A finales de septiembre, el Banco Central reforzó el cepo y el "torniquete" apretó fuerte sobre todo en los pequeños ahorristas.
En ese entonces, la entidad liderada por Miguel Angel Pesce decretó que los empleados de empresas que abonaron salarios mediante el Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP) no podrían adquirir dólar ahorro.
Según el Banco Central, constituye un "plan de asistencia y está incluido en la comunicación A7105",de modo tal que quienes lo percibieron no pueden comprar moneda extranjera.
Solo en agosto, 1,7 millones de personas percibieron el ATP 5, por lo que quedaron automáticamente inhabilitadas, ya que trabajan en una de las 150.000 empresas que pidieron ayuda para pagar sueldos.
Se trata de una importante porción de la población que ya no puede acceder, al igual que ocurre con beneficiarios del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) y la Asignación Universal por Hijo (AUH), o con quienes refinanciaron la tarjeta de crédito o solicitaron un crédito a tasa cero.
Se trata de un grupo heterogéneo: muchos perciben ingresos que le permiten destinar mensualmente una parte al ahorro, por lo que han tenido que salir a buscar nuevas opciones de inversión para no tener el dinero "durmiendo bajo el colchón".
Afortunadamente, las alternativas sobran y, en muchos casos, no solo generan buenos retornos sino que, incluso, le ganan a la inflación. Mejor aún: se acceden con un par de toques desde el celular.
Cómo empezar
Ante el bloqueo puesto a la compra de dólares, existen dos caminos: utilizar "vía alternativas", que van desde el "dólar Mercado Libre" al "dólar Paypal", o buscar otros instrumentos que contribuyan a no perder con la devaluación y los aumentos de precios.
"Los argentinos estamos acostumbrados a elegir entre tres caminos: invertir en ladrillos, en dólares o poner la plata bajo el colchón", señala a iProUP Pablo Juanes Roig, CEO y Co-Founder de Banza, la fintech de inversiones local que opera desde 2019.
En su visión, la coyuntura local significa una oportunidad inmejorable para que muchos se suban a otras formas de canalizar el dinero, con madurez probada en la mayoría de los mercados del primer mundo.
Al respecto, Juanes Roig subraya que "todas estas trabajas abren una ventana enorme para que uno pueda acceder a otros activos, como los CEDEARs (Certificados de Depósitos Argentinos), Fondos Comunes de Inversión y alternativas de renta fija o variable".
De esta manera, los 20.000 pesos (incluyendo impuestos) que se destinaban a la compra del cupo mensual de u$s200, son un excelente punto de partida para ir por otras opciones.
Según el ejecutivo, solo en Banza ya se abrieron más de 20.000 cuentas en apenas seis meses. Para la gran mayoría, es la primera aproximación a estos instrumentos.
Los expertos afirman que el equivalente a 200 dólares es un buen monto para comenzar a invertir en la Bolsa
"Podés comenzar con muy poca plata. Si recién arrancás, lo más recomendable es ir por un Fondo Común de Inversión, tanto por su liquidez, diversificación y el equipo de profesionales que los administran. Son productos creados a medida de los clientes", aclara Juanes Roig.
Para operar simplemente se necesita una cuenta comitente. En Argentina, prácticamente todos los bancos la ofrecen, e incluso permiten apostar por sus propios FCI. En las fintech, la operatoria es similar.
Martín Sigwald, Portfolio Manager de Quiena, señala a iProUP que para aquellos que no hayan comprado dólares en los últimos 90 días, su plataforma permite fondear cuentas partiendo en moneda local y dólarizar los ahorros sin inclumpir normativas cambiarias, mediante la inversión en cuentas seguras reguladas por la SEC en Estados Unidos.
"Se puede ingresar con moneda local y dolarizarse. Así, el cliente se protege de los problemas inflacionarios del país, con una cuenta en EE.UU. a su nombre, fuera de cualquier inconveniente legal", señala.
Actualmente, la plataforma de Quiena brinda un amplio abanico de alternativas en base a más de 5.000 activos de las bolsas estadounidenses, sobre todo ETFs (Fondos de Inversión Cotizados).
En base a ello y a un modelo que suelen utilizar los "hedge Funds" (llamado Paridad de Riesgo) se arma una cartera en la que cada activo aporta el mismo nivel de riesgo en el tiempo.
Según Sigwald, un portfolio conservador obtiene un retorno de hasta 5%, lo que permite incluso ganarle a la inflación de los Estados Unidos. En tanto, la variante agresiva brinda hasta el 14,5% en dólares.
En este marco, un ahorrista argentino puede desembolsar todos los meses el equivalente a u$s200 del dólar ahorro que ya no puede comprar y no solo ganarle a los aumentos de precios, sino también "protegerse contra la devaluación norteamericana, que es algo que no podés hacer si guardás los billetes en el colchón", explica Sigwald.
Inversiones de bajo riesgo
Tanto Juanes Roig como Sigwald señalan que plataformas digitales hoy son muy aprovechadas sobre todo por quienes se ubican en un rango que va de los 18 a los 55 años. Los montos varían.
- En Banza (cuya base de usuarios se conforma de pequeños ahorristas), el ticket promedio se ubica en $50.000
- En Quiena, ese valor medio ronda los u$s4.000 dólares por cuenta
Según Sigwald, esto las transforma en alternativas más que interesantes frente a la banca privada, donde se suelen necesitar bastante más para que un asesor de bolsa acepte a un nuevo ahorrista.
Las plataformas de inversión ofrecen montos bajos para "entrar" y tienen asesoramiento especializado
"Hoy podemos brindarles a los usuarios mucha diversificación de la mano de ETFs, que pueden integrar hasta 200 acciones o bonos distintos. Este mecanismo permite acceder a un porftolio diversificado, igual a uno que invierte u$s2 millones", señala el ejecutivo de Quiena. "De este modo, brindamos el mismo servicio que los bancos pero enfocado a pequeños ahorristas", completa.
En Banza lanzaron este mes una nueva herramienta llamada "módulo Ahorro": un sistema de cartera de inversión automatizada en la que hay que indicar el objetivo (viaje, atesoramiento, consumo, etc.), ingresar el monto que se apunta lograr y cuándo se desea alcanzarlo.
"Armamos el plan de desembolso en una o varias cuotas, sugerimos la cartera y con un clic se distribuye bajo un estrategia que combina distintos FCI conservadores, moderados y agresivos", revela Juanes Roig. Añade que el objetivo es generar los rendimientos deseados "en un lapso menor de tiempo".
Se trata de un producto "ahorrista friendly", con un portfolio mayormente conservador para proteger el capital y que permite a usuarios primerizos familiarizarse con estos instrumentos.
"Si bien tenemos público amplio, que está haciendo sus primeras experiencias en renta fija y variable, la pandemia dejó espacio para canalizar el dinero que no está siendo volcado al esparcimiento y otros gastos. Eso se está destinando en muchos casos al ahorro para un posterior viaje o compra de algún bien cuando todo esto pase", sostiene el ejecutivo de Banza.
La mirada hacia afuera
Con una coyuntura volátil, que no da tregua y obliga a tener el ojo afinado a la hora de hacer rendir el dinero, los especialistas mirán más hacia afuera que adentro.
Juanes Roig asegura que en los últimos meses se registró un verdadero "boom" por los CEDEARs, que representan acciones en el exterior. El ejecutivo aclara que la mayoría de los usuarios de Banza se volcó por esta alternativa, que permite invertir montos relativamente bajos, ya que se redujeron los ratios para acceder.
"Tienen dos atractivos: por un lado posibilita monitorear la evolución de las acciones de grandes empresas como Amazon, Tesla o Apple, que están teniendo grandes rendimientos y, por otro, son una vía interesante de resguardar el patrimonio y cubrirse ante las variaciones del tipo de cambio", añade el directivo.
Para Gustavo Neffa, director de Research For Traders, hoy hay pocas opciones locales. En ese marco, recomienda TecPetrol 2022, Arcor 2023, YPF 2024 o VistaOIL 2021,2024 entre las más atractivas de un mercado que no está en su mejor momento.
En el mismo tono se pronuncia Sigwald, que advierte: "Hoy los activos locales son de alto riesgo y no son para cualquiera, por lo que deberían ser una parte menor de sus carteras".
Para el ejecutivo de Quiena, es clave apuntar a una "diversificación geográfica" para disminuir el impacto local: "Si los ingresos y ahorros se mantienen en el país, se ven beneficiados y castigados a la vez".
Así, aun sin los u$s200 mensuales, los ahorristas argentinos puede hacer rendir sus ingresos: ya sean ADRs, CEDEARs, Fondos Comunes o los instrumentos que elijan, las alternativas están al alcance de la mano y con chances de, no solo ganarle a la inflación, sino también de hacerse de unos pesos (o dólares) extra.