El presidente ruso, Vladimir Putin, promulgó una ley que redefine el marco fiscal para la minería y el comercio de criptomonedas, incluyendo Bitcoin.
La normativa, validada por la Duma Estatal y el Consejo de la Federación, establece que estos activos se reconocen como propiedad bajo el Código Fiscal de Rusia.
Publicada oficialmente el 29 de noviembre, esta legislación representa un avance clave en la regulación de criptomonedas en el país.
La nueva ley firmada por Vladimir Putin introduce modificaciones importantes al Código Fiscal de Rusia, reconociendo las criptomonedas como "propiedad" y estableciendo un sistema claro de tributación para las transacciones relacionadas.
Según la normativa, las actividades de minería y comercio de criptomonedas estarán exentas del Impuesto al Valor Agregado (IVA), lo que podría incentivar su adopción en el país.
Sin embargo, las ganancias obtenidas por la compra y venta de estos activos digitales estarán sujetas a un impuesto personal que se aplicará en dos escalas impositivas.
La tasa básica será del 13%, aplicable a la mayoría de los contribuyentes, pero esta aumentará al 15% para aquellos cuyo ingreso anual exceda los 2,4 millones de rublos (alrededor de 22.000 USD) a partir del 2025.
Además, los operadores de infraestructura minera tendrán la obligación de informar a las autoridades fiscales sobre las actividades de sus clientes, lo que facilitará el control fiscal sobre las transacciones de criptomonedas.
Este cambio legislativo se enmarca dentro de un esfuerzo más amplio de Rusia por avanzar en la regulación de las criptomonedas en respuesta a las sanciones económicas impuestas por Occidente debido a la invasión de Ucrania.
El reconocimiento de las criptomonedas como propiedad legaliza su circulación, lo que permite al país explorar alternativas económicas en un entorno global cada vez más restrictivo.
En agosto, Vladimir Putin firmó una ley que legaliza la minería de criptomonedas, entrando en vigor el 1 de noviembre como parte de un marco regulatorio más amplio.
La normativa establece que el gobierno, en conjunto con el Banco Central, definirá los requisitos necesarios para que individuos y empresas puedan participar en la minería de Bitcoin dentro del país.
Además, se otorga al gobierno la capacidad de prohibir estas actividades en regiones específicas de la Federación Rusa si las condiciones locales lo justifican.
El reconocimiento de las criptomonedas como propiedad y la implementación de un régimen fiscal refleja la adaptación de Rusia a las crecientes demandas de la economía digital.
Estas buscan regular y gestionar el uso de activos digitales, preparando el terreno para su integración en transacciones nacionales e internacionales.
Con esta estrategia, el país avanza hacia un sistema financiero más diversificado y alineado con la evolución tecnológica global.