La cuarentena puso a las fintech en el centro de las escena. Mientras la Anses dilata el cobro de la IFE vía CVU y cosecha críticas a su paso, los argentinos, que ya transitan más de un mes de aislamiento obligatorio, se vuelcan cada vez más a su uso para aprovechar el amplio abanico de servicios que propone de los que disponen este tipo de empresas, siempre con la "simplicidad" como factor denominador común.
Según datos aportados por la Cámara Argentina de Fintech, ya son más de 6.500.000 las billeteras virtuales operativas en el país, cada una de ellas con su correspondiente CVU. Se trata de un crecimiento exponencial para un ecosistema que, en menos de un lustro, logró madurar su propuesta de servicios.
Es que su oferta va más allá de un simple soporte de pagos online. Las fintech son verdaderas "navajas suizas", desde las que se disparan todo tipo de funcionalidades: desde abonar servicios, recargar celulares y solicitar préstamos, a invertir en fondos comunes y realizar compras por la web de todo tipo de servicios, han sabido adaptarse a lo que su demanda exige.
A nivel local, la oferta se sigue ampliando: Mercado Pago y Ualá son los dos grandes del segmento y los que se llevan el grueso de los usuarios. En el segundo pelotón se encuentran firmas como Moni y Naranja X, que también han consolidado sus plataformas en un segmento cada vez más competitivo.
Desde los inicios de la cuarentena, se ha multiplicado la utilización de estas plataformas por parte del público en un rango de entre el 120 y el 800% según el caso, de acuerdo a mediciones de la Cámara Fintech, lo que demuestra cuán necesarias son este tipo de soluciones, sobre todo en tiempos de aislamiento social que obligan a prescindir del efectivo y apostar, de una vez por todas, a un ecosistema de pagos mayormente digital.
Surge otro dato que grafica el buen momento de estas empresas: desde marzo a mediados de abril, las cuatro empresas mencionadas sumaron a más de 200 nuevos empleados a sus equipos de trabajo. Sus directivos coinciden en lo excepcional de la situación: con todas sus operaciones en modo "home office", todavía no los conocen en persona.
El "efecto cuarentena" en Mercado Libre y Ualá
El uso de billeteras virtuales se aceleró durante la pandemia, si bien ya mostraba claros signos positivos durante el primer trimestre de 2020 y se confirmaron en las semanas previas a que se decretara la cuarentena en todo el país.
De acuerdo con el último informe UDE Link de Red Link, en marzo se sumaron más de 2 millones de usuarios a las distintas plataformas contempladas dentro del estudio de Uso del Dinero Electrónico (UDE), como se denomina a los movimientos de dinero a través de los cajeros automáticos, la computadora o el celular, y las diversas aplicaciones para efectuar transacciones.
El reporte señala además que el mayor crecimiento en materia de usuarios que se incorporaron al uso del dinero electrónico se registró en el segmento de las transferencias inmediatas: 1.152.520 (40%). Allí, las billeteras "4.0" y sus CVU tuvieron gran parte del mérito.
En diálogo con iProUP, Pierpaolo Barbieri, CEO de Ualá, destaca que su plataforma experimentó un "pico exponencial al principio de la cuarentena". Esto, señala, estuvo compuesto por "la llegada de nuevos usuarios, aquellos que la utilizaban poco y ahora la usan mucho más y, tercero, los más fieles que son los que evangelizan el producto".
Sin embargo, para el ejecutivo, más que este crecimiento orgánico, el verdadero titular es que "el cambio que esperábamos en meses u años se dio en semanas". Esto, desde ya, obliga reforzar la labor diaria. Según Barbieri, en Ualá se trabajó para bajar la velocidad de las validaciones de nuevos usuarios a menos de 24hs, cuando antes se tardaba hasta 48hs. En total, cuenta con más de 1.500.000 cuentan activas.
"El último fin de semana tuvimos un pico con más de 25.000 personas que se sumaron a Ualá. Son individuos que realizaron registro completo y ya tienen su tarjeta emitida, no se quedaron sólo en el login. Eso requiere normas regulatorias, de lavado de dinero, la UIF, etc", subraya el ejecutivo.
Asimismo, a pesar de ser un producto de perfil "millennial", en el último mes notaron a muchos más mayores pidiendo la tarjeta. Este nuevo público, señala la empresa, también refleja mayores ingresos.
"Creció mucho el uso de tarjeta para distintos pagos digitales, sea Netflix, compras por Mercado Libre o comida. Incluso, creció 200% el pago de servicios y 35% la plata en el fondo común de inversión, al que ya se sumaron 350.000 personas", revela Barbieri.
En Mercado Pago, el fenómeno fue similar. "Notamos un gran crecimiento en la cantidad de usuarios que se volcaron a abonar sus servicios a través de nuestra billetera sin salir de casa", señala a iProUP Alejandro Melhem, Country Manager de la fintech de Mercado Libre.
"Sólo en la segunda mitad de marzo se registró un crecimiento del 110% en usuarios únicos y del 90% en la cantidad de facturas pagadas, ambos indicadores comparados contra el mes anterior. Incluso se incrementó el pago de servicios e impuestos en entidades provinciales, lo que evidencia un crecimiento también del uso de la herramienta en el interior del país", agrega.
Durante el último mes, la empresa registró más de 1,2 millones descargas de la app. Aquellos que utilizaron la billetera por primera vez, lo hicieron, principalmente, en pagos de servicios y recargas.
La billetera digital, que supera los 2,3 millones de usuarios en el país (y casi 8 millones a nivel regional), también es útil para aquellos que en el marco de la cuarentena necesitan salir a hacer compras esenciales en supermercados, farmacias, verdulerías y almacenes de cercanía. Al respecto, Melhem explica que, si bien el uso general de los pagos con QR bajó, acompañando la menor actividad, "en
supermercados y almacenes ya muestran un 20% de crecimiento respecto a las semanas previas a la cuarentena".
Además, aclara: "También estamos viendo como se duplicaron los envíos de dinero sin costo y sin moverse de casa, a través de la nueva función Amigos que permite transferir dinero y hacer vaquitas para compartir gastos o comprar regalos, por ejemplo, de una manera muy simple y solo teniendo agendado al contacto en el teléfono".
Fuera de la billetera, un fenómeno impulsado por la cuarentena fue el crecimiento de su herramienta de link de pago, donde ya tienen un 90% más de vendedores activos. Arregui destaca en este sentido que el link de pago permitió que la facturación de estos vendedores creciera un 100% mediante este canal.
Oportunidad para consolidar productos
Naranja X es otra de las empresas que experimentó un importante crecimiento, que se consolidó durante el periodo de aislamiento. Gaston Yrigoyen, CEO de la fintech asegura que "el Covid y el aislamiento en general están acelerando la migración a los pagos digitales. El efectivo, además de ser inseguro, es caro, incómodo, y posee restricciones físicas, lo que obligó a buscar mecanismos digitales".
"Esto ratifica la irrupción de las billeteras digitales y otros medios electrónicos", subraya. En ese sentido, para acompañar a consumidores y comerciantes, la firma lanzó distintas promos durante la cuarentena, lo que permitió impulsar los niveles de uso.
Yrigoyen señala, en este línea, un auge de transferencias entre personas, con un crecimiento "arriba del 90%". Asimismo, repuntaron de modo acelerado los pagos de servicios y de su Link de pago para comercios, que duplicó la cantidad de usuarios y tuvo un crecimiento del 200% en volumen. En apenas 6 meses la plataforma sumó 125.000 cuentas, que se añaden a los 60.000 que utilizan Naranja POS, su terminal móvil de pagos. Su visión, compartida por toda la industria, es que se está experimentado, sobre todo en estas semanas, una "migración impresionante a canales digitales. Cuando se aplica no hay vuelta atrás".
Sin embargo, mantiene los pies sobre la tierra. Que la coyuntura se haya modificado de modo abrupto no implica que el roadmap deba dar un giro de 180 grados. "Por ahora no hemos tomado decisiones dramáticas, ya que para nosotros la empresa es una construcción a largo plazo. Si bien cambian algunos hábitos, considero que son cuestiones coyunturales".
En el caso de Moni, la pandemia no solo impulsó algunos de sus verticales de negocio, sino que ratificó el camino tomado con el lanzamiento de Monicard, su plástico prepago. "Nosotros tenemos una billetera bastante amplia, con préstamos, recarga de SUBE y del telefono, pago de facturas y la tarjeta", señala a iProUP Juan Pablo Bruzzo, su CEO."En ese sentido, creció mucho el pago de servicios debido a las restricciones de circulación y, lógicamente, cayó el uso de algunas funcionalidades ya que muchas personas permanecen conectadas en sus casas", añade.
Es, justamente, el pago de servicios uno de los grandes aciertos en épocas de cuarentena. Según Bruzzo, que además forma parte de la directiva de la Cámara Fintech, son 15 millones de personas las que todos los meses salían a la calles a saldar sus facturas. Las fintech, en ese sentido, fueron una solución ideal para suplir a los puestos "a la calle".
Respecto de la tarjeta, el ejecutivo señala que, una vez que se da de alta el usuario, se le entrega una versión virtual de la misma. De esta manera, mientras la versión física va, vía correo, al hogar, los usuarios ya pueden utilizarla para el pago de servicios digitales. Según Bruzzo, su uso se disparó en dos segmentos. Por un lado, en el pago de juegos (Steam, Google, PlayStation, etc.) y, por otro, la cancelación de impuestos. Sobre la cuarentena, el ejecutivo señala que, por ahora "no cambió el desarrollo de productos estratégicos, como el pago QR, que ya estamos haciendo las primeras pruebas". Asimismo, señala que, más que una explosión en el uso de medios digitales, lo que generó fue "una aceleración, ya que está sumando clientes que no solían operar con este formato, o que no consumían todo el producto -por ejemplo, utilizaban los préstamos y no consumían pago de servicios".
"Si bien en estos casos el volumen total no aumenta, lo bueno es que tenés más clientes que están probando productos nuevos", concluye.