Las stablecoins (monedas estables) son un tipo de criptomoneda cuyo valor está vinculado a un activo subyacente, como una divisa fiduciaria, materias primas o incluso otros criptoactivos.
Su uso se popularizó con el boom de los activos virtuales. Tradicionalmente, las criptos emparejadas 1: con el dólar son las favoritas:
Sin embargo, en el último tiempo emergieron otras variantes ancladas al euro, al oro y hasta al peso que totalizan una capitalización de mercado de u$s164.000 millones.
Manuel Díaz Reynolds, Head of Sales de Arex, señala a iProUP que las stablecoins tienen un "gran potencial de crecimiento, ya que se volvieron un medio de pago más rápido y fácil de usar, sobre todo en países donde hay control de capitales o restricciones cambiarias como Argentina".
Desde Lemon indican a iProUP que estos activos facilitan "enviar dinero de un país a otro en cuestión de segundos. Al digitalizar el activo, adquiere propiedades únicas del ecosistema cripto como el acceso universal, facilidad de intercambio y posibilidad de fraccionarlo".
Sebastían Serrano, CEO y cofundador de Ripio, completa que la capa extra de beneficios de las stablecoins se basa sobre todo en la accesibilidad, inmediatez, liquidez, seguridad y lo que define como "un gran combo de conveniencia tanto en las formas como en los tiempos y en los costos económicos".
En definitiva, como el dólar, pero con beneficios extra.
Según el panel de control de stablecoins de Visa, hubo más de 31,1 millones de usuarios activos mensuales que realizaron más de 353 millones de transacciones con monedas estables en los últimos 30 días.
En Argentina, las ancladas al dólar son altamente demandadas, ya que "mantienen un valor estable y no están sujetas a la devaluación o la emisión desmedida de la moneda por parte de bancos centrales", expresa el responsable de Arex.
"También en economías muy reguladas con controles de capitales, restricciones cambiarias y alta inflación, puede funcionar como vía de escape para transferencia de valor desde y hacia el exterior", añade.
Más allá de los dólares cripto, las preferidas en Argentina como refugio de valor, surgieron en el último tiempo criptos atadas al peso argentino.
Sobre la utilidad de estos activos, Serrano afirma que "al pasar de una stable asociada al peso a una del dólar es mucho más fácil e inmediato que cambiar pesos por dólares. Además, usar pesos cripto tiene otros beneficios típicos como el cashback o la posibilidad de usarlos en DeFi para staking o aportar a pooles de liquidez".
Algunos de estos pesos digitales son:
Las stablecoins ancladas al euro están ganando popularidad en Europa, especialmente tras la aprobación de la Ley MiCA (Reglamento sobre Mercados de Criptoactivos) que proporciona un marco regulatorio claro y seguro en el viejo continente.
Se trata de una reglamentación impulsada por la Unión Europea que busca armonizar las normativas sobre criptoactivos en todo el territorio, estableciendo una serie de directrices y requisitos específicos para emisores y proveedores de servicios cripto.
Díaz Reynolds aclara que busca proteger a consumidores e inversores, aumentar la estabilidad financiera y fomentar la innovación, aunque avisa que la implementación es "diferente para cada país miembro".
"La regulación gubernamental traerá un nivel de legitimidad al sector de las criptomonedas y stablecoins, pero también impondrá obligaciones de seguridad y cumplimiento. Las que no cumplan con los requisitos no podrá operar", prosigue.
Según un informe de Kaiko, debido a su fuerte énfasis en el cumplimiento normativo, USDC es el único dólar cripto preparado para adaptarse a las nuevas reglas de la normativa que entró en vigor el 30 de junio.
Además, con la puesta a punto de la Ley MiCA, incluso gigantes bancarios como el Deutsche Bank anunció el lanzamiento de una divisa estable anclada al euro, para lo cual creó la empresa AllUnity.
Serrano agrega que este tipo de regulaciones "inevitablemente mueven un flujo que arma un nuevo estado de situación", ya que, eventualmente, se genera una reorganización del mercado interno. "El tema es que ese 'mercado interno' de la Unión Europea es gigante y tiene peso a nivel global".
El directivo detalla que los operadores de stablecoins en Europa van a tener que limitarse a un máximo de 1 millón de operaciones diarias con monedas digitales. Si se exceden, deben cortar la emisión. "MiCA tiene el objetivo paralelo de reforzar la importancia global del euro, ahora también en ámbitos digitales", resume.
Otro tipo de monedas estables que emergió en el último tiempo son la que guardan paridad con el precio del oro, un metal precioso considerado como la unidad de valor más longeva de la historia.
Por ejemplo, Tether, la empresa emisora de USDT, lanzó una stable respaldada por oro llamada Alloy (aUSDT), luego de que lanzara en el pasado Tether Gold (XAUT). Otro ejemplo es Digit (DIG).
Desde Lemon suman a PAX Gold (PAXG), emitida por la firma Paxos, que almacena en sus bóvedas una onza de oro por cada unidad de la moneda en circulación.
"Estas stablecoins son un caso de una de las tendencias del mercado: la tokenización de activos del mundo real. Combinan lo mejor de los dos mundos: la inmediatez propia de las cripto con la confiabilidad y la idea de almacenamiento del valor asociada al oro", describe Serrano.
El responsable de Arex remarca que "funcionan como una representación digital de un valor o derecho que puede transferirse y almacenar electrónicamente utilizando tecnología blockchain para su trazabilidad y auditoría".
"Básicamente, el valor que dice representar respaldado por el equivalente de la tenencia física o electrónica de ese activo. Ejemplos de oro físico se encuentran en bóvedas o también derivados financieros cuyo activo subyacente es el oro que cotiza en mercados regulados como la Bolsa de Chicago", concluye.