El Fondo Monetario Internacional (FMI) señala que la minería de Bitcoin y los centros de datos de inteligencia artificial generan alrededor del 1% de las emisiones globales de carbono debido a su elevado consumo energético.

De acuerdo con una publicación reciente del FMI, estas actividades consumieron el 2% de la electricidad mundial en 2022, y se estima que esta cifra podría llegar al 3,5% en los próximos tres años, según proyecciones de la Agencia Internacional de Energía (IEA).

Este incremento en el consumo sería comparable al de Japón, que es el quinto país con mayor demanda eléctrica a nivel global.

Aumento en las tarifas eléctricas para la minería

El FMI advirtió que, si las condiciones actuales persisten, la minería de Bitcoin y otras criptomonedas podría generar el 0,7% de las emisiones globales de carbono para 2027. 

En respuesta a esta preocupación, el FMI propone una subida considerable en los costos de electricidad para los mineros de Bitcoin y los operadores de centros de datos de inteligencia artificial (IA).

La propuesta incluye un aumento del 85% en las tarifas eléctricas para incentivar a los mineros a reducir su consumo energético y mitigar su impacto ambiental. 

El FMI sostiene que estas medidas no solo ayudarían a cumplir los objetivos globales de reducción de emisiones de CO2, sino que también promoverían el uso de fuentes de energía renovable.

¿Tiene impacto ambiental la minería de Bitcoin?

Uno de los argumentos recurrentes contra Bitcoin es su alto consumo energético, que contribuye a la seguridad de la red.

Sin embargo, investigaciones recientes sugieren que el impacto ambiental de la minería de Bitcoin puede no ser tan perjudicial como se cree.

Según el inversionista y analista Daniel Batten, de los diez estudios exhaustivos publicados en los últimos dos años sobre el impacto ambiental de la minería de Bitcoin, nueve mostraron resultados positivos. 

El único estudio con resultados negativos se basó en datos desactualizados de hace tres años.

Además, los mineros que emplean fuentes de energía renovable, y en lo posible independientes de la red eléctrica local, no solo optimizan su operación, sino que también minimizan su impacto ambiental. 

Esta estrategia evita las limitaciones que imponen las redes eléctricas tradicionales y contribuye a una menor huella ecológica.

¿Cuáles son las ventajas en la utilización de energía?

Una ventaja significativa de las empresas de minería de Bitcoin sobre otros centros de datos es su capacidad para ajustar o incluso detener sus operaciones sin causar un desorden global.

Esta flexibilidad les permite coordinarse con las redes eléctricas locales, contribuyendo al equilibrio de carga y reduciendo el impacto en la infraestructura energética.

Además, la minería de Bitcoin puede aprovechar la energía en el lugar de generación.

Algunas empresas han ubicado sus operaciones cerca de pozos petroleros para utilizar el gas flaring, transformándolo en una fuente de energía útil en lugar de desperdiciarlo. 

Esto no solo ayuda a reducir el impacto ambiental, sino que también mejora la rentabilidad de las operaciones mineras.

Asimismo, los fabricantes de equipos de minería se enfocan en diseñar hardware altamente eficiente para maximizar el poder de procesamiento mientras minimizan el consumo energético. 

Esta mejora en la eficiencia del hardware contribuye a un aumento significativo en el hashrate de la red de Bitcoin, optimizando el uso de la energía disponible.

 

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