La ONG Bitcoin Argentina le hizo una propuesta formal al Banco Central de la República Argentina (BCRA) para que los bancos puedan admitir el depósito y la liquidación de criptomonedas cobradas por trabajadores que exportan sus servicios al exterior y reciben pagos en activos como Bitcoin, Ethereum o USDT, conocido como dólar cripto, y no en dólares tradicionales.
Así lo hizo mediante una carta firmada por Ricardo Mihura Estrada, presidente de la asociación civil que nuclea a usuarios y defensores del ecosistema en el país, dirigida al titular del organismo, Santiago Bausili, a la que tuvo acceso iProUP.
En ella, manifiestan que la actual situación regulatoria es "de imposible cumplimiento" para los frelancers que exportan sus servicios y perciben su retribución en Bitcoin, stablecoins y otros criptoactivos.
Freelancers y criptomonedas: ¿cuál es el contexto detrás del pedido al BCRA?
En la actualidad, el Banco Central exige que los ingresos sean liquidados en el mercado de cambios local. Sin embargo, las entidades financieras tienen prohibido "realizar ni facilitar a sus clientes la realización de operaciones con activos digitales", tal y como establece la Comunicación "A" 7759 del BCRA, de mayo del 2023, lo que bloquea esta posibilidad.
Además, aunque existe una franquicia que permite omitir la liquidación forzosa de ingresos hasta un límite anual de u$s36.000, recientemente ampliado, este beneficio no es aplicable a quienes perciben pagos en Bitcoin u otros criptoactivos, ya que estos no se consideran moneda extranjera ni pueden ser ingresados a cuentas bancarias locales bajo la normativa vigente.
Desde la ONG Bitcoin Argentina aseguran que todas estas restricciones afectan a los profesionales de la Economía del Conocimiento, un sector clave, en constante crecimiento y cuyo motor principal es la exportación de servicios.
Según el último Argenconomics, elaborado por Argencom, entidad que nuclea a empresas prestadoras de servicios de todos los verticales de la EdC, en los últimos cuatro cuatrimestres, hasta julio de 2024, las exportaciones alcanzaron los u$s7.831 millones.
"Hace tiempo que los controles cambiarios son un limitante para los freelancers argentinos", sostiene Julián Colombo, Director General de Bitso Argentina, a iProUP.
En este sentido, y según datos de Bitwage, el 70% de los argentinos que usan la plataforma para cobrar por sus trabajos realizados al exterior en criptomonedas eligen hacerlo en stablecoins como USDT o USDC. Además, según los últimos datos de la exchange, más del 50 % de los usuarios argentinos de la plataforma reciben entre u$s2.500 y u$s5.000 al mes.
Por su parte, el dólar cripto representó, durante el primer semestre del año, el 40,7% de la cartera de los usuarios de Lemon, apenas un punto porcentual por debajo de BTC. Además, de las 55 millones de personas que abren una app cripto en América Latina para manejar sus criptoactivos, 4 de cada 10 son de Argentina.
Esto sugiere que 22 millones de personas utilizan wallets o billeteras virtuales vinculadas a criptomonedas. Este dato no es menor, ya que representa el 47,7% de los 46.044.703 habitantes que, según el último Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas, residen en el país.
Es en este marco que, desde la ONG Bitcoin Argentina, aseveran que el sistema actual lleva a "vías informales".
"La ineludible consecuencia es que estas exportaciones tienden a no facturarse y a mantenerse en el mercado informal, un mercado que ofrece bastante liquidez, especialmente para el intercambio de stablecoins por pesos y/o dólares en efectivo", argumentan.
"Ciertamente, de esta forma, el impedimento de origen cambiario termina arrastrando la omisión de facturación y eventualmente de tributación, así como la consecuente pérdida de recaudación y de divisas de reserva para el sistema financiero", agregan.
La propuesta al Banco Central
Es por eso que, desde la entidad, desarrollaron una propuesta que, aunque describen como "puramente coyuntural, ya que la solución definitiva y óptima debe ser asegurar la libertad cambiaria y la eficiencia, economía y neutralidad fiscal para las exportaciones de servicios", permitiría resolver, en el corto plazo, las dificultades que atraviesan los freelancers que cobran en criptomonedas.
La misma se basa en habilitar a las entidades financieras a prestar servicios de custodia de criptoactivos, así como también de intercambio por pesos y por divisas.
Además, establece que los exportadores puedan elegir entre dos modalidades principales para gestionar sus pagos en criptoactivos.
La primera consiste en cambiar los criptoactivos por pesos a través de Proveedores de Servicios de Activos Virtuales (PSAV).
La segunda alternativa sería depositar los criptoactivos en entidades financieras, con un tratamiento diferenciado según el monto recibido:
- Para equivalentes a u$s36.000 o menos anuales: los fondos serían de "libre disponibilidad para el depositante". Esto significa que podrían mantenerse en custodia en la entidad financiera, retirarse para autocustodia o transferirse a terceros, todo sin la obligación de liquidación forzosa.
- Para montos que excedan los u$s36.000: los fondos serían liquidados por las entidades financieras al valor de mercado en pesos. Esta liquidación podría realizarse tanto localmente como a través de PSAV. Según el texto, esta alternativa permitiría "generar demanda de la moneda nacional, contribuyendo con ello a fortalecer su valor sin reducir la liquidez".
Por otro lado, las entidades financieras tendrían que garantizar la seguridad de estas operaciones mediante el mantenimiento de reservas equivalentes al 100% de los criptoactivos depositados. De este modo, se aseguraría la protección de los clientes y la estabilidad del sistema.
"Esta propuesta de coyuntura parte de la base de que Bitcoin y otros criptoactivos que son utilizados en el mundo para el pago de servicios tienen hoy un indiscutible valor en los mercados globales y una liquidez que los convierte en verdaderos activos de resguardo", indican.
Entre los "efectos positivos" que esta medida, en la visión de la entidad, tendría, se destaca la posibilidad de "equiparar los derechos de quienes cobran en criptoactivos con quienes lo hacen en divisas", eliminando una "desigualdad" que actualmente afecta a quienes perciben sus ingresos en criptomonedas, "sin alterar sustancialmente la política de control cambiaria" implementada por el Banco Central "en tanto ella se mantenga", adelantando la posibilidad, tal como busca el Gobierno Nacional, de que el cepo cambiario se levante en 2025.
Otro de los beneficios sería que la regularización de estas actividades contribuiría a "expandir la actividad económica formal que hoy discurre por vías informales". Esto, afirman, no solo fortalecería al peso al aumentar la demanda de la moneda, sino que también mejoraría la solvencia total de la sociedad al permitir que los ahorros en criptoactivos se traduzcan en mayor inversión y consumo futuro.
"Consideramos que, en la medida en que el BCRA continúe con restricciones cambiarias y sostenga la obligación de liquidar los ingresos por exportaciones de servicios, es necesario propiciar medidas que permitan la mayor inclusión y la eliminación de las desigualdades y asimetrías que hoy castigan a los exportadores de servicios que perciben su contravalor en bitcoin y criptoactivos", concluye la carta de la ONG Bitcoin Argentina.