El sector automotor es uno de los más golpeados en la Argentina, como consecuencia de la alta inflación y el fuerte ajuste fiscal implementado por el nuevo Gobierno.
En febrero se patentaron 24.811 vehículos a nivel nacional, un 26.9% menos que en enero de 2024 y un 18.7% menos que en febrero de 2023.
Como consecuencia, algunas empresas debieron recurrir a despidos de personal. Toyota es uno de esos casos, la cual reestructuró su nómina a causa de un descenso en la demanda de vehículos.
En concreto, se conoció que la compañía automotriz lanzará un plan de retiros voluntarios a través del cual reducirá en aproximadamente 400 puestos su plantel laboral.
La decisión fue comunicada por la multinacional a los representantes de SMATA, el gremio de mecánicos, y próximamente definirá las condiciones en las que se implementarán los retiros voluntarios.
De hecho, fuentes del sector indicaron que Toyota espera producir unas 25.000 unidades menos que en 2023. Pasarán de unas 186.000 a unas 160.000 unidades producidas, con el objetivo de ajustarse a la crisis económica.
De hecho, meses atrás se conoció que Toyota recortó las horas extra a sus operarios y paralizó la producción durante todo un turno los lunes.
Se espera que otras empresas del rubro sigan estos pasos.
Toyota invirtió hasta u$s50 millones en su operación local para producir el modelo utilitario Hiace, que es el tercer vehículo junto a Hilux y SW4, fabricado en sus talleres de Zárate.