", pronostica Trovato.
El analista de Pronóstico Bursátil añade que "el mercado local, por su parte, ya dio su veredicto de que no funciona este plan que busca implementar el Gobierno".
"El mercado entiende que hacen falta cambios como pide el Fondo Monetario Internacional (FMI) porque el 'Círculo Rojo' no va a reventar o a deshacerse de su patrimonio personal para inyectar dólares a la economía, sin el sustento de un plan económico sólido detrás", completa.