El presidente Alberto Fernández confirmó la ampliación del swap con China por una disponibilidad total de u$s11.500 millones y, de inmediato, el ministro de Economía y candidato presidencial, Sergio Massa, resaltó esa ampliación "garantizará el cumplimiento de obligaciones hasta diciembre".
Este incremento proviene del segundo tramo aprobado, que suma u$s6.500 millones.
Según el Ministerio de Economía, estos fondos serán utilizados para cumplir con todas las obligaciones del país hasta diciembre.
En relación a la activación del crédito, cercanos a Massa lo describieron como un vital impulso para el Banco Central, al aludir a la figura de un "tanque lleno" de recursos con total disponibilidad.
Este incremento ascendió a u$s1.500 millones más de lo inicialmente proyectado, un gesto interpretado como una fuerte apuesta de China hacia la Argentina, según declaraciones breves emitidas por el Ministerio.
El acuerdo se materializó mediante la firma entre el Banco Central argentino y el Banco del Pueblo de China.
Nuevo swap con China: la búsqueda de atenuar las pérdidas
Sebastián Menescaldi, director de la consultora EcoGo, consideró que el swap con China brinda al Gobierno una travesía más tranquila hacia el final del año.
Los fondos chinos permiten liberar recursos esenciales para intervenir en el mercado financiero, crucial en un momento en que el riesgo de liquidez y la posibilidad de enfrentar default estaban presentes.
Un informe reciente de la consultora Portfolio Personal Inversiones (PPI) revela que las intervenciones consecutivas en los mercados de dólares MEP y CCL agotaron las reservas en u$s1.940 millones.
En este contexto, la expansión del swap chino atenúa la pérdida de reservas en el MULC, proporcionando divisas para intervenir en la brecha cambiaria.
Aunque no altera las reservas netas estimadas en u$s7.590 millones, genera reservas utilizables, ampliando así el margen de acción.
Este acuerdo brinda liquidez crucial para cancelar importaciones y cumplir con compromisos financieros, incluyendo pagos al Fondo Monetario Internacional (FMI).
El intento por evitar agravar la recesión
Gabriel Rubinstein, secretario de Política Económica, adelantó que "estos fondos se utilizarán para importaciones, pagos externos e intervención en mercados paralelos, buscando estabilizar las tasas recientes de cambio".
Para Ricardo Delgado, experto de Analytica, "este swap evita agravar la recesión, especialmente en medio de una alta inflación y escasez de dólares".
Sin embargo, la duración de estos u$s6.500 millones en el Banco Central dependerá de la magnitud de la posible corrida cambiaria después de las elecciones.
Martín Kalos, director de EPyCA Consultores, adviertió que las elecciones y los movimientos del mercado podrían influir significativamente en la economía.
Desde el BCRA, explicaron que este swap actúa como un puente hacia un futuro donde la Argentina será exportador neto de energía, gracias al apoyo del Banco del Pueblo de China.