La escasez global de desarrolladores, la dificultad de muchas empresas para pagar sueldos talento tecnológico y la creciente demanda de innovación en todas las industrias, impulsa la adopción de plataformas low code/no code: una alternativa para desarrollar aplicaciones rápido y barato, y disponer de múltiples funcionalidades sin crear software desde cero.
En tiempos de vacas flacas, tanto en lo económico como de cantidad de talentos, los paradigmas no code (sin código) y low code (bajo código) permiten crear software sin requerir personal informático altamente capacitado.
No sólo eso: estas plataformas son cada vez más usadas por desarrolladores profesionales para alivianar sus tareas de programación manual, en muchos casos repetitivas, y agilizar sus tiempos de productividad.
Un estudio de IDC señala que estas tecnologías experimentan una fuerte demanda, tanto de programadores como de otros perfiles no técnicos, y pronostica que los ingresos de este mercado crecerán al 18% anual en los próximos dos años, hasta los u$s21.000 millones.
Nahuel Lema, cofundador y BDR en Coderhouse, añade que incorporar low-code/no-code es clave, sobre todo en procesos de desarrollo de un Producto Mínimo Viable (MVP, por su siglas en inglés) o en la fase inicial de un proyecto.
"Me cuesta ver una empresa que no encaje dentro de alguna de las tantas soluciones disponibles en el mercado: todas se podrían ver beneficiadas", opina el experto, quien destaca como ventajas:
Gartner predice que, para el 2025, el 70% de las aplicaciones empresariales estarán utilizando tecnologías low code y, además, pronostica que para el 2026, al menos el 80% de los usuarios estas herramientas serán personas no técnicas.
Natalia Terlizzi, CEO de Hucap, revela a iProUP que crece la contratación de profesionales que manejen plataformas de low code, en parte por la escasez de talentos en el área de programación, ya que muchos trabajan de forma 100% remota y en dólares para el exterior.
Según la experta, "aquellos profesionales que poseen conocimientos en ambas metodologías, tanto low code como high code, tendrán una gran oportunidad el mercado".
"Son capaces de utilizar ambos conocimientos según las necesidades específicas y aprovechar lo mejor de ambas: high code, para proyectos de mayor complejidad y que requieren un alto grado de personalización; y low code para agilizar tareas más simples", completa.
En ese sentido, una encuesta de Appian destaca que:
Terlizzi agrega que la búsqueda de estos perfiles está más atada al tipo de proyecto que al tipo de empresa. En ese sentido, los profesionales low code son más valorados en aquellos en los que se busca evitar la codificación manual intensiva que solo un programador puede realizar, tanto por un tema de costos como de tiempos de desarrollo.
Aunque en Hucap no desglosa en su estudio de Compensaciones y Beneficios por tipo de programación, no excluye que profesionales informáticos utilizar low code, sobre todo los perfiles junior. Así, un desarrollador cobra en Argentina según su especialidad:
Dylan Ayala, desarrollador de Aplicaciones Senior en CSA Latam, asegura a iProUP que la contratación de profesionales con experiencia en low code es más evidente en sectores donde la innovación tecnológica es clave, como tecnología, finanzas, salud y marketing digital.
Lema explica que en Coderhouse ofrecen una serie de cursos orientados a soluciones como Bubble, centrado principalmente en desarrollo de productos, pero también otros cursos de PowerBI, Looker Studio o Tableau, que son los más solicitados para equipos y profesionales que necesitan implementarlos en sus procesos de análisis de datos.
Si el uso de low code es clave para desarrollar en menos tiempo y a menor costo, la integración con Inteligencia Artificial (IA) permite alcanzar una eficiencia aún mayor para crear aplicaciones y soluciones más robustas.
Ayala remarca que pueden combinarse de varias maneras. Por ejemplo, integrar funcionalidades de IA preconstruidas, como análisis predictivo o reconocimiento de imágenes, o proponer ideas en los formatos de las plataformas, teniendo en cuenta el contexto de los clientes. Además, los desarrolladores pueden utilizar herramientas de low code para crear y desplegar modelos de IA personalizados de forma más rápida y sencilla.
Por su parte, Lema añade que "cada vez más la interfaz comienza a ser un prompt como disparador inicial de la creación de workflows o soluciones, para que luego podamos adaptarlo mejor a nuestras necesidades. Copilot, dentro de las soluciones de Microsoft, Canva o Notion, entre otros, ya forma parte de su interacción con la plataforma o herramienta para que haga distintas acciones".
Agustín Méndez, socio de The Bermuda, asegura a iProUP que aún no utilizan low code pero sí IA a diario, e incluso alientan su uso dentro de la compañía, ya que les "sirve para realizar un montón de tareas que son muy repetitivas o triviales para acelerar los tiempos, pero también en proyectos que nos representan una gran complejidad para el desarrollo y llevan mucho tiempo de codificar".
"Para eso tenemos modelos de ChatGPT preentrenados con reglas nuestras en cuestión de minutos tenemos resuelto algo que probablemente nos hubiera llevado horas. Eso lo que nos tiempo para hacer foco en lo que consideramos realmente importante", concluye Méndez.