Ruja Ignatova se autodenominaba la "cryptoqueen", la reina de las criptomonedas. Le decía a la gente que había inventado una criptomoneda que iba a competir con el Bitcoin y logró persuadir a muchos para que invirtieran miles de millones de dólares en su supuesta creación.
Ruja Plamenova Ignatova nació el 30 de mayo de 1980 en Ruse, Bulgaria. A los 10 años emigró a Alemania con su familia Afín con las matemáticas, era una prodigio de su escuela, y llegó a estudiar en la Universidad de Oxford, y entre otros títulos obtuvo un doctorado en derecho internacional privado de la Universidad de Constanza.
Aparecía en televisión y en eventos patrocinados por la revista The Economist, llenaba estadios, atraía a mucha gente, y organizaba fiestas en su lujoso yate The Davina.
Fue recién en 2014 cuando Ignatova creó OneCoin, un sistema de criptomonedas que, según la mujer, era muy rentable a largo plazo. Y así se lo hizo creer al mundo hasta que desapareción del mapa dejando a los usuarios sin dinero.
Los investigadores federales acusan a la fugitiva de usar el esquema para defraudar a sus víctimas u$s 4000 millones. Se mantiene desaparecida desde 2017, cuando funcionarios estadounidenses firmaron una orden de arresto internacional contra ella. Se busca a Ignatova por su papel en la gestión de OneCoin.
El periodista británico Jamie Bartlett pasó meses investigando cómo esta mujer logro ejecutar una estafa tan masiva para el podcast Missing Cryptoqueen de la BBC y trató de averiguar dónde se esconde. Era junio de 2016, cuando la búlgara Ruja Ignatova, una empresaria de 36 años, se subió al escenario del Wembley Arena, un estadio cubierto en Londres, frente a miles de admiradores que la ovacionaban.
Ruja Ignatova ofrecía una moneda sin valor
Los agentes del FBI dicen que OneCoin no tenía ningún valor y nunca estuvo protegida por la tecnología blockchain utilizada por otras criptomonedas. Según las acusaciones de los fiscales federales, se trataba esencialmente de un esquema Ponzi disfrazado de criptomoneda, indicó BBC News Mundo.
"Ella cronometró su esquema a la perfección, capitalizando la frenética especulación de los primeros días de las criptomonedas", dijo Damian Williams, el principal fiscal federal de Manhattan.
Ahora el FBI ofrece una recompensa de u$s 100.000 por cualquier información que conduzca al arresto de Ignatova.
El hermano de la "criptoreina", Konstantin, fue detenido en marzo de 2019 luego de continuar con el negocio dejado por su hermana. A finales de ese mismo año, Kostantin se declaró culpable de los cargos de lavado de dinero y fraude, entre otros.
"Este es probablemente el mayor avance en el caso desde que Ruja desapareció en octubre de 2017, dijo Bartlett.
"También creemos que tiene documentos de identidad falsos de alta calidad y cambió su apariencia", agregó Jamie Bartlett.
Sede de OneCoin en Sofía, Bulgaria
Los activos aún existen
Es difícil saber cuánto dinero se invirtió en OneCoin.
Documentos filtrados a la BBC aseguran que se invirtieron más de u$s 4.000 millones entre agosto de 2014 y marzo de 2017.
Más de una persona también le dijo al equipo del podcast The Missing Cryptoqueen de la BBC que la cifra podría superar los u$s15.000 millones.
Oliver Bullough, un experto en lo que él llama Moneyland, el sombrío mundo paralelo donde los criminales y los súper ricos esconden su riqueza, explica que seguir el dinero no es tan fácil como parece, porque los delincuentes estructuran sus empresas y cuentas bancarias de tal manera que sus activos parecen desaparecer.
"Todavía existen. Todavía puedes usarlos para comprar cosas, para comprar influencia política y casas y yates bonitos", le dijo al equipo de The Missing Cryptoqueen.
"Pero para alguien que intenta encontrarlos, ya sea un periodista o un oficial de policía, son invisibles".