The Merge, la esperada fusión de Ethereum (ETH), tendrá lugar en los próximos días, actualización donde la criptomoneda con mayor valor de mercado detrás de Bitcoin (BTC) pasará de Proof-of-Work (PoW) a Proof-of-Stake (PoS), hito que llena de optimismo a los especialistas.
La transición estará dividida en 2 actualizaciones: Bellatrix, que estará lista el 6 de septiembre a las 11:34 AM UTC y París, cuyo lanzamiento está previsto entre el 10 y 20 del mismo mes.
Vitalik Buterin, su cofundador, criticó el mecanismo de Prueba de Trabajo, y expresó su preocupación por la seguridad de Bitcoin en ese aspecto.
Para el informático este protocolo no es conveniente en el largo plazo y, además, para el caso específico de la criptomoneda de mayor valor, no le encuentra un panorama alentador.
"Bitcoin simplemente no está logrando obtener el nivel de ingresos por tarifas requerido para asegurar lo que podría ser un sistema multimillonario", opinó.
Las proyecciones de Buterin son para un futuro muy lejano, en el que ya no se emitan nuevos BTC, alrededor del año 2140, y las ganancias de los mineros dependan únicamente de las comisiones.
El programador ruso marcó las falencias del mecanismo que le dio vida a su red por años, y apuntó que las tarifas diarias de Bitcoin, de unos u$s300.000, no crecieron mucho en los últimos cinco años.
"Ethereum tiene mucho más éxito en esto. La cadena de bloques está mucho más diseñada para soportar el uso y las aplicaciones", marcó.
Buterin sostuvo que el protocolo de Prueba de Trabajo brinda menos seguridad, si se mide por dólar gastado en tarifas de transacción.
"La migración de Bitcoin fuera de la Prueba de Trabajo parece ser políticamente inviable", enfatizó.
Vitalik Buterin respaldó al mecanismo de Prueba de Participación, aquel que será el futuro de Ethereum y que a su vez ya es utilizado por otros proyectos de criptomonedas.
El ruso destacó el concepto erróneo que se tiene del protocolo, en su posibilidad de otorgarle el control a las grandes partes interesadas.
"Todo lo que hacen es ayudar a la red a acordar la cadena correcta. Un bloque que viole las reglas del protocolo no será aceptado por la red, sin importar cuántos mineros o participantes lo apoyen", explicó.
De todas maneras, el PoS suele conllevar un control gubernamental, lo que no beneficiaría a la minería de Bitcoin.
El proceso de gobernanza para Buterin involucra a los usuarios, desarrolladores centrales y otra burocracia para coordinar qué cambios se proponen.
"En PoS, es exactamente lo mismo: los participantes no eligen las reglas, simplemente las ejecutan y ayudan a ordenar las transacciones", cerró.