En base a las promesas del nuevo gobierno de los Estados Unidos, muchos inversores y empresarios están poniendo su atención en Bitcoin (BTC) y en el mercado de las criptomonedas.
Por esta razón, este miércoles se conoció que David Solomon, CEO de Goldman Sachs, confirmó que el banco de inversión está dispuesto a involucrarse en el ecosistema cripto si el entorno regulatorio cambia bajo el nuevo mandato de Donald Trump.
En ese contexto, Solomon expresó que las regulaciones en Estados Unidos tendrían que ser más favorables para que el gestor de activos pueda ingresar al mundo de las criptomonedas, como ya lo hizo Microstrategy, por ejemplo.
En una entrevista con Reuters, Solomon señaló que el marco regulatorio actual debe evolucionar para que la empresa pueda invertir plenamente en Bitcoin y Ethereum.
Asimismo, el CEO agregó que hay mucha atención en el espacio cripto, pero aún no está claro cómo cambiarán las regulaciones bajo la nueva administración.
En este sentido, Solomon afirmó: "Por el momento, nuestra capacidad para actuar en estos mercados (cripto) es extremadamente limitada desde una perspectiva regulatoria".
Además, aclaró que, aunque Goldman Sachs ya exploró el mundo de los activos digitales, como institución financiera regulada no puede comprar o vender criptomonedas como Bitcoin o Ethereum.
A pesar de estas declaraciones, cabe recordar que actualmente la empresa posee participaciones significativas en ETF de Bitcoin.
Según un documento presentado ante la Comisión de Bolsa y Valores el pasado 14 de noviembre, la compañía cuenta con aproximadamente u$s718 millones en ocho ETF. Además, Goldman Sachs invirtió unos u$s461 millones en el ETF de Bitcoin de BlackRock, entre otros.
Por otro lado, los comentarios de Solomon no son casuales, ya que, en menos de un mes y medio, Donald Trump asumirá su segundo mandato. El próximo presidente de los Estados Unidos ya confirmó que su gobierno será "pro-cripto".
Por esta razón, incluso antes de su asunción, Trump envió señales positivas al ecosistema cripto al elegir a Paul Atkins como el próximo presidente de la SEC, con el objetivo de orientar al organismo hacia un terreno más favorable para los inversores en criptomonedas.