FTX se adhirió a la protección del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de los Estados Unidos para llevar a cabo de manera ordenada el proceso de evaluación y liquidación de activos.
En consecuencia, se desencadenó una nueva crisis en el ecosistema de las criptomonedas, y a su vez, la caída de otras plataformas del mercado.
Recientemente, la empresa pidió permiso a los tribunales federales para vender cuatro de sus subsidiarias.
Entre ellas, LedgerX, su unidad de trading de opciones ligadas a bitcoin (BTC) con sede en Estados Unidos, como también su servicio de negociación de acciones Embed, junto a FTX Japón y FTX Europa.
La aprobación de estas ventas beneficiaría a los acreedores, de acuerdo con los documentos judiciales, presentados ante el Tribunal de Bancarrota del Distrito de Delaware.
"Los deudores tienen cientos de miles, si no más de un millón, acreedores", sostienen en la presentación.
La administración actual de FTX se propone como prioridad maximizar el valor recuperable para beneficio de las partes interesadas, según publicaron.
Los abogados de la compañía consideran que las firmas aún están reguladas y autorizadas en los Estados Unidos, por lo que solicitan que se acelere el proceso de venta.
Para ellos, se mantendrá la pérdida de empleados y de la reputación con los reguladores, a pesar de que sus operaciones comerciales sean independientes.
La gran parte de las empresas fueron adquiridas hace relativamente poco por la exchange, por lo que habrían operado de manera independiente de su matriz.
La solicitud al tribunal explica que LedgerX, adquirida el año pasado por la plataforma de intercambio, es considerada una de las pocas firmas que se mantiene líquida luego de la declaración en bancarrota.
Además, agregan que FTX recibió "docenas" de ofertas por las compañías, con lo que una aprobación del juez permitiría que el proceso de licitación y venta se efectúe en el primer trimestre del 2023.
El plan destinado al beneficio de los acreedores de FTX deja pendiente la resolución sobre los fondos de los usuarios de la plataforma.
El actual CEO, John Ray III, dio indicios de lo que podría suceder con relación a este tema, en una audiencia en la Cámara de Representantes de Estados Unidos.
El ejecutivo reveló que FTX cuenta con casi 3 millones de usuarios en la plataforma estadounidense, y más de 7 millones en la internacional.
Ray aclaró que todo estaba confuso con los fondos de los clientes, que incluso podían llegar a estar mezclados con los de Alameda Research.
"Al final, no podremos recuperar todas las pérdidas aquí, y nunca recuperaremos el dinero gastado", expresó.