El más reciente informe de CoinGecko, el agregador de datos en el ámbito de las criptomonedas, revela que en la actualidad, 119 naciones y cuatro territorios de ultramar regularon el uso de criptomonedas.
Este reporte indica que más del 50% de las naciones alrededor del mundo han adoptado medidas legales para regular el uso de estas monedas digitales.
Según el análisis de CoinGecko, aproximadamente el 64,7% de los países que han dado luz verde a las criptomonedas se encuentran en desarrollo, especialmente en las regiones asiática y africana.
A pesar de este avance, es importante destacar que el 16,8% de los países que han legalizado las criptomonedas enfrentan restricciones bancarias en relación con esta forma de activo financiero.
CoinGecko, en su más reciente informe, destaca el avance en la legalización de las criptomonedas a nivel global. Según sus datos, un significativo 52,1% de los 119 países que han regulado las criptomonedas cuentan con marcos regulatorios integrales.
Este aumento del 53,2% desde 2018, cuando solo 33 naciones tenían regulaciones positivas, señala una marcada tendencia hacia la aceptación y regulación de estas monedas digitales.
Contrastando con este movimiento positivo, solo cuatro países han optado por prohibir completamente los criptoactivos: China, Egipto, Nepal y Marruecos. Este contraste resalta la diversidad de enfoques regulatorios a nivel mundial.
Entre los países que han legalizado las criptomonedas, figuran naciones latinoamericanas como Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, República Dominicana, Ecuador, Honduras, México, y Venezuela.
Además, destacan países como Estados Unidos, España, Panamá y El Salvador. Este mapa geográfico evidencia la creciente aceptación de las criptomonedas en diversas regiones.
Europa emerge como líder en este proceso, con un 95,1% de los 41 países analizados que han adoptado regulaciones.
Por otro lado, en América, de los 31 países evaluados, el 77,4% reconoce las criptomonedas como legales, siendo Bolivia la única excepción. Mientras tanto, Guyana, Haití, Nicaragua, Paraguay y Uruguay están próximos a definir su postura.
Del grupo de 62 naciones con regulaciones consolidadas, el 58% son países individuales, 22 pertenecen a Europa, y cuatro son territorios de ultramar. CoinGecko subraya casos de éxito en regulación, citando a Francia, Japón y Alemania.
Sin embargo, destaca la complejidad en lugares como Italia, Estados Unidos, Canadá y Reino Unido, donde la falta de una regulación integral y decisiones dispersas complican el funcionamiento del ecosistema criptográfico.
CoinGecko, en su análisis reciente, resalta la singularidad de El Salvador en la adopción de criptomonedas.
Aunque celebra la Ley Bitcoin en el país, reconoce que la adopción de BTC sigue siendo "muy baja", representando solo el 1,72% de la población y colocando a El Salvador en el puesto 55 en términos de adopción cripto.
Esta revelación plantea interrogantes sobre los factores que limitan la expansión de las criptomonedas en la nación centroamericana.
En contraste, 25 de 166 países se consideran "criptoneutrales", indicando que han optado por "abstenerse" de definir un estatus legal oficial para las criptomonedas.
CoinGecko no solo señala tendencias en la adopción, sino que también destaca el caso de Uruguay, donde, a pesar de la falta de regulaciones, el Banco Central ha evaluado proyectos piloto de criptomonedas con un enfoque en el desarrollo de regulaciones basadas en riesgos y ha propuesto un proyecto de ley sobre criptomonedas.
En un giro hacia el ámbito de los juegos basados en blockchain, CoinGecko reveló una sorprendente tasa de fracaso del 75,5% entre 2,817 juegos Web 3.0 lanzados entre 2018 y 2023.
Aunque se destaca la difícil realidad que enfrentan estos juegos, el informe no proporciona razones claras para la alta tasa de fracaso, dejando una incógnita en torno a los desafíos específicos que enfrentan estos proyectos.
Por último, en una actualización del panorama cripto global, CoinMarketCap y CoinGecko introdujeron una categoría separada para tokens clasificados como valores por la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC).
Esta iniciativa refleja un cambio hacia categorías más específicas, similar a la segmentación de sectores en los mercados de valores tradicionales, abriendo paso a nuevas perspectivas sobre la clasificación y regulación de los criptoactivos.