Una madre de 11 me contactó por privado en Twitter: "mi hijo de 11 no para de llorar, quiere jugar al nuevo Fortnite y yo no entiendo nada. Necesito tu ayuda". Para algunos parece chiste pero para otros no lo fue, y es así como miles de padres poco o nada gamers de todo el mundo deben ayer contactado con otros "que le gustan los jueguitos" para tratar de entender el fenómeno.
Lo cierto es que el Fortnite no estaba, literalmente, había desaparecido. En su lugar, el mapa de juego donde tienen lugar los combates fue absorbido literalmente por un agujero negro, evento que todos los que estaban en ese momento jugando pudieron ver al mismo tiempo sin entender demasiado qué era lo que estaba pasando.
Y desde entonces, nadie puede jugar a Fortnite. ¿Qué ha pasado exactamente? Es difícil de saber, pero el juego no se puede jugar. No está online, nadie puede acceder, y los mensajes de pánico de gamers de todo el mundo siguen circulando. Y esto es lo único que se puede ver del juego a través de sus redes sociales.
Para los que están un poco más cerca del Fortnite, se sabía que esto iba a pasar y que forma parte de la impresionante maquinaria de marketing digital de Epic Games, el estudio de videojuegos propiedad de Tencent (la mayor empresa china de videojuegos del mundo).
No es la primera vez que ocasionan ataques de pánico y ansiedad antes de que cambie el contenido de su videojuego, pues Fortnite cada pocos meses lanza una nueva 'temporada', como si se tratara de una serie de televisión, y cambian muchos elementos, desde el mapa donde se juega hasta la manera en la que funcionan las armas.
Y, por supuesto, también añaden nuevas 'skins' y bailes y parapentes y otros accesorios que son los que mantienen enganchada la gente, sean niños o no tan niños. Son muy originales y sólo se pueden conseguir en dicha temporada por lo que una vez que termina, la mayoría dejan de estar disponibles. Para siempre, nunca más. Así es como gana dinero Epic Games: las mejores cosas se consiguen únicamente pagando el 'pase de la temporada' o jugando mucho o, en algunos casos, comprando paVos (la moneda digital de Fortnite) para gastarlos en dichos accesorios.
Sabiendo esto, no es de extrañar que ayer todo el mundo en torno a Fortnite implosionara, literal y figuradamente. Quienes estaban conectados al juego pudieron ver cómo su personaje, era absorbido por el agujero negro de forma inevitable.
Aquí radica una de las claves de estos eventos: los jugadores lo pueden ver dentro del juego. No son un tráiler, no son un mensaje en redes sociales, son parte del juego y buscando dejar marcadas las mentes de sus jugadores, crean experiencias que serán contadas por años y años. "Yo estuve el día que Fortnite fue destruido por un agujero negro" será en el futuro el "yo vi jugar a Maradona" o "yo vi tocar a los Redondos". Bien hecho Epic.