Una de las noticias más destacadas de los últimos días fue la normativa publicada por la Comisión Nacional de Valores (CNV), que habilita la oferta pública de fondos cotizados en Bolsa (Exchange Traded Funds o ETF) que replican índices de criptomonedas.
Con la nueva regulación, oficializada a través de la Resolución General 1030/2024 en el Boletín Oficial, los inversores podrán acceder, mediante cuotas partes de Fondos Comunes de Inversión (FCI), a ETF de criptomonedas como Bitcoin y Ethereum.
Esto será posible a través de agentes de Bolsa o Agentes de Liquidación y Compensación (ALyC), lo que garantiza un mayor nivel de supervisión y protección al inversor.
Esta medida se suma a decisiones recientes, como la inclusión de criptomonedas en el patrimonio empresarial reconocida por la IGJ, la creación del registro de Proveedores de Servicios de Activos Virtuales (PSAV) y la incorporación de criptoactivos en el proceso de blanqueo de capitales, impulsado por el Ejecutivo.
Se trata de una noticia es más que importante para el ecosistema cripto en Argentina ya que, tal y como asegura Carlos Peralta, líder de Asuntos Públicos de Bitso Argentina, "puede estimular la adopción de estos activos al atraer a inversores tradicionales y expandir el ecosistema de forma gradual y segura".
Además, esto podría no solo permitir que más personas accedan de manera segura y transparente a este mercado emergente y en constante crecimiento, sino también atraer a empresas e instituciones.
Estas últimas ahora pueden percibir a los criptoactivos, dentro de un marco financiero más tradicional, como una opción de inversión sólida en lugar de un activo de mera especulación.
Según Julián Colombo, Director General de Bitso Argentina, se trata de una "excelente noticia" dado que "puede acelerar la adopción y la incorporación de activos virtuales en los portafolios de los FCI" al "no solo aumentar la confianza de las empresas en la inversión en criptoactivos, sino que también normalizar su uso dentro del sistema financiero, abriendo la puerta a un futuro donde las criptomonedas sean una opción común de inversión y no solo una alternativa marginal".
"Además, esta medida no solo aumenta la accesibilidad al mercado cripto para las instituciones tradicionales, sino que también puede transformar la percepción de las criptomonedas en el mundo financiero. Al operar dentro de un marco legal y transparente, los criptoactivos se consolidan como una opción legítima de inversión y no solo como un activo especulativo", agrega a iProUP.
En su mirada, "esto permitirá que más empresas de inversión vean en las criptomonedas una herramienta estratégica para diversificar sus portafolios, lo que a su vez puede generar un flujo constante de capital hacia el mercado cripto y contribuir a su expansión y madurez a largo plazo".
Cabe destacar que los ETF de Bitcoin al contado, aprobados a principios de año por la Comisión de Valores (SEC) de Estados Unidos, han sido clave en el pico histórico alcanzado por la criptomoneda líder en marzo, así como en los nuevos máximos que se han superado en las últimas semanas.
Esto se explica por la reducción en la liquidez del activo tras el halving, que disminuyó a la mitad el ritmo de emisión, y la creciente demanda por parte de grandes gestores de activos como BlackRock, Grayscale y Fidelity, lo que ha intensificado el actual bull run, con la divisa a un precio de u$s90.600, al cierre de esta nota, un 32,7% más que hace un mes.
En este contexto, la integración de criptomonedas en el sistema financiero tradicional, promovida por la nueva normativa de la CNV, representa un avance significativo. Esta medida abre múltiples oportunidades para que empresas e instituciones argentinas adopten Bitcoin como reserva de valor y como activo de inversión, lo que podría acelerar aún más su adopción en el país, uno de los líderes regionales y globales en este ámbito.
"Recientemente, la Inspección General de Justicia autorizó el uso de criptoactivos para conformar el capital social de empresas, siempre que estén depositados en un PSAV registrado ante la CNV. Por eso este es un paso importante hacia la integración de las criptomonedas en el sistema financiero tradicional. En Bitso, estamos alineados con esta normativa, garantizando transparencia y seguridad para nuestros clientes. A través de Bitso Business, ya contamos con más de 1.700 clientes institucionales que utilizan nuestra plataforma para acceder a criptoactivos de manera segura y confiable", concluye Colombo.