El proyecto de Ley Ómnibus abre la posibilidad de utilizar el denominado "Código de Descuento", que actualmente solo está disponible para las mutuales. Este cambio representa una oportunidad para las empresas especializadas en préstamos on line.
La iniciativa presentada por el Gobierno, que está siendo considerada en el ámbito legislativo, aborda una de las principales deficiencias en Argentina: los bajos niveles de crédito, que constituyen menos de 10% del PBI, ubicándose por debajo de la mayoría de los países de la región.
Ley Ómnibus: el proyecto terminaría con el denominado "código de descuento", disponible solo para las mutuales
Específicamente, la propuesta aborda los "códigos de descuento", un sector altamente regulado y controlado por un reducido número de actores.
Este aspecto se refiere a la capacidad de cobrar las cuotas de un préstamo directamente mediante débito automático, tanto mensualmente como en el momento de recibir el salario.
Claro que siempre fue atractiva en el ámbito extrabancario la opción de obtener un código de descuento vinculado a actividades específicas, como la Policía Federal, empleados públicos o docentes, por mencionar algunas.
No obstante, esta práctica estaba reservada exclusivamente para las mutuales registradas en el INAES (Instituto Nacional del Asociativismo y Economía Social).
El presidente Javier Milei envío al Congreso la Ley Ómnibus, que trata los bajos niveles de crédito
En ocasiones, algunas empresas logran que una mutual les transfiera su código de descuento. Sin este permiso, no podrían ofrecer préstamos con descuento directo del salario tan pronto como se acredita en la cuenta del deudor.
Este es un negocio muy atractivo debido a sus riesgos mínimos, algo que permite aplicar tasas de interés ligeramente más bajas. Sin embargo, el costo final para el empleado resulta más elevado de lo necesario, ya que no cuenta con opciones para elegir entre diversos prestamistas.
La Ley Ómnibus elimina la restricción para el código de descuento, donde las mutuales disfrutaban de una ventaja monopólica, devolviendo al individuo la libertad de establecer restricciones crediticias con cualquier entidad que elija.
Dentro del proyecto de ley se establece de manera específica que "cualquier trabajador tiene el derecho de solicitar la retención de cuotas sociales, tarifas por servicios, pago de intereses u otras obligaciones de pago regulares, a favor de la mutual de su elección, así como de personas físicas o jurídicas, independientemente de su naturaleza".
Además, se añade que "los montos retenidos serán transferidos a los beneficiarios en un plazo máximo de cinco días después de haberse abonado los salarios. Este procedimiento también aplicará para los jubilados y pensionados nacionales".
Ley Ómnibus: las fintech, otro sector beneficiado por este proyecto
Esta apertura beneficiaría especialmente a las fintech especializadas en préstamos on line. Estas compañías se enfrentan a un desafío importante, ya que actualmente solo pueden recurrir al cobro voluntario por parte del cliente al conceder un préstamo.
Con esta ley, el sector de las fintech se vería beneficiado, ya que estas se enfrentan a la problemática de recurrir al cobro voluntario por el cliente al conceder un préstamo
Estos préstamos suelen ser a sola firma, sin requerir mayores garantías.
Hace tres años, el Banco Central prohibió a las fintech el uso del sistema de "barrido automático" para cobrar las cuotas, que implicaba debitar directamente del CBU del cliente.
Esta restricción resultó en que muchas empresas quedaran fuera del juego debido al aumento exponencial del riesgo que tuvieron que asumir. Desde entonces, solo se permitió la opción de pago voluntario para este segmento.
Si la ley es aprobada, estas compañías estarían habilitadas para ofrecer créditos con la opción de debitar las cuotas directamente de una parte del salario al momento de su acreditación.
Esto podría conducir a una reducción sustancial de las tasas de interés elevadas que se aplican en los préstamos personales para aquellos que reciben sus salarios a través del sistema financiero.
Además, los bancos también enfrentarían una mayor competencia. Hasta ahora, tenían una ventaja considerable al otorgar préstamos a clientes que tenían su cuenta sueldo en la institución.
Con esta ley, las empresas podrán ofrecer créditos con la posibilidad de debitar las cuotas directamente de una parte del salario al momento de su acreditación
Sin embargo, si se aprueba la apertura de los códigos de descuento, deberían competir con muchas otras entidades que podrían ingresar al negocio.
Es importante remarcar que existe una problemática adicional en el caso de los trabajadores informales, ya que en este escenario no hay un salario al que se le pueda aplicar un código de descuento.
Para este segmento, el acceso al crédito es más complicado, dado que el riesgo de morosidad o incobrabilidad es significativamente más alto.
Algunas fintech, por ejemplo, optaron por ofrecer préstamos de montos bajos a personas con bajo nivel de bancarización para evaluar su historial crediticio.
En caso de que el deudor cumpla con los pagos de manera consistente, se considera aumentar gradualmente el monto del préstamo, basándose en su buen comportamiento financiero.