La crisis económica llevó a la industria a operar con apenas la mitad de su capacidad instalada. La demanda de bienes y servicios se desplomó, las empresas no hacen caja, se resintió el capital de trabajo, la cadena de pagos se estiró y todo esto se refleja en un dato más que inquietante: la disparada en la cantidad de cheques rechazados.
El nivel "rebotes" aumentó la friolera de 66% en 2018 y la magnitud de la cifra sólo es comparable con las del fatídico 2001. Con estos datos sobre la mesa, desde Ficonomics advierten: "En los últimos meses se observó una creciente preocupación por el estado crediticio de personas y empresas". Su informe califica la actual situación como "alarmante" y destaca que el nivel de cheques rechazados está por encima de lo observado en la crisis de 2001.
Ante este escenario, se apela a distintas alternativas para no quedar "enganchados" con un valor incobrable. Y aquí es donde entra en escena una palabra por ahora poco conocida pero que irá ganando protagonismo: el blockchain. O, mejor dicho, los beneficios de este sistema, que otorga más transparencia a las operaciones (ver infografía).
Más allá del sector financiero, el sistema blockchain (o cadena de bloques) cada día es más utilizado por una diversidad de rubros. Por ejemplo, el sector retail, y especialmente los supermercados, que "siguen" sus productos desde el campo hasta la góndola.
Si a los súper ese seguimiento les funciona a la perfección, ¿por qué no implementarlo en los cheques? El camino es el mismo: monitorear como si fuera un GPS cada uno de los pasos que dio cada uno de los valores al cobro: quién le dio vida, cuál es el perfil del emisor y en qué manos estuvo. Y con un condimento extra: evitar el fraude gracias, al principio básico de la transparencia.
Un GPS para los cheques
La empresa Pagos Futuros decidió sumergirse en la ola de innovación y desarrollar junto a la tecnológica VR4 una solución de chequera en base al sistema blockchain.
Lo que buscan es eliminar costos logísticos, administrativos y riesgos de fraude. También, mejorar la cobrabilidad y expandir el financiamiento, aún cuando las partes no se conozcan.
Además, se trata de una solución multibanco, ya que los fondos giran entre clientes de distintas entidades e incluso posibilita la participación de los usuarios que están fuera del sistema financiero.
"Nuestro objetivo es innovar. Ser disruptivos desde lo tecnológico pero conservando desde lo funcional las características, usos y costumbres que tiene hoy el mercado argentino de financiación comercial entre empresas", aseguró Adrián Mazza, gerente de IT de Pagos Futuros, a iProUP.
Como muchas grandes ideas, este desarrollo nació a partir de una necesidad. Las empresas, medianas y pequeñas, enfrentan constantemente problemas en la cadena de pago y vieron la veta para transformar esos inconvenientes en una oportunidad.
¿El conflicto? Había un flujo de cobranzas y un giro comercial que los bancos no estaban visualizando, si bien resolver este punto no es tarea sencilla.
Cuando se pasa del mundo papel al digital, los responsables deben asegurarse tres cuestiones centrales: identidad del firmante, inalterabilidad del compromiso asumido y unicidad del documento.
"Blockchain resuelve esto, creando un 'expediente electrónico' a lo largo de la historia de cada pago y asegurando que nadie, ni clientes, ni bancos, ni nosotros, pueda crear pagos de un tercero o ceder un mismo cheque a dos personas distintas", suma Mazza.
Los beneficios están a la vista.
- En primer lugar, el impacto es logístico y administrativo. Con esta plataforma puede enviarse un pago al beneficiario en segundos y desde el momento en que lo acepta puede ya fraccionarlo y cederlo a un tercero, descontar una parte para financiarse o dirigirlo a otra cuenta propia. Se trata de un salto similar al que representó el email al correo tradicional.
- En segundo orden, emisores y beneficiarios dejan de estar obligados a utilizar su cuenta corriente: la plataforma soporta todo tipo de cuentas y wallets para la acreditación y el pago vía CBU, para la banca tradicional, o CVU, para la digital.
- En tercer término, en caso de falta de fondos la plataforma asegura el cobro parcial del disponible para la posterior negociación o judicialización solo del remanente adeudado.
"Pensemos que hoy un cheque se rechaza aunque esté disponible el 99% de los fondos", explica el gerente IT.
Entre las ventajas que ofrece esta herramienta está la posibilidad de "fraccionar" los cheques (como las monedas digitales), tener un scoring de comportamiento en tiempo real de emisores, incluir garantes en los contratos inteligentes, eliminar procesos administrativos, posibles errores humanos y ver fechas de cobro y vencimiento, entre otras funcionalidades.
Blockchain, la tecnología de base
Para llevar adelante este desarrollo, Pagos Futuros confió en la empresa de tecnología VR4. En un mundo donde esta tecnología promete ser "el próximo Internet", por la influencia que tendrá en distintos sectores, el principal protocolo elegido fue Hyperledger Fabric, un framework de código abierto que, básicamente, permite implementar blockchains privadas en vez de públicas.
Esta innovación, que no fue la única elegida en este proyecto, es impulsada desde hace tres años por un conglomerado de grandes organizaciones y empresas de tecnología como IBM, Linux Foundation y Cisco.
"Esta es una implementación compleja y sin antecedentes en la Argentina. Además, se trata de un producto diseñado siguiendo estándares de accesibilidad AA (para todos)", agrega Joaquín Paz Marchese, Chief Business Development Officer (CBDO) de VR4, en diálogo con iProUP.
Este desarrollo, que por momentos parece de ciencia ficción, tiene sus grandes desafíos. Especialmente cuando se trabaja con una tecnología tan nueva en la que "siempre hay riesgos" y que requiere de empresas que tomen el "rol de evangelización".
En rigor, el blockchain permite:
- Implementación de contratos inteligentes
- Trazabilidad
- Transparencia
- Seguridad
- Reducción de costos logísticos
- Eliminación del papel
"Todavía tenemos que trabajar para que se entienda que la información no tiene que estar en un lugar único. Con blockchain se distribuye en nodos privados y seguros. Además, hay una importante trazabilidad hacia atrás, ya que los contratos no se pueden manipular porque hay transparencia en todos los pasos", suma a iProUP Leonardo Ferrero, Chief Technology Office (CTO), de VR4.
Pero una industria tan antigua (y tan sensible) como la financiera no suele ser muy flexible con la llegada de innovadoras tecnologías. Incluso, interpreta a estas soluciones como un posible enemigo de sus negocios".
"Sin embargo, algunos ya piensan con sus centros de innovación con estas tecnologías. Es solo cuestión de tiempo para que se masifique en las implementaciones. Las fintech empiezan a robar mercado y los bancos tienen que cambiar, porque históricamente tienen un modelo que funciona", explica Paz Marchesese.
Lo interesante es que esta plataforma no solo está pensada para bancos, sino que con la misma Interfaz de Programación de Aplicaciones (API), distintas empresas de gestión pueden emitir cobros. Esto facilita el proceso y simplifica la ruta del dinero que ya tienen las entidades tradicionales.
"La relación entre las partes se agiliza, bajan las fricciones tanto a la hora de circular los pagos como ante la falta de fondos. Es una solución flexible que se adapta a la realidad económica de las empresas argentinas y les permite financiarse, incluso a tasa 0, con proveedores que hoy no tienen modo de calificarlos o no les aceptan pagos diferidos", suma Mazza.
En este sentido, remarca que "el mundo financiero también tiene mucho para ganar, ofreciendo crédito e incluso garantías a todos los actores de la cadena de pagos que hoy".
Más recursos
El problema de los "cheques voladores" no es nuevo: en la Argentina es muy frecuente que los valores de terceros pasen de una compañía a otra y, en caso de ser rechazados, desencadenan un desajuste en toda la cadena de pagos que se traduce en pérdidas, tanto de tiempo como de dinero.
Si bien hoy existen algunas herramientas para consultar la situación de varias firmas, los informes crediticios resultan complejos, innecesariamente largos y, muchas veces, inviables para las Pymes.
A partir de la necesidad de las pequeñas empresas nació Chequeas, una plataforma móvil que permite comprobar al instante el estado del emisor en tan solo tres segundos y desde el teléfono.
"Empezamos a ver que las empresas no tenían ningún procedimiento para verificar esta información. Se hacía cuando los cheques llegaban a la oficina y ya era tarde", explica a iProUP Estaban Lett-Brown, cofundador de la herramienta.
"Prefiero tener deudas antes que cheques rechazados" fue la frase que disparó la creación de esta startup. Con sus socios Martín Glascher y Manuel Astesiano Agote, Lett-Brown desarrolló esta herramienta que contribuye a dotar de mayor previsibilidad.
Utilizar el servicio es sencillo. Sólo hay que descargar la app (disponible para iOS y Android), e ingresar un teléfono y mail para verificar la cuenta.
Después de aceptar los términos y condiciones, el sistema ofrece 20 consultas gratuitas para probar su utilidad. ¿Cómo funciona? Solo hay que tomar una foto del cheque y la aplicación verificará en los registros públicos el estado del emisor, todo al instante.
Pasado el límite de consultas gratuitas, la app se bloquea y pregunta si se quiere tener asesoría de un ejecutivo para conocer los distintos planes pagos.
Actualmente, la empresa ofrece tres abonos mensuales, además de planes corporativos a medida.
Con conciencia de los problemas que presenta este segmento de cobros, los fundadores sabían que tenían que generar una app fácil de utilizar y ágil para responder. "Si sabés usar WhatsApp, podés recurrir a esta herramienta sin problemas", asegura Lett-Brown.
Tanto la implementación de blockchain de Pagos Futuros, como la app de Chequeas son algunas de las herramientas que se suman al mercado para mejorar la gestión y pisar el acelerador en materia de innovación dentro de la industria financiera.