Las criptomonedas, impulsadas por Bitcoin (BTC), se erigen como protagonistas indiscutibles en el panorama financiero actual.
Inversores institucionales, como el coloso BlackRock, encontraron luz verde para lanzar fondos cotizados en Bolsa (ETF), introduciendo así a estos activos digitales en carteras reguladas.
Es importante destacar que estos fondos cotizados en Bolsa, abreviados popularmente como ETF de acuerdo a sus siglas en inglés (Exchange Traded Funds), aparecen como una alternativa en el ecosistema cripto para aquellos que buscan invertir en estos activos a través del mercado regulado.
Esto se debe a que un ETF puede negociarse en una bolsa de valores, diferente a los fondos mutuos que no se comercian en bolsas.
En otras palabras, los ETF se pueden adquirir o vender en una bolsa de valores de la misma manera que una acción normal y su precio puede variar similar a como lo hace el valor de una acción a lo largo del día en el mercado.
Un total de 14 compañías, entre las que se encuentran grandes actores como BlackRock y Fidelity, solicitaron la aprobación de fondos cotizados en bolsa vinculados a Bitcoin.
La aprobación otorgada por la SEC de estos instrumentos se manifestó en el mercado, al mostrarse un notable aumento en el precio de BTC durante los primeros días de enero, a pesar de su más reciente corrección.
La aprobación de los ETF de BTC al contado fue un hecho muy esperado por los defensores de las criptomonedas, que apuestan por que los fondos podrían aportar miles de millones en financiación fresca al sector de las criptomonedas.
El precio de BTC se ha disparado en los últimos meses, lo que indica el entusiasmo del mercado ante la perspectiva de productos cotizados en bolsa que mantengan el bitcoin, en lugar de limitarse a especular con el precio a través de contratos de futuros.