El mercado fintech argentino explotó en 2018 con la llegada al mercado de empresas como Wilobank y Ualá, y la confirmación de otros proyectos como, Brubank y Openbank, la apuesta de Santander que ya tiene fecha de llegada al país.
A este segmento en franco ascenso se sumará a partir de marzo Grupo Transatlántica, de la mano de su plataforma digital Rebanking. En rigor, se trata de una evolución de TSA Banking, el sistema de la compañía conformada luego de la compra de Multifinanzas, una firma autorizada por el Banco Central para brindar intermediación financiera, hace ya cuatro años.
Con una inversión de u$s15 millones, el conglomerado de empresas de servicios turísticos, financieros y de real estate busca pisar fuerte de cara a un momento central del desarrollo de la industria de banca digital.
No la tendrá fácil, ya que los grandes players del sector barajan distintas alternativas para arrebatar una porción de la torta. Sin embargo, tiene armas de sobra para entrar en la pelea grande.
Como ya es la norma en este segmento, la plataforma se operará de manera íntegramente digital a través de una aplicación en el teléfono o desde la web (Mobile y Web Banking), sin necesidad de concurrir en ningún momento a una sucursal física.
De esta manera, los usuarios de todo el país podrán hacerse de manera 100% online de una cuenta bancaria sin costo de apertura ni de mantenimiento, realizar transferencias y pagos de servicios, pedir créditos, constituir plazos fijos, comprar dólares y acceder a una tarjeta de crédito y débito, entre otros servicios.
Un aspecto diferencial de la propuesta de Grupo Transatlántica es su asociación con American Express, que desembarcará en el mercado fintech latinoamericano de la mano de Rebanking.
En diálogo con iProUP, Stefano Angeli, CEO de la entidad, revela que AMEX "quería elegir un banco para apoyar y avanzar en su desembarco. Luego de un análisis de mercado, nos eligió, ya que la adquisición de clientes es un aspecto fundamental en la industria".
En este sentido, añade: "Vieron en nosotros un gran potencial para comenzar a operar ya que en Transatlántica tenemos grandes alianzas con el sector de turismo".
La propuesta se completa con Mastercard, que será el otro socio de la "startup" para las tarjetas de débito y crédito. Además, operará a través de la red Banelco.
Si bien la aplicación y la web ya están listas, el lanzamiento oficial deberá esperar hasta finales del primer trimestre. Angeli explica que todavía resta la homologación con los proveedores, ya que Prisma será su socio en lo que refiere a tarjetas. En lo que refiere a transferencias, están trabajando en la puesta a punto con las redes de cajeros automáticos.
Una fintech "para fintechs"
Rebanking fue diseñada tanto para clientes finales como para pequeñas y medianas empresas. El ejecutivo aclara que "al ser una app, la puede descargar cualquier argentino".
Al respecto, señala que "los únicos requisitos son: ser mayor de edad, ciudadano argentino y presentar la documentación necesaria". El proceso es sencillo: a través del celular se toma una foto del documento de identidad, una selfie, se ingresa el domicilio y se validan los datos con un gesto.
Un nicho donde pretende marcar la diferencia es en el de las Pymes, ya que dispondrán de una propuesta para agregar soluciones financieras a sus plataformas digitales.
La empresa aclaró que mantendrán "la relación interpersonal que este tipo de segmento requiere".
En esa línea, funcionará como plataforma de servicios para que emprendedores, desarrolladores y empresas puedan apalancar su negocio e integrar distintas opciones para sus propios clientes.
"Por ejemplo, un eCommerce puede ofrecer planes de financiación a través de nuestra plataforma", destaca el ejecutivo y, suma: "Una fintech que no dispone de capital para prestar dinero puede aprovechar nuestra liquidez para brindar créditos".
Para Angeli, la coexistencia con el sector será "colaborativa y no competitiva"; por ende, no ve inconvenientes a la hora de operar como una "fintech para fintech".
Las declaraciones del CEO de Transatlántica a iProUP van en línea con lo que fue su anuncio de presentación, difundido días atrás, en el que había asegurado que el objetivo es "reinventar la industria junto con los otros jugadores del mercado, buscando ofrecer un servicio diferente enfocado en el cliente, más eficiente y con llegada a todo el país".
Al igual que ocurre con el resto del ecosistema fintech, el principal escollo a superar es el atraso en lo que refiere a bancarización y modernización de la estructura local, en comparación con el resto de los países de la región.
Con 110 empleados y una plataforma que promete tener presencia en todo el país, gracias a su red que se extiende en cientos de ciudades y centros comerciales, Transatlántica apuesta a que Rebanking se haga fuerte en un año que estará marcado por la fuerte expansión del sector.
"El gran problema a superar es la educación financiera, ya que el nivel de bancariación de la Argentina es bajo. No es solo un desafío para toda la industria, sino para todo el país avanzar en este punto", concluye Angeli.
Bancos digitales, en franco ascenso
En América Latina, la cantidad de emprendimientos vinculados a las plataformas que ofrecen servicios financieros creció 66% y se consolida como un sector en pleno auge, acaparando el 25% de las inversiones en tecnología de la información.
Los datos pertenecen a un informe del Banco Interamericano de Desarrollo, en donde se destaca a la Argentina en el cuarto puesto en la región, con un incremento de 61% en 2018.
También avanzó la cantidad de países en los que se encuentran presentes emprendimientos de este tipo, pasando de 15 a 18. Brasil, a la cabeza, continúa siendo el núcleo de la región con 380, mientras que México registra 273, Colombia 148, Argentina 116 y Chile 84.
En el ámbito local, casi la totalidad de las empresas puede categorizarse como Pyme: el 80% cuenta con menos de 50 empleados y sus índices de facturación coinciden con los de este tipo de organizaciones.
El ecosistema se encuentra en una fase de crecimiento, marcada por la adopción de nuevas tecnologías y la digitalización, que cobra fuerza en el país.
Prueba de ello son algunos de sus números: registra una tasa de crecimiento anual del 110%, ya emplea a casi 6.000 personas de forma directa y más de 90 mil indirectas según los últimos registros de la entidad dados a conocer en septiembre.
Por otro lado, la industria recibió en el último año inversiones extranjeras y exportó servicios a otras regiones de Latinoamérica, con un volumen total de transacciones de u$s6.000 millones.
Por ejemplo, en las tres recientes rondas de capital, la fintech Moni levantó u$s4,5 millones del Banco Mundial; mientras que Ualá consiguió u$s34 millones de Goldman Sachs y Soros. En tanto que 123Seguros percibió u$s3 millones de Alaya Capital y el fondo de inversión de Mercado Libre.
A pesar de la desconfianza que genera en algunos ámbitos el sector fintech, los analistas aseguran que el potencial es enorme.
"Somos el cuarto ecosistema en América Latina. Si tomamos como referencia el tamaño del mercado local, la Argentina tiene una cantidad y calidad desproporcionada de emprendedores fintech", expresó a iProUP Alejandro Cosentino, miembro de la Cámara Argentina de Fintech y CEO de Afluenta.
Por su parte, Juan Pablo Bruzzo, presidente de la Cámara Fintech, aseguró a iProUP: "Los bancos miran cantidad de sucursales. Nosotros reemplazamos eso con celulares. Donde hay un celular, hay un servicio fintech".
En la Argentina, según el Global Findex, el 49% de la población económicamente activa no tiene cuenta bancaria. Y de acuerdo con un informe de la consultora Deloitte, el 91% de las persona dispone de un celular.
Los datos invitan a soñar con un crecimiento sostenido del sector. Con players y clientes sumándose día a día, todo indica que tienen el apuntalamiento necesario para sortear la crisis local.