El juego GameFi Hamster Kombat generó una gran controversia en la comunidad de jugadores y entusiastas de las criptomonedas luego del frustrante lanzamiento de su airdrop.
El proyecto, que prometía distribuir tokens HMSTR entre millones de jugadores, enfrenta serias acusaciones de operar bajo un esquema Ponzi, luego de distribuir 60 millones de tokens entre los jugadores más comprometidos de su comunidad.
Acusan a Hamster Kombat ser una estafa
Los problemas comenzaron cuando, tras el airdrop, muchos jugadores se sintieron decepcionados al recibir cantidades significativamente menores de tokens esperados.
De los 300 millones de usuarios que el juego aseguraba tener, solo 60 millones calificaron para recibir parte del airdrop, pero gran parte de los tokens fue destinada a los ejecutivos del proyecto, dejando a los jugadores con "migajas".
La indignación de los jugadores no tardó en aumentar. Muchos comenzaron a acusar al juego de ser una estafa, alegando que el sistema de recompensas estaba diseñado para beneficiar a los desarrolladores a expensas de los usuarios.
La insatisfacción de los jugadores se refleja también en la estructura del propio juego, luego de que múltiples usuarios informasen que la inclusión de una estrategia anti-trampa, días antes del lanzamiento, contribuyó a la dificultad para recolectar recompensas sustanciales.
El analista jefe de Neomarkets, Oleg Kalmanovich, fue uno de los que calificaron el proyecto como un esquema Ponzi, citando el derrumbe que mostró el valor del token HMSTR a los pocos días de realizado el airdrop.
Hamster Kombat cae 50% tras listarse en exchanges
Tras listarse en diferentes exhcanges de criptomonedas el 26 de septiembre (mismo día del airdrop), el precio de HMSTR era de u$s0,014. Sin embargo, ventas masivas causaron que su precio cayera en cuestión de horas. En la última semana, el precio del token cayó un 50% y se ubica en torno a los u$s0.0047 por unidad, según CoinMarketCap.
Desde el airdrop, la cripto mostró un sentimiento ponderado negativo, que se ubica en -0,16. Se trata de un indicador que rastrea el estado de ánimo general del mercado sobre un protocolo puntual.
La situación llevó a varios jugadores a amenazar con iniciar acciones legales contra los creadores del juego, alegando que fueron engañados y estafados.