En los últimos años, la creciente aceptación y el potencial de los activos digitales captaron la atención del sector financiero global. Swift, el principal proveedor de infraestructura para pagos internacionales, lidera los esfuerzos para facilitar el movimiento de estos activos a nivel mundial.
La entidad continúa avanzando en la adopción de soluciones que posibilitarán a sus integrantes realizar transacciones con activos y monedas digitales reguladas a través de su red, basándose en pruebas innovadoras y colaboraciones comunitarias
En este sentido, las proyecciones del mercado de activos digitales son optimistas, y según predicciones recientes, el mercado de activos tokenizados podría alcanzar hasta $30 billones para 2034.
Además, un 91% de los inversores institucionales manifestaron interés en invertir en estos activos, lo que demuestra un creciente reconocimiento de su valor potencial.
Sin embargo, a pesar de este entusiasmo, la adopción global enfrenta grandes desafíos debido a la fragmentación del ecosistema de plataformas y regulaciones.
La proliferación de plataformas de tokenización y diferentes entornos regulatorios dieron lugar a lo que se conoce como "islas digitales", creando costos y riesgos adicionales para los participantes del mercado.
En este contexto, los inversores institucionales encuentran dificultades para ampliar sus negocios en activos digitales debido a la complejidad de interactuar con múltiples plataformas.
Por otro lado, aunque más de 130 países y uniones monetarias están explorando las monedas digitales de banco central (CBDC), aún queda mucho por hacer para integrar estas monedas emergentes en la economía global.
Durante sus 50 años de existencia, Swift demostró ser un actor clave en la interoperabilidad global, y es por esto que ahora se encuentra aplicando esta experiencia a la integración de activos digitales y monedas.
La organización realizó pruebas exitosas que demuestran cómo su infraestructura puede simplificar la transferencia de valor tokenizado entre cadenas de bloques públicas y privadas.
Los proyectos de sandbox de CBDC de Swift, realizados con bancos centrales y comerciales de Europa, Asia y América del Norte, mostraron la capacidad de interconectar diferentes redes de CBDC y activos.
A la hora de mirar el futuro y proyectar, Swift planea probar la interoperabilidad entre múltiples libros mayores para transacciones de Delivery-versus-Payment (DvP) y Payment-versus-Payment (PvP).
Estas pruebas tienen el potencial de permitir a los compradores de valores pagar y cambiar activos tokenizados en tiempo real a través de la red de Swift.
A pesar de que realizar transacciones con dinero tokenizado conlleva ciertos retos, como la integración del pago con activos tokenizados, Swift avanza en la conexión de estos elementos, comenzando con monedas fiduciarias y, más adelante, con CBDCs, dinero tokenizado de bancos comerciales o stablecoins reguladas.