Telegram, la red social de mensajería, obtuvo beneficios netos por primera vez en 2024 con un volumen de negocios de más de u$s1.000 millones.

Pavel Durov, el fundador y presidente de la aplicación, confirmó la noticia a través de sus redes sociales. 

"Tal y como predije, el 2024 resultó ser un año muy bueno para Telegram. Por primera vez desde el inicio de su monetización hace tres años, Telegram ha pasado a ser rentable", posteó el empresario.

Por mucho tiempo la red social funcionó sin publicidad ni servicios de pago. Sin embargo, a partir de 2021 adoptó una nueva política de monetización basada en funcionalidades exclusivas para suscripciones pagas e introducciones de publicidad. 

En el último tiempo, Durov celebró el número de abonados de la versión paga de la aplicación. Según él, Telegram Premium se triplicó y superó los 12 millones de usuarios y el aumento de los ingresos por publicidad. 

Hoy en día, la plataforma de mensajería posee más de 950 millones de usuarios en todo el mundo. 

Por otro lado, el empresario anunció unas ventas anuales de más de u$s1.000 millones y u$s500 millones en reserva de efectivo, sin incluir sus activos en criptomonedas.

Caso judicial de Pavel Durov

En 2024, el responsable de la plataforma enfrentó un revés judicial. Fue detenido a finales de agosto e inculpado por dos jueces franceses por varios delitos relacionados con la delincuencia organizada a través de la red social.

La justicia le recriminó no haber actuado para frenar la difusión de contenidos delictivos en su red social. Durov fue liberado bajo estrictas condiciones judiciales, como pagar una fianza millonaria y quedarse en Francia por tiempo indeterminado. 

El asunto tomó estado público y generó un gran revuelo. Rusia advirtió que se podría tratar de una persecución política.

El empresario multimillonario rompió el silencio a mediados de septiembre, por primera vez desde su detención.

A través de un mensaje por Telegram indicó que le sorprendió ser considerado el responsable del contenido publicado por otras personas y calificó la postura francesa como imprudente.

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