El gigante de internet Google anunció recientemente que exigirá a todos sus empleados que trabajen en sus instalaciones que hayan recibido la vacuna contra el coronavirus COVID-19, una medida dictada en un momento de creciente exigencia por la inmunización de parte de empresas y organismos en los Estados Unidos.
Dada la pandemia acaecida en 2020 y extendida este año, el trabajo remoto terminó por asentarse como modalidad principal. Sin embargo, ahora que la situación comenzó a mejorar a nível mundial, algunas empresas consideran nuevas formas de trabajo como el hibrído, pero muchas otras creen conveniente readaptar sus sistemas a marcos pre-pandémicos adaptado sus políticas de trabajo para permitir a sus empleados volver a las oficinas.
Eso sí, la vuelta a las oficinas en EE.UU requerirá de condiciones especiales que las empresas deberán acatar. La principal será la obligación de los empleados que deseen la vuelta a la normalidad, de estar vacunados contra el COVID-19, una propuesta promovida por el propio Google.
En una carta a sus empleados, Sundar Pichai, CEO de Alphabet (empresa matriz de Google) dió a conocer este requisito, según informó The New York Times, la cual tuvo acceso a la misma.
"Vacunarnos es una de las formas más importantes para que nosotros y nuestras comunidades locales nos mantengamos saludables", indicó Pichai en el comunciado.
El requisito entra en vigor a partir de la semana próxima para los empleados de la multinacional en el país norteamericano. Posteriormente, se aplicará a otras regiones en los meses subsiguientes, de lo que dependerá la disponibilidad de vacunas en cada parte del mundo.
Google propondrá la vuelta a la presencialidad en el trabajo solo si sus empleados recibieron la vacuna contra el coronavirus
A fines de marzo de 2020, Google cerró la mayor parte de sus instalaciones y pidió a sus empleados que trabajaran desde casa hasta nuevo aviso como la mayoría de las compañías del mundo.
El miércoles, retrasó la fecha oficial de regreso a los puestos hasta el 18 de octubre, tras haberla fijado inicialmente para el 1 de septiembre. Apple también retrasó la vuelta a las oficinas para el mismo mes como muy pronto.
Luego de esta fecha, casi el 80% de los empleados deberán trabajar físicamente en las instalaciones de la firma al menos tres días a la semana. Google estima que alrededor del 20% deberán seguir trabajando desde casa.
El ejecutivo reconoció que la extensión del home office se debe al avance de la cepa Delta, que tiene una mayor contagiosidad y virulencia que la variante original del virus: "Reconocemos que muchos empleados de Google están viendo picos en sus comunidades causados por la variante Delta y están preocupados por regresar a la oficina. Esta extensión nos dará tiempo para volver al trabajo y, al mismo tiempo, brindará flexibilidad a quienes la necesiten".
De acuerdo con la Agencia Federal para el Cumplimiento de las Leyes Contra la Discriminación en el Lugar de Trabajo (EEOC) de EE.UU, los empleadores pueden exigir a sus empleados que presenten prueba de vacunación anticovid, con excepciones por razones médicas u objeciones religiosas.
"Espero que estos pasos les den a todos una mayor tranquilidad a medida que reabren las oficinas", concluyó Pichai.
Google había fijado la vuelta a la presencialidad para principios de septiembre, pero la variante Delta obligó a retrasar los planes del gigante de internet
Combinación entre el teletrabajo y la presencialidad
El teletrabajo recibió un impulso espectacular durante la pandemia de coronavirus, al permitir que mantuviesen su actividad muchas empresas y sectores donde es posible trabajar de manera remota, y elevar hasta máximos históricos el porcentaje de trabajadores que trasladaron su oficina a su domicilio.
Sin embargo, este despegue del teletrabajo no estuvo exento de consecuencias negativas. Algunos teletrabajadores admitieron que esta modalidad incrementó su jornada laboral, y que no se pagaban esas horas extra.
Por otra parte, este experimento puso a prueba la conciliación entre la vida profesional y personal, especialmente entre las mujeres, e incrementó la desigualdad laboral de género.
Tras demostrar la viabilidad, pero también las falencias del trabajo en remoto durante este último año, muchas empresas seguirán ofreciendo esta propuesta a sus trabajadores.
Algunas de ellas, sin embargo, requerirán varios días de la semana presenciales, y, paulatinamente, se suprimirá el home office en una clara iniciativa por la vuelta a la normalidad laboral.
Varias empresas comenzarán a exigir varios días de presencialidad a sus empleados
El mes pasado, por ejemplo, el gran banco estadounidense Morgan Stanley así como la gestora de activos BlackRock detallaron que solo los empleados vacunados tendrían acceso a sus locales próximamente.
¿Cómo se transformaron las oficinas en la era post-Covid?
Según una encuesta a 4.000 trabajadores, el 69% de los trabajadores remotos se sentirían cómodos al regresar a la oficina, aunque un 80% de los empleados afirma que disfruta trabajando en remoto. "Entramos en la era de la flexibilidad, no hay duda, y las empresas tendrán que adaptarse si quieren contar con los mejores", advirtió Manel Fernández Jaria, profesor colaborador de los Estudios de Economía y Empresa de la UOC.
De hecho, un 76% afirma que si tuviera que buscar un empleo buscaría uno con opción de trabajo en remoto. "A las compañías que no se adapten les será difícil atraer talento por no tener una política de conciliación flexible o a medida del trabajador. La gente no querrá trabajar en según qué condiciones", añadió.
Entre el trabajo en remoto diario y la presencialidad a tiempo completo en la oficina, existen los modelos híbridos. "Este es y será el modelo más frecuente en los puestos que permitan el teletrabajo", considera Eva Rimbau, profesora de los Estudios de Economía y Empresa de la UOC. Muchos estudios pospandemia afirman que los trabajadores quieren seguir con el teletrabajo, manteniendo como mínimo un día de remoto, y en un alto porcentaje prefieren 3-4 días de remoto a la semana.
El modelo mixto −según Jaria− es el que tiene más posibilidades de quedarse, los encuentros presenciales van a ser necesarios, pero el trabajo efectivo se hará en remoto.
Teletrabajar dos días (32 %) o tres días (36 %) a la semana es la más popular, y en condiciones idóneas mejora el rendimiento un 19% y la calidad del trabajo un 10%, el mismo porcentaje en que sube el orgullo de pertenencia, señala el estudio.
"No hay fórmulas para defender ir a la oficina unos días u otros, la respuesta la tendrán los empleados y las actividades a realizar; seguir pidiendo presencialidad en las empresas puede dar problemas, lo importante es encontrar la mejor forma de organizar el trabajo en la empresa", advirtió Rimbau.