El Banco Central de la República Argentina (BCRA) decidió prolongar hasta el 1 de diciembre la tan debatida interoperabilidad de los códigos QR para el cobro con tarjeta de crédito, en una medida que ha generado revuelo en el mundo financiero.

El BCRA, tras consultas y disputas entre entidades bancarias y Mercado Pago, extendió una vez más la entrada en vigor de esta regulación que originalmente vencía el 1 de septiembre y que ya había sido postergada hasta el 16 de octubre.

El sistema Transferencias 3.0 permite, hasta el momento, que todo QR sea leído por cualquier billetera y abonar con dinero en cuenta (bancaria o fintech), con una comisión para el comercio de 0,8%. Sólo se puede abonar con tarjeta si el código y la app pertenecen a la misma empresa, que tiene libertad para fijar la tasa.

En mayo pasado, la autoridad monetaria exigió que el sistema se abra a las tarjetas de crédito luego del fuerte lobby bancario, fijando el 1 de septiembre como deadline. Pero luego dio marcha atrás y retrasó la medida 45 días y en las últimas horas volvió a correr la fecha hasta el 1 de diciembre.

Bancos vs. Mercado Pago: ¿Quién tiene la última palabra?

El motivo de la controversia radica en que los códigos QR se han convertido en una herramienta clave para el cobro digital, y tanto los bancos como Mercado Pago quieren tener el control.

La normativa busca garantizar que cualquier empresa que ofrezca servicios de pago a través de QR pueda ser utilizada por los usuarios, sin importar la marca del código QR en cuestión.

 

El BCRA, en un comunicado, explicó que "la disposición establece que los comercios que exhiban un código QR para cobrar con tarjetas de crédito, deberán aceptar que los clientes puedan realizar los pagos con cualquier billetera digital interoperable, independientemente de la marca del QR".

Además, la normativa prohíbe que los adquirentes y agregadores discriminen en comisiones y plazos de acreditación según la marca de billetera.

Una medida que mejora la experiencia de pago

Según el BCRA, esta norma tiene como objetivo mejorar la experiencia de pago para los consumidores, ya que hasta ahora, la interoperabilidad de los códigos QR estaba limitada a los pagos con transferencia.

La batalla entre los bancos y Mercado Pago por el control de esta tecnología continúa, y el BCRA parece ser el árbitro en esta contienda, decidiendo cuándo y cómo se implementará esta normativa crucial para el sistema de pagos en Argentina.

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