El presidente electo avanza en su plan para achicar el Estado y la empresa satelital argentina sería absorvida por un gigante de las comunicaciones
23.11.2023 • 12:18hs • Economía
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Milei negocia la privatización de ARSAT: el principal candidato para quedarse con la empresa satelital y cuánto pagaría
El presidente electo Javier Milei tiene muy avanzada la venta de la empresa estatal de satélites de la Argentina a Carlos Slim.
Arsat es una empresa estatal exitosa en un segmento de tecnología de punta, que logró colocar dos satélites en órbita, además de poseer una extensa red de fibra óptica y data center claves para la operación del magnate mexicano.
Según LaPolíticaOnline, el dueño de Claro apoyó la campaña del libertario, en una cercanía que inquieta al otro gigante de las telecomunicaciones de Argentina, el Grupo Clarín de Héctor Magnetto.
La operación de venta de Arsat está muy avanzada y este martes se concretó un zoom entre Dario Esptein, integrante del equipo de transición de Milei, y los ejecutivos de Claro en Argentina.
Epstein tiene una extensa carrera en el mundo financiero y en el pasado participó en varios procesos de privatizaciones.
Milei venderá la empresa Arsat
En el encuentro mencionado anteriormente, se discutió el precio de del Arsat y se habló de un valor en torno a los u$s930 millones, según confiaron fuentes al tanto de las negociaciones.
Javier Milei fue elegido como el nuevo presidente de Argentina
Las fuentes explicaron que el equipo de Milei no cree que sea necesario enviar una ley al Congreso para avanzar con la privatización, sino que alcanzaría con que Slim compre las acciones.
El tema se discute en la CDMX. Para Slim no es una operación extraña porque parte de su despegue en Brasil fue comprar una empresa similar a Arsat llamada Embratel fundada por militares brasileros.
Existen dos dudas: una tiene que ver con si Milei tendrá el resto político como para vender la empresa solo a Slim y dejar afuera a los jugadores locales como Clarín, Telefónica o Telecentro.
No se descarta que los otros competidores reclamen su participación en el proceso de privatización. No es menor porque a diferencia de Slim, estos tienen grandes medios de comunicación en Argentina que pesan sobre la opinión pública.
El otro punto a develar es si Slim podría controlar Arsat con total autonomía o si estaría obligado a cumplir metas impuestas desde el Gobierno y que tengan que ver con proveer servicios en latitudes poco rentables como el noroeste o la Patagonia.
En Grupo Carso recuerda cuando comenzó la tecnología satelital en Estados Unidos, el gobierno de ese país dejó el negocio en manos privadas pero a las que impuso ambiciosas metas.
Si se concreta sería la primera privatización de Milei, un hito de gran impacto político ya que hace décadas Argentina no privatiza activos estatales importantes.