El ecosistema cripto mundial sufrió un nuevo golpe: el exchange Bittrex anunció mediante un comunicado su bancarrota y solicitó la protección de la Ley de Quiebras que rige en Estados Unidos.
La plataforma anunció a través de un comunicado que se plegaba al capítulo 11 de la Ley de Quiebras, lo que afectará sus operaciones en Estados Unidos, pero no a escala global.
"Después de haber anunciado previamente que Bittrex, Inc. cesaría todas sus operaciones en los Estados Unidos a partir del 30 de abril, ahora hemos tomado la decisión de presentar el Capítulo 11 de bancarrota en el tribunal federal de Delaware", informó la compañía.
Además, la firma agregó que "este anuncio no afecta a Bittrex Global, que continuará operando con normalidad para sus clientes fuera de los EE.UU.".
La decisión del exchange ocurre casi 7 meses después de que Estados Unidos, a través del Departamento del Tesoro, impusiera dos multas a la compañía.
Además la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) acusó a Bittrex de operar intercambios de valores no registrados, alegando que el ex CEO William Shihara alentó a los emisores de criptoactivos que buscaban poner sus tokens a disposición en la plataforma de la compañía a eliminar declaraciones públicas que podrían llevar a los reguladores a investigar esas ofertas de tokens como valores.
Qué ocurrirá con los usuarios de Bittrex
En relación con los usuarios y los fondos que están en el exchange, la empresa reveló que "para aquellos clientes que no retiraron sus fondos de la plataforma antes de finales de abril, sus fondos siguen estando seguros y a salvo".
"Nuestra principal prioridad es asegurar que nuestros clientes se recuperen", enfatizaron desde la plataforma cripto.
Bittrex añadió que será el Tribunal de Quiebras el que decidirá en última instancia el método por el cual esos fondos pueden ser reclamados y distribuidos a los usuarios.
"Tenemos la intención de pedir al tribunal que active esas cuentas tan pronto como sea posible para que los clientes que cumplan los requisitos reglamentarios necesarios puedan retirarlos", explicaron.
La empresa calculaba que tenía más de 100.000 acreedores, entre 500 y 1.000 millones de dólares en activos, mismas cifras que calcula para sus pasivos.