Luego de dos años explosivos para Bitcoin, en los que la criptomoneda intentó en dos oportunidades llegar a los 70.000 dólares y quedó a u$s2.000 de lograrlo, el mercado cripto sigue expectante.
Si bien los early adopters de la divisa están acostumbrados a estos contratiempos, miles de usuarios que aprovecharon la pandemia para investigar y dar el salto hoy viven momentos de angustia.
Luego de desplomarse 50% desde el máximo histórico, la criptomoneda líder amagó con volver a la senda alcista y se mantenía en la franja de 30.000 a 40.000 dólares. Pero en las últimas semanas, le cuesta con perforar el umbral de los 30k y posicionarse en un valor similar a la prepandemia.
Lo mismo ocurre con Ethereum: hoy flota en los u$s1.600 dólares, tres veces menos de su récord histórico de noviembre, cuando cuando casi toca los u$s5.000.
Sin embargo, hay un dato clave en el uso de este activo que está esperanzando muchos inversores, que creen que la criptomoneda líder (que influye en las cotizaciones de sus rivales) se recuperará, aunque difieren en el cuándo. "El bitcoin no está bajando: está agazapado para tomar impulso", afirma a iProUP un cambista digital.
La gran pregunta es si este vaticinio se cumplirá.
¿Cómo está el Bitcoin en la Argentina?
"Mucha gente está vendiendo y hay muy poco volumen. Lo que no tenemos, hay que comprarlo afuera al contado con liqui, por eso están en el orden de los $210 las 'estables'", explica a iProUP un alto ejecutivo de un exchange nacional.
El directivo además plantea: "¿Por qué creés que todos los exchanges estamos lanzando productos DeFi (finanzas descentralizadas)? Con algo tenemos que mantener el negocio". En el mismo sentido, uno de sus colegas advierte: "El mercado está planchadísimo. Encima, hay más ventas que compras. Nos subimos a DeFi, Metaverso, la ola que venga".
El problema mayor de que las ventas estén muy encima de las compras es que supone que los fondos (sean en cripto o pesos), están fuera de la plataforma, por lo tanto no es posible incentivar a que el usuario los utilice para invertir o cambiar por otra moneda digital, lo cual permite a las empresas cobrar más comisiones: sólo gana con la salida y pierde al cliente.
Se trata de un fenómeno que no sólo se percibe en el mercado local. A nivel internacional, se inició lo que se denomina una "etapa de acumulación". Es decir, los mineros no están forzados a vender por la baja demanda y, por lo tanto, mantienen los nuevos bitcoins que van ganando hasta que se revaloricen.
Es algo similar al halving, es decir, el mecanismo por el cual la criptomoneda baja a la mitad la emisión y, por lo tanto, recompensa a los mineros. El próximo está previsto para mayo 2024.
"Es como un falso halving lo que estamos viviendo. Sólo que ahora los mineros 'amarrocan' los bitcoins porque no tienen a quién vendérselos. La gente está sacando la plata de los exchange para ahorrarlos. Es decir, no piensan en invertirlos", advierte a iProUP un inversor de larga trayectoria en el mercado.
Y añade: "El problema es que con el halving uno sabe que en pocos meses aumentará el precio, por la presión del mercado ante la confirmación de menor emisión y la dificultad que acarrea minar. En cambio ahora venimos con bajas operaciones desde junio".
El mandamás de otra de las firmas líderes locales afirma: "El mercado necesita un resucitador. Por eso, grandes exchanges mundiales están firmando patrocinios millonarios con el fútbol, la Fórmula 1 y otros deportes: quieren lograr una mayor adopción para que se dispare la demanda". O, lo que es casi igual, su precio.
"El Bitcoin seguirá desinflando la burbuja poco a poco. Los inversores retail que entraron esperando ganancias rápidas se van a desanimar. Creo que ya liquidaron a muchos early adopters: será difícil llegar a la siguiente porción del mercado y caro para las empresas que ya estarían invirtiendo en el awareness de bitcoin. Será un año de consolidación", asegura a iProUP Rubén Galindo, CEO y cofundador de Airtm.
¿Y mientras tanto?
Siempre es difícil predecir cuándo se revalorizará Bitcoin. Por eso, los expertos locales evitan estimar una fecha y recomiendan apostar por otras alternativas dentro de la criptoeconomía.
"Será un año de alta volatilidad, así que si una persona no es propensa a tomar mayores riesgos debe ir a lo seguro. Invertir en algo más conservador para ir surfeando este momento y esperar un ciclo de explosión creativa de Bitcoin: con el paso del tiempo veremos algo nuevo que hoy no conocemos", sugiere a iProUP Manuel Beaudroit, CEO y cofundador de Belo, en relación a las DeFi.
Gabriel Vago, CEO de ArgenBTC, comparte esta visión: "Si se siguen cumpliendo los patrones de ciclos de Bitcoin, 2022 debería ser un año como 2014 o 2018: es esperable que cotice a la baja, aunque la fuerte adopción de estos dos años puede atenuar esta tendencia", señala.
Nicolás Verderosa, CEO de Kephi Gallery, sugiere a iProUP que "en un mercado bajista hay que mirar a las monedas estables para obtener un rendimiento anual".
También recomienda estar alerta a lo que ocurra en el metaverso, ya que "utiliza NFT y DeFi como gran parte de su núcleo: su crecimiento repercutirá positivamente en el precio de los tokens de estos dos sectores".
Fernando Martínez, director de OSL Latinoamérica, asegura a iProUP que "a las criptomonedas se las puede dividir por sus segmentos principales: infraestructura, protocolo y aplicación", y agrega que una buena estrategia es invertir en las top five de cada uno.
Señala que mientas Bitcoin mostró números pobres en el análisis interanual del último año, Ethereum creció al 150% y Binance Coin al 5.000%. Por tanto, recomienda invertir en dos sectores clave:
- Protocolos: 60% en Ethereum y el resto entre Solana, Cardano y Polkadot
- Aplicación (Metaverso): Axie (35%), Sand (35%), ENJ (15%), Chilliz (10%) y ILV (5%)
Polkadot, Solana e instrumentos DeFi son algunas alternativas que mencionan los expertos para estar atentos en 2022
José Luis González Birlain, de Bitso, coincide en seguir a ETH: "Se concretará la actualización llamada The Merge: la transición del mecanismo de consenso Proof of Work hacia Proof of Stake. Esto potenciará su capacidad de procesamiento, disminuirá el consumo energético y reflejará una reducción en los costos de transacciones. Ether es la gran opción para tener en la mira".
Sin embargo, quienes tengan bitcoins deberían conservarlos y hasta aprovechar para aumentar su posición. Maximiliano Hinz, director de Binance para Latinoamérica, sugiere la estrategia del costo promedio en dólares (DCA, por sus siglas en inglés), muy usada entre principiantes porque no requiere conocimientos de finanzas.
"Por ejemplo, si adquirimos 0,1 BTC a $50.000, luego 0,1 BTC a $40.000 y después 0,1 BTC a $60.000, nuestro DCA será $50.000. Mientras vendamos arriba de ese valor, tendremos ganancias", detalla, al mismo tiempo que sugiere estar alerta a las noticias de empresas y gobiernos entrando en Bitcoin.
"En 2021 vimos un gran incremento de capitales empresariales que empezaron a invertir en BTC y el primer caso de un país adoptándolo como moneda de curso legal. Este tipo de movimientos son como hitos en la historia de la criptomoneda", asegura.
Por su parte, Matías Bari, CEO y cofundador de Satoshitango, señala a iProUP: "El único consejo que puedo dar es que si alguien compra Bitcoin, no se deje llevar por los vaivenes del precio. No importa una fuerte caída para quien sabe que es una apuesta a largo plazo porque supone una disrupción muy grande".
El mercado sigue expectante. La angustia crece entre los inversores con poca experiencia. La única solución será, entonces, explorar otras oportunidades hasta que "pase el temblor" de Bitcoin.