Tras el pico de $242 que tocó la semana pasada, el precio del dólar financiero contado con liquidación (CCL) se atenuó un poco en los últimos días, debido una mayor necesidad de pesos de las empresas para pagar vencimientos de impuestos y el aguinaldo. El CCL cerró este viernes 24 de junio por debajo de los $235, pero el alivio podría ser temporario en un contexto en el que se profundizó la caída de acciones y bonos argentinos y en el mercado vislumbran varios factores que podrían reavivar muy pronto al dólar financiero
Los analistas advierten que la amenaza más inmediata que acecha al CCL es la licitación de deuda que deberá enfrentar el Tesoro el martes 28 de junio.
El ministerio de Economía, a través del canje de letras del Tesoro que realizó esta semana, logró reducir en $362.500 millones (contando los $4.625 millones obtenidos este jueves en el marco del programa Creadores de Mercado) los vencimientos por $605.886 millones que debía enfrentar a fin de mes.
Eso descomprimió los fondos que el Tesoro debe cosechar en la licitación de la próxima semana, que ahora alcanzan a $243.425 millones. Sin embargo, los analistas consideran que el canje no logró despejar todos los temores que hay sobre la renovación de los vencimientos de deuda en pesos. Esto quedó en evidencia en la dinámica de rescates de títulos CER en Fondos Comunes de Inversión T+1 y de renta fija, que volvió a mostrarse al alza el miércoles y jueves después de varias ruedas bajistas que se habían registrado gracias a que el Banco Central (BCRA) salió a comprar esos bonos para detener la corrida.
En este clima, los bonos CER cayeron el jueves, en algunos casos hasta 4,1%, y el riesgo país escaló a 2.278 puntos, máximo desde agosto de 2020.
Gracias al canje de letras se redujeron vencimientos a cubrir en la próxima licitación, pero sigue la desconfianza del mercado
Deuda: siguen las dudas pese al canje
En el mercado consideran que el canje de esta semana fue hecho a medida para el BCRA, dado que por su carta orgánica no puede acceder a las licitaciones primarias, por lo que requiere de esa clase de operaciones para ir refinanciando sus tenencias de títulos públicos
En Facimex Valores evaluaron que el resultado del canje "sugiere que el grueso de la participación provino de entes públicos, mientras un cuarto de los tenedores privados habría participado".
En ese marco, Tobías Pejkovich, analista de Facimex, señaló a iProfesional que "el canje no termina de aliviar los temores alrededor de la licitación de la semana que viene, en la que el Tesoro afrontará vencimientos por $243.000 millones en manos de tenedores privados"
Emiliano Anselmi, líder del equipo de macroeconomía de PPI, coincidió: "No somos tan optimistas, dado que si bien el canje descomprimió vencimientos, se dio todo por suscripción de organismos públicos. El Tesoro tiene que recuperar financiamiento del sector privado, lo que no luce probable en estas circunstancias".
De igual lectura, Javier Casabal, analista de Adcap Grupo Financiero, planteó que "la licitación del martes es relevante para testear la demanda genuina de manos de privados".
Deuda en pesos: el mercado advierte que el verdadero test todavía está pendiente.
Dólar CCL: ¿por qué puede afectarlo la licitación de deuda?
Los analistas de Invertir en Bolsa señalan: "En la medida que el Tesoro no obtenga el roll over requerido de 128% para financiar su déficit, el BCRA deberá intervenir ya sea a través de Adelantos Transitorios o de una mayor participación sobre la deuda en pesos. Cualquiera sea el caso, su situación patrimonial se vería más deteriorada, y presionaría aún más el CCL".
En sintonía, Martín Polo, estratega en jefe de Cohen Aliados Financieros sostuvo que "una mala licitación va a deteriorar más las expectativas, porque le pone más presión al BCRA para expandir la emisión monetaria. Esto traslada tensión a los precios y el catalizador puede ser el CCL". Y aseguró que, en adelante, siempre habrá esa incertidumbre "porque son meses de muchos vencimientos, dado que el Gobierno logró ir financiándose (con títulos) a corto plazo y ajustados por inflación.Pero al ser tan alta la inflación, los vencimientos son cada vez mayores. Por eso, las licitaciones empiezan a cobrar más relevancia".
Para Anselmi, la licitación del martes "es clave, si no se logra rollear lo que vencen puede ser un combustible adicional para el CCL".
Por su parte, el economista Federico Glustein estimó que "la inestabilidad reinante que se expresa en el riesgo país, que está subiendo, podría encender la mecha del CCL nuevamente. Pero si el resultado de la licitación resulta favorable y se cubre las necesidades del Tesoro, probablemente baje levemente".
A su vez, el analista Gustavo Ber aseguró que "resulta crucial no sólo completar una exitosa licitación el próximo martes, sino -especialmente- recuperar la confianza de los inversores por los títulos CER, ya que tras un breve respiro por las intervenciones oficiales se viene reanudando la presión en las cotizaciones". Y señaló: "Eso es indispensable ante los desafiantes roll-over del segundo semestre, dado que las licitaciones son el único financiamiento voluntario disponible para evitar acelerar el ritmo de emisión monetaria y activar repercusiones negativas en el ritmo de reacomodamiento de los dólares financieros", señaló.
En ese sentido, Casabal advirtió que "es fundamental que se detengan los rescates" de títulos CER. "Si los rescates de los fondos se mantienen, con fondos incluso saliendo de algunos Money Markets, el CCL debería seguir aumentando", vaticinó.
Si el Tesoro no logra rollear la deuda, el BCRA deberá emitir más y eso es combustible para el CCL.
CCL: otros factores que impulsarán este dólar al alza
Para Anselmi, el valor del CCL "está muy barato" dado el deterioro macroeconómico y la cantidad de pesos que hay.
Otro factor de preocupación es que el BCRA no logró sumar reservas en junio, y acumula en el mes un saldo vendedor de unos u$s500 millones. "Creo que el CCL tiene recorrido al alza. Malos datos fiscales, mucha emisión para déficit y para sostener precio de bonos, mercado de deuda que no se estabiliza del todo sin intervención oficial, nulas compras de reservas y stock muy bajo. No es un combo para creer que puede bajar y mucho menos para ser optimista", argumentó.
Precisó que "midiendo CCL versus la medida más amplia de liquidez de la economía (el agregado monetario M3 privado) nos da que está 18% adelantada la cantidad de pesos (desde diciembre de 2019), eso da un tipo de cambio de convergencia de $281".
El mercado ve riesgos de suba del CCL por que el BCRA no logra acumular reservas en tanto aumenta la emisión monetaria.
De igual diagnóstico, Pejkovich destacó que "el tipo de cambio implícito se encuentra por debajo de las variables monetarias de la economía, las cuales se habrían expandido a un mayor ritmo en las últimas ruedas" en alusión a nuevas compras de bonos CER esta semana por parte del BCRA y un nuevo giro al Tesoro en Adelantos Transitorios por $50.000 millones que realizó el 16 de junio -que se conoció este jueves- con lo cual en el mes suma $280.000 millones. "En un contexto como el actual, que se caracteriza por un deterioro de la posición fiscal, una mayor emisión monetaria, un mayor estrés en el mercado de deuda en pesos y ventas del BCRA en el mercado de cambios, el balance de riesgos para el tipo de cambio implícito se encuentra sesgado al alza. Por lo tanto, la dolarización de carteras se impone como estrategia de inversión dominante", fundamentó.
Con igual mirada, Polo consideró que el principal motivo para la suba del CCL es "la falta de un programa fiscal sostenible". Y es que esta semana se conoció que el déficit fiscal primario en los primeros cinco meses del año alcanzó a $434.331 millones. Por eso, los analistas prevén que se incumplirá la meta acordada con el FMI en $566.800 millones para fin del primer semestre, aunque el organismo internacional ya anticipó que las pautas trimestrales pueden modificarse, aunque se mantendrá la anual que fijaba un rojo de 2,5% del PBI.
Para Polo, "más allá si el FMI perdona, da un waiver, o encuentra la manera de decir que cumplieron las metas, cuando uno mira las cuentas públicas ve que tienen una dinámica preocupante. Todos los componentes del gasto están subiendo muy por encima de la inflación y de los ingresos, y eso no hace más que aumentar las dudas en cuanto a la sostenibilidad de las cuentas, el inversor se asusta y asoma cada vez más el riesgo de crédito".
Por su parte, Glustein dijo que "si se llegaran a generar más restricciones a las importaciones como se prevé, es un carbón para encenderse y disparar las cotizaciones" de los dólares paralelos.