Expertos especulan desde hace algunas semanas con una posible reserva en Bitcoin (BTC) en los Estados Unidos, una vez que Donald Trump asuma su segundo mandato como presidente.
Un legislador ruso pretende seguir los futuros pasos de EE.UU. y propuso la creación de una reserva de Bitcoin para mejorar la estabilidad financiera del país dirigido por Vladimir Putin, que tiene una buena relación con Trump.
Además, el mandatario del país más grande del globo, previo récord de BTC, expresó públicamente que nadie puede prohibir Bitcoin, y que continuará desarrollándose, y minutos más tarde el activo marcó un nuevo máximo histórico.
Hernán González, fundador de Bitcoin Stratos, expresa a iProUP que últimamente, se empezó a generar una ola de países que comienzan a replantear el tema, pero en la Argentina, la idea de generar su propia reserva estratégica de BTC se "conversa desde hace una década, aproximadamente".
"Para ser sincero, después de visualizar el primer año de mandato de Javier Milei, dudo que tenga intenciones de avanzar con un plan en BTC de esta manera hasta no darse determinadas condiciones de estabilidad, aunque siempre estará abierta la posibilidad de plantearlo", asevera González.
"No hay que olvidarse que la Argentina transita un proceso de saneamiento de múltiples áreas y de desmantelamiento de burocracias que llevará tiempo, por lo que el presidente podría no considerar a esto como una prioridad en absoluto", añade.
Dado el contexto actual, explica el especialista, con las cifras de dinero que se destinarían a ello, podría decidirse darle prioridad a solucionar problemas en el corto plazo en vez destinarlo a largo plazo a modo de: "inversión".
Si se deseara armar la reserva, para González el camino más lógico sería buscar aprobar una ley en el Congreso, en donde se detalle:
Ahora bien, independientemente de la posibilidad de que todo esto ocurra o no, según explica el especialista, algo que el Gobierno podría hacer activamente sobre Bitcoin y ecosistema cripto es regular como corresponde o bien, desregular con foco en todo lo que afecte al libre intercambio de activos digitales.
"Para mantener un orden, es correcto regular a las empresas que ofrezcan los servicios en pos de evitar abusos y prevenir el lavado de activos y la financiación del terrorismo. Pero cuando la regulación se torna excesiva, por ejemplo, cumpliendo estándares superiores a los que se dictaminan habitualmente, como sucede en Argentina, termina afectando negativamente", concluye González.