Do Kwon, cofundador de Terraform Labs, rompió el silencio luego del pedido de captura emitido por la Interpol durante la semana.
La organización policial internacional solicitó solicitó su detención a las fuerzas de seguridad de las 195 naciones que la integran.
A través de su cuenta personal de Twitter, en la que se mantiene bastante activo, el ingeniero surcoreano resaltó que no se escondía, a pesar de la persecución mundial.
"No estoy 'a la fuga' ni nada similar. Para cualquier agencia gubernamental que haya mostrado interés en comunicarse, estamos en total cooperación y no tenemos nada que ocultar", posteó.
En su país natal, Kwon recibió una orden de arresto por parte de un tribunal, en la que se lo acusa a él y a otros involucrados de violar la Ley de Mercado de Capitales.
El lunes pasado, expresó que "seguía su rutina de vida con normalidad". Además, también indicó que no enteró de la aparición de su nombre en la lista de alertas rojas de la Interpol.
Do Kwon se fue a Singapur a fines de abril pasado, previo al colapso de los activos digitales de Terra y Luna en mayo.
Tanto a él como a un grupo de empleados de Terraform e implicados en el proyecto, quienes también enfrentan órdenes de captura, se los acusa de violar Ley de Mercados de Capitales del país.
En su cuenta de Twitter, definió su ubicación en Singapur, pero la policía de ese país había comunicado que no se encontraba allí, por lo que se desconoce su paradero.
"Localizar y detener a alguien es complicado. La situación cambia todo el tiempo. Estamos haciendo todo lo posible para atraparlo", expuso la Fiscalía del Distrito Sur de Seúl.
Las fuerzas de seguridad de todo el mundo están cooperando para poder ubicarlo, por lo que los especialistas consideran que no llevará mucho tiempo más poder detenerlo.
Los fiscales de Corea del Sur le habían pedido al Ministerio de Relaciones Exteriores del país que invalidara el pasaporte de Kwon, lo que le impediría viajar.
Do Kwon fue responsable de la caída de las criptomonedas, cuyo colapso arrastró al ecosistema a perder sumas multimillonarias.
Este derrumbe sin control provocó nerviosismo en el mercado y miles de usuarios vendieron sus posiciones, acción que los arrastró a afrontar importantes pérdidas económicas al desprenderse de ellos por montos muy inferiores a los que accedieron.
El desplome de los activos de Terra y Luna tuvo un impacto en cientos de miles de inversores. Por este motivo, el ingeniero recibió demandas colectivas en Corea del Sur y en Estados Unidos.
La Comisión de Bolsa y Valores (SEC) y los fiscales del país asiático investigan las estrategias de marketing de Terraform Labs.
Kim Hyoung-joong, jefe del Centro de Investigación de Criptomonedas en la Universidad de Corea, sostuvo que los fiscales estaban dispuestos a castigarlo "como ejemplo".
"No ha habido ningún precedente legal en Corea del Sur en el que las criptoinversiones se hayan considerado un contrato de inversión, como afirman los fiscales", explicaron.