El derrumbe de los mercados globales como consecuencia de la guerra de Ucrania le pegó de lleno al Bitcoin y a las criptomonedas en general, prolongando la tendencia decreciente iniciada varios días atrás.
Es más, las criptomonedas se han convertido en las principales víctimas de la crisis en Ucrania, por caídas y por reputación. De hecho, el bitcoin pierde ya un 50% desde su récord, y los analistas advierten que "los inversores se están posicionando para una mayor caída".
Apenas conocida la invasión, el Bitcoin cayó con inusitada fuerza, pues perdió un 9%, hasta tocar un mínimo de u$s34.459, su valor más bajo en un mes. Pero no fue el único, ya que algunos como el Cardana retrocedieron más del 15% en tanto que el Ether llegó a perder un 12%
Este hecho generó diversas opiniones, como por ejemplo la de Vitalik Buterin, cofundador de ether y Ethereum, quien no ve con "malos ojos" la caída de las criptomonedas, ya que sostiene que esto podría eliminar proyectos de criptos poco viables, disminuyendo la especulación sin sentido.
Las bajas registradas en las últimas horas se suman al retroceso que ya acumulan en lo que va de año y que está anulando la pretensión de muchos inversores de que este tipo de activos sirva de refugio frente al oro en tiempos de volatilidad.
"Los activos de riesgo siguen lastrados por el conflicto y las tensiones entre Rusia y Ucrania. Esto incluye al Bitcoin y a las criptodivisas, que en la actualidad siguen siendo consideradas como una clase de activos de alto riesgo", indicó Vijay Ayyar, vicepresidente de desarrollo corporativo e internacional de Luno.
En este contexto, Edward Moya, analista de mercado sénior de las Américas en Oanda, dijo en una nota a los clientes el jueves que muchos inversores "están dudando en aumentar las tenencias dada la tremenda incertidumbre para los activos de riesgo".
Es precisamente debido a esta elevada volatilidad que las criptomonedas están en la mira de varios gobiernos, más aún si se tiene en cuenta que están teniendo una enorme aceptación entre inversores minoristas y también entre los institucionales.
Todo ello hace que se los siga considerando como un riesgo potencial para la estabilidad financiera global, más que nada por la enorme aceptación que están teniendo entre inversores minoristas y también entre los institucionales, hasta el punto de que empiezan a ser vistos como un riesgo potencial para la estabilidad financiera.
El vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, reclamó ayer la necesidad de regularlos y recordó que, a diferencia de otros activos como las acciones o los bonos, los criptoactivos no están respaldados por valores fundamentales tangibles.
Para tener una idea de la magnitud de la caída, si se toma en cuenta el mercado en su conjunto, en el peor momento del dia se estima que las pérdidas de valor rondan los 1,5 billones de dólares.
Posteriormente, se registró cierta recuperación de las cotizaciones, por las denominadas compras de oportunidad, que elevaron el precio hasta los u$s36.200, por lo que la merma se reducía al 6 por ciento.
Un dato que preocupa y mucho a los analistas e inversores es que el denominado índice de "miedo y codicia" apuntaba a que era posible prever una mayor caída en las próximas ruedas, pues se estaba dirigiendo aceleradamente a los que se denomina una zona de "miedo externo".
Dicho de otra manera, muestra que los inversores venden sus posiciones para buscar refugio en activos más seguros como el oro, cuya cotización se viene elevando en forma sistemática para superar los u$s1.900.
"En la última vorágine del mundo -Estados Unidos/Rusia/Ucrania- el Bitcoin, el activo que se supone que es la respuesta a todas las preguntas, se ha debilitado silenciosamente y está notablemente por debajo de su archienemigo, el oro", dijo John Roque de 22V Research en una nota citada por Bloomberg,
Roque predijo que el Bitcoin podría caer por debajo de los u$s30.000 -un nivel que no ha visto desde julio-, ya que los operadores se inclinan cada vez más por el oro, lo que podría llevar al lingote a un máximo histórico.
Por su parte, Griffin Ardern, un operador de la firma inglesa Blofin sostuvo que "en una situación tensa, los inversores priorizarán las materias primas como el oro y el petróleo crudo en lugar de las acciones más arriesgadas y las criptomonedas", dijo
Antoni Trenchev, cofundador y socio gerente de la plataforma Nexo dijo que "la incapacidad de Bitcoin para mantener los u$s40.000 en medio de las crecientes tensiones de Ucrania significa que los u$s 30.000 vuelven a estar en juego".
"La geopolítica ha sustituido, por ahora, a la inflación como principal motor tanto de los mercados tradicionales como de los criptográficos", concluyó.
Para los analistas que basan sus pronósticos en el análisis técnico, la actual corrección del precio de Bitcoin podría continuar. Su estimación se hace en función de la denominada "Teoría de la Onda de Elliott".
Precisamente, esta perspectiva bajista apareció cuando Bitcoin cayó por debajo de los u$s35.000.
La teoría, que divide un ciclo de precios en dos conjuntos, uno que consta de cinco ondas de impulso con tendencia alcista y el otro con tres ondas correctivas de seguimiento, apunta a la posibilidad de que el precio caiga a u$s25.500 en 2022.