El viernes, justo antes del cierre de los mercados, los dólares financieros, así como el blue, cerraban una semana a la baja, con caídas de más del 4% para el Contado con Liqui (CCL) y de más del 3% para el MEP. Ese mismo día, el ministro de Economía, Luis Caputo, anunció que se retiraba el capítulo fiscal de la ley ómnibus, algo que dejó al Gobierno expuesto ante no poder lograr los votos necesarios para su aprobación. Este lunes, es crucial la lectura que hará al mercado.
Los analistas prevén un recalentamiento, posiblemente moderado, en los tipos de cambio paralelos como consecuencia de este cambio en la dirección fiscal. A pesar de ello, subrayan que la aprobación del texto que se discutirá el martes en el Congreso sigue siendo fundamental.
Esa tendencia bajista en los dólares libres se dio en un clima de tensión en la Cámara de Diputados mientras se discutía la mencionada ley, y la buena licitación del Bono para importadores (BOPREAL). El CCL y el MEP se hundieron hasta $50 el viernes y registraron su mayor caída semanal en tres meses, luego de que la exitosa quinta licitación de ese título, en la que el Banco Central colocó u$s2.454 millones.
Analistas cuestionan la decisión de Luis Caputo
Como explica la economista Natalia Motyl en declaraciones a Ámbito "había dos caras del capítulo fiscal. Por un lado, el blanqueo y la moratoria" aseguraba la entrada de capitales locales que tanto necesitaba el país, el cual está comprometido en bajar el déficit fiscal, para la analista, "esto puede comprometer las cuentas fiscales".
Motyl sostiene que si el mercado incorpora esta información, "muy probablemente reaccione desfavorablemente". Esto se explica en que por la quita de estos puntos, el Gobierno quedaría a un paso de no poder llegar a equilibrar las cuentas este año, lo que, sin duda, se trasladaría en una presión al alza los dólares financieros.
La otra cara, y lo que generó más controversia entre los analistas del mercado, fueron la quita de los impuestos a las ganancias y las retenciones. Motyl indica que eso tenía "un objetivo recaudatorio que podía impactar negativamente en la actividad del sector privado".
"La Argentina está en un punto en el que cobrar más impuestos solo achica las posibilidades de la economía en generación de trabajo y apertura de nuevos proyectos de inversión", sostiene la directora de NM Consultora. Además, lastra negativamente las economías regionales "en un país que va a transitar la estanflación". Esto, según la mirada de Motyl, "podría afectar la estructura productiva por fuera de Buenos Aires y el tejido social", lo que achicaría la cintura para el resto de las reformas.
Así las cosas, para Motyl haberlos retirado del paquete fiscal "es un punto positivo". Pero ahora, debería compensar la presión negativa, en parte, por el lado del blanqueo. "Uno estima que subirán los dólares financieros, pero no fuertemente", advierte.
Para el analista Christian Buteler, la decisión de Caputo "obviamente" complica el plan del Gobierno de cerrar el déficit fiscal o lo obliga a tener que hacer más recortes en el gasto, dado que los ingresos no van a poder subirse por el retiro de este paquete.
Para el analista, aunque se presente más adelante el paquete fiscal bueno, el Gobierno ya perdió el tiempo y la chance de que empezara a correr cuanto antes, lo que se traduce en "menos ingresos que se van a poder obtener por esa índole". Para Buteler, "no va a ser una medida bien recibida por el mercado", al contrario, "es muy probable que el mercado lo vea con preocupación y obviamente los activos reaccionen de esa manera".
De la misma manera opina Martín Polo, jefe de Estrategia de Cohen: "La señal es mala: desde el punto de vista político marca una debilidad, o una fortaleza que querían mostrar, pero que no existía".
Por último, el economista Federico Glustein concluye que, "el mercado no va a reaccionar positivamente, porque es una muestra cabal de perdida de poder político", por un lado, pero también de la falta de un plan alternativo.
Para Glustein, "el Gobierno parece débil, en mostrar que puede poner un sistema de contrapesos a los problemas que están en la macro y repite mantras que no se aproximan a la realidad política". Entonces, hay desconfianza e incertidumbre en lo que pueda pasar, por ende, el impacto se dará en las cotizaciones paralelas, así como una aprobación del proyecto modificado puede calmar un poco la suba.