Terra (LUNA), uno de los proyectos cripto más prometedores en 2022, experimentó un dramático colapso tras alcanzar un pico de u$s120 por unidad, para luego desplomarse y dejar a millones de inversores con pérdidas absolutas de sus ahorros.
Como consecuencia, su fundador, Do Kwon, fue declarado culpable por la justicia de los Estados Unidos, la cual solicitó su extradición tras ser arrestado en Montenegro.
Tras varias idas y vueltas, la empresa matriz, Terraform Labs, fue obligada a pagar una multa superior a los u$s5.000 millones.
La sentencia final fue presentada por la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC) y aceptada por la compañía financiera, la cual confirmó el cese oficial de operaciones una vez que pague la multa. Así lo confirmó el actual CEO de la compañía, Chris Amani, quién sucedió a Kwon en julio de 2023.
El acuerdo agrega un monto adicional de u$s204 millones en multas para Kwon, y le impedirá convertirse en funcionario o director de cualquier compañía de cotización pública.
Terraform Labs y Do Kwon fueron condenados por fraude civil a usuarios que eligieron a la firma de finanzas descentralizadas para depositar sus ahorros, con inversiones que prometían rendimientos inflados para el ecosistema cripto, a través de su stablecoin algorítmica, TerraUSD (UST).
La SEC acusó a las partes de engañar a los inversores por sostener que el valor de su stablecoin se regía por la paridad con el dólar estadounidense.
De esta forma, los montos a pagar serán utilizados para compensar los usuarios, para afrontar sanciones y para abonar intereses previos al fallo.
"La sentencia por consentimiento propuesta aborda la magnitud de este fraude al imponer importantes soluciones correctivas, punitivas y disuasorias, incluida una sentencia multimillonaria contra los demandados, y prevé una recuperación significativa y rápida para los inversionistas víctimas que perdieron colectivamente miles de millones de dólares", indicó la SEC en un comunicado.
La firma considera la posibilidad de llevar a cabo una propuesta comunitaria, al estilo de una DAO, para quemar todos los tokens LUNA, nativo de Terra, en posesión de la plataforma. "Todo lo que quede en nuestras carteras será quemado por TFL", describió Amani en X.
"La comunidad tendrá que hacerse cargo de la propiedad de la cadena", agregó el CEO, comprometiéndose a poner fin de forma definitiva a la implicación directa de la entidad con el token.