En un contexto económico adverso para la Argentina, los ciudadanos eligen nuevas formas de luchar contra la inflación, entre ellas la adopción de criptomonedas.
En este sentido, Argentina se encuentra como el 15° país del mundo y el segundo en Latinoamérica, después de Brasil. Esta tendencia de elegir activos digitales como instrumentos de ahorro o inversión no para de crecer día a día.
Las criptomonedas emergen como una opción atractiva por su alta liquidez y potencial de rendimiento, con la particularidad de que, al igual que en las billeteras virtuales, el rescate del dinero es inmediato si se necesita usarlo antes de lo previsto.
Además, ofrecen varias ventajas frente a las inversiones tradicionales, ya que se pueden operar de manera segura y sencilla las 24 horas, los siete días de la semana, sin necesidad de saldos mínimos y con liquidez inmediata.
En diálogo con iProUP, Julián Colombo, director general de Bitso Argentina, expresa que "el mundo cripto, de manera similar al de las finanzas tradicionales, ofrece opciones de renta variable y de renta fija". "La proporción de ambas en cartera dependerá de la propensión o aversión al riesgo de cada inversor", agrega.
Las criptomonedas se dividen en dos grupos principales:
1. Criptomonedas fluctuantes: varían de precio según la oferta y la demanda.
Según indica Colombo, algunos ejemplos de criptomonedas fluctuantes son:
2. Criptomonedas estables: a diferencia de las anteriores, no varían en su precio y mantienen un valor fijo, generalmente vinculado a una moneda tradicional o a un activo tangible (un dólar, un euro, una onza de oro, etc.).
En esta categoría de criptomonedas, se encuentran:
USDC, "una stablecoin vinculada al dólar estadounidense, utilizado para transacciones estables y seguras".
USDT (Tether), "otra stablecoin similar, conocida por su alta liquidez y uso extendido en exchanges", detalla Colombo.
El mundo cripto, de manera similar al de las finanzas tradicionales, ofrece opciones de renta variable y renta fija. En este sentido, Colombo indica que la proporción de ambas en la cartera dependerá de la propensión o aversión al riesgo de cada inversor.
"Las criptomonedas fluctuantes implican cierto riesgo, principalmente por su volatilidad. Sin embargo, no es lo mismo bitcoin, que es la cripto más difundida y consolidada, que una memecoin, por ejemplo", explica el director general de Bitso.
En este sentido, señala que Bitcoin, Ether, Solana y otras cripto de alta capitalización de mercado son adecuadas para inversores que buscan una mayor rentabilidad asumiendo mayores riesgos.
Por otro lado, Colombo expresa que "las stablecoins son más adecuadas para inversores conservadores o de bajo riesgo, que buscan evitar la volatilidad", ya que las mismas permiten preservar el patrimonio evitando las fluctuaciones del tipo de cambio, y además, USDC y USDT ofrecen 4% de rendimiento anual.
Para Colombo, existen 5 factores claves a tener en cuenta a la hora de invertir tanto en criptomonedas como en otros activos:
Diversificar la cartera y así también el riesgo
Mantenerse informado y estudiar todas las opciones de inversión, considerando los riesgos y beneficios de cada una y observando qué evolución registraron a lo largo de un período de tiempo para entender un poco más sobre el activo en cuestión
Seleccionar una exchange confiable y bien regulada para evitar fraudes y problemas de liquidez
También, asegurar la protección de las cuentas utilizando contraseñas fuertes y autenticación de dos factores
Por último, la educación continua y la investigación del mercado también son clave para aprovechar al máximo las oportunidades y proteger las inversiones