En un mundo cada vez más complejon se vuelve indispensable darles una respuesta correcta a los consumidores y usuarios. ¿Qué significa esto? Poder innovar y diseñar productos y soluciones que satisfagan las demandas de las personas.
En este escenario, el ingeniero en innovación y desarrollo (I D) es un perfil clave en las empresas actuales, especialmente en un contexto de incertidumbre económica.
"Su función principal es liderar proyectos de innovación para crear nuevos productos, servicios y procesos que generen valor y ventajas competitivas", asegura a iProUP Carlos Ramonda, decano de Ciencias Aplicadas de Universidad Siglo 21.
Las responsabilidades de un especialista en I D "pasan por identificar oportunidades de investigación y desarrollo que puedan beneficiar a la organización, planificar y ejecutar proyectos desde su concepción hasta su implementación", enumera Paula Sánchez, especialista en Atracción de Talento en Ceta Capital Humano.
Además, la ejecutiva añade que estos profesionales deben "evaluar la viabilidad técnica y económica de las iniciativas innovadoras que encaran y mantenerse aggiornados con los avances en su campo de especialización".
En el mundo actual, este rol viene transformándose y cobrando cada vez más relevancia. "Hoy se requieren perfiles con conocimientos no sólo técnicos, sino también de negocios, creatividad, liderazgo y habilidades blandas para impulsar la innovación de manera integral", detalla Ramonda.
A esto hay que sumar el rol que está teniendo la Inteligencia Artificial en esta actividad. "En este caso particular, permite potenciar las capacidades de análisis de datos, prototipado y toma de decisiones", dice el decano.
En materia de ingresos, su importancia dentro de las organizaciones queda representada por el valor de los sueldos.
En la Argentina, el salario de quien trabaja en área de I D arranca en el millón de pesos mensuales, subiendo a medida que aumenta el seniority. A su vez, en las startups a esto se le debe sumar un esquema de participación accionaria.
Este tipo de empresas los buscan insistentemente, ya que deben llegar rápido a un Producto Viable Mínimo (MVP, por su sigla en inglés) para salir al mercado y buscar inversores.
"En un mercado incierto y ante la crisis inflacionaria, la labor del I D es fundamental para que las empresas puedan reinventarse, mejorar eficiencias, reducir costos y encontrar nuevas oportunidades de crecimiento", indica Ramonda.
En este sentido, Sánchez señala que "la optimización de procesos y de nuevas tecnologías que se adopten puede permitir reducir costos, tiempos y aumentar la eficiencia operativa. Al disminuir el uso de recursos se aminora el impacto de la inflación en los costos de producción".
Incluso, "apelar a desarrollar productos accesibles y de buena calidad (buscando alternativas de materiales más económicos o procesos de fabricación más eficientes) y diversificar las fuentes de ingresos pueden ser otras líneas de acción acordes que puede encauzar", ejemplifica la líder de Ceta Capital Humano.
"También, el hecho de establecer alianzas estratégicas con universidades, instituciones de investigación y empresas del sector para aprovechar sinergias y acelerar el desarrollo de soluciones innovadoras en conjunto", aclara Sánchez.
Por su parte, Nicolás Baccigalupo, CEO de Octopus Proptech, señala a iProUP que en tiempo de crisis "las necesidades y preferencias de los consumidores pueden cambiar drásticamente".
Entonces, frente a estos movimientos "los especialistas en I D pueden realizar estudios y análisis de tendencias para identificar nichos de mercado emergentes o áreas donde la demanda está creciendo, lo que permite a las empresas adaptar sus estrategias comerciales para aprovechar estas oportunidades", dice Baccigalupo.
"Los beneficios que los ingenieros en I D aportan incluyen la generación de innovaciones que abren nuevas fuentes de ingresos, optimizan procesos, mejoran la experiencia del cliente y refuerzan el posicionamiento de la marca", indica el decano.
Y es que su visión estratégica y capacidad para llevar a cabo proyectos "son fundamentales para que las empresas puedan adaptarse y crecer en entornos en constante cambio", detalla el docente.
Para concretar estos beneficios, su interacción es con múltiples áreas: marketing, operaciones y alta gerencia para "implementar innovaciones, así como también en áreas ligadas al diseño y revisión de procesos", especifica Ramonda.
Entonces, estos perfiles deben tener una combinación única de conocimientos técnicos y habilidades gerenciales para liderar la transformación de los negocios, sobre todo en la economía del conocimiento.
"Los perfiles de especialistas en I D pueden provenir de una variedad de carreras y disciplinas. Algunas áreas académicas comunes incluyen ciencias naturales, como biología, química, física o matemáticas, que proporcionan una base sólida para comprender los principios científicos detrás de los productos y tecnologías", enumera Baccigalupo. Y detalla que también hay especialistas con formación en ingeniería eléctrica, mecánica, química, biomédica o de software.
Pero aún hay más, aunque pueda ser menos frecuente, algunos de estos talentos surgen de "disciplinas como psicología, economía, sociología o diseño, que pueden ser relevantes para proyectos relacionados con la experiencia del usuario, la economía del comportamiento o el diseño de productos", especifica el CEO.
Los sectores industriales con mayor demanda de estos perfiles "son aquellos altamente dinámicos y basados en el conocimiento, como la tecnología, la salud, la energía y los servicios. Asimismo, las startups buscan activamente estos profesionales para desarrollar modelos disruptivos", afirma Ramonda.
Este perfil es "a menudo escaso en talento y la demanda por este tipo de profesionales está en crecimiento", cuenta Baccigalupo.
Y aclara que esto se debe a varios factores. "En primer lugar, el avance tecnológico aceleró el ritmo de la innovación en muchas industrias, lo que aumenta la necesidad de expertos en investigación y desarrollo para mantenerse al día con las últimas tendencias y tecnologías".
Por último, el CEO de Octopus Proptech relata que "la competencia en el mercado global ha intensificado la presión sobre las empresas para diferenciarse a través de la innovación, lo que ha llevado a una mayor demanda de especialistas en I D".