La economía argentina sufrió ayer un fuerte revés: el dólar blue subió, primero, hasta los $300 para luego estabilizarse en los $260, lo que alteró al mercado cambiario. En este contexto, muchas empresas suspendieron las ventas, o directamente incumplieron con los pedidos realizados la semana pasada.
Además, también hubo remarcaciones de precios, por fuera de las programadas. Esta suba no solo afectó de lleno a los productos importados, sino que también a los nacionales.
En la jornada de ayer la consigna de los empresarios, tanto grandes, pequeños o medianos, fue preservar los stocks, en medio de la agitación en el mercado cambiario.
Salvo algunos casos puntuales, en el sector de la alimentación sufrieron importantes aumentos, además de los que ya vienen sumando. Las que no dependen de las importaciones sufrieron ajustes de precios que se movieron al ritmo de la inflación: en torno al 5% en el mes.
La excepción también pasó por el rubro lácteo: las principales empresas del sector aplicaron ayer subas de entre 8% y 10% en la leche y los demás productos.
También hubo alzas de 8% en el rubro bebidas gaseosas. En el caso de los frigoríficos (fiambres y carne congelada), las subas promediaron el 10%.
Según datos del sitio Precialo, que se encarga de revisar la variación de los precios en Mercado Libre, el aumento ya se puede ver en algunos productos:
En diálogo con iProUP, Ignacio de la Fuente, COO de Historial.com, comenta que los precios ya se habían comenzado a modificar el jueves cuando se presentó la nueva resolución del BCRA que prohibía las compras en el exterior en cuotas y anteriormente que restringía el acceso a las importaciones. La mayoría de las tiendas de productos importados ya había remarcado los valores de los productos a la expectativa de nuevos cambios.
Por su parte, Alberto Cura, Product Manager & Founder at Precialo, suma que los precios aumentaron notablemente durante este fin de semana, es decir en 48hs el 23,5 %, del total de productos en todas las categorías sufrió un aumento del precio mínimo.
En sintonía con Cura, de la Fuente, dice que con respecto a categorías que más subieron: "Todo lo que es electrónico y es importado por empresas sin presencia en el país se dispararon con incrementos que vimos de hasta el 70%. Se puede ver en la ropa también pero con un incremento algo menor".
Además, suma: "Lo que creemos que se va a empezar a notar es una baja en la oferta de productos importados, y un precio elevado de lo que queden con stock. De hecho vimos mucha gente el fin de semana tratando de comprar lo que sea en cuotas, buscando precios que no hayan sido actualizados, que según ellos(los usuarios) ayer era el Hotsale".
"El aumento promedio de los precios mínimos para la categoría Alimentos y bebidas fue del 53,9% siendo esta última la más afectada, accesorios para vehículos y cámaras y accesorios en el orden del 26%. Consolas y videojuegos 23,6% mientras que las categorías computación, electrónica, audio y video estuvieron en el orden del 13%", agrega Cura.
Por último, el fundador de Precialo acota que el panorama "no es alentador", ya que en Argentina se está viviendo una certidumbre cada vez más consensuada en cuanto a la falta de dólares lo cual provoca una alta demanda por parte de los ahorristas y a su vez un aceleramiento en la importación de insumos por parte de las empresas para resguardarse ante posibles prohibiciones.
"En la medida que no se haga una reestructuración de fondo donde se discutan propuestas sobre la baja de impuestos, flexibilización laboral y reestructuración del estado, nuestra querida nación seguirá sin posibilidades de desarrollo y por el contrario, la crisis se profundizará aún más y los dólares seguirán faltando", conlcuye Cura.
Por otro lado, muchos clientes vivieron en primera persona e el fin de semana una situación que ya ocurrió años atrás; concesionarias de autos que avisaron "falta de precio" para cerrar una venta, que ya tenía una seña pactada. "Si quiere puede dejar la seña y le avisamos del nuevo valor, apenas lo sepamos", advirtió el jefe de ventas de una concesionaria de Palermo.
Desde ese local dijeron que, antes de cerrar el trato, querían saber qué iba a suceder con el dólar. El problema se suma a los ya conocidos: la escasez de repuestos y autopartes, que encarecen los arreglos y las reposiciones en el mundo de los vehículos usados.