El acuerdo con el Fondo Monetario revitalizó los esfuerzos recaudatorios del Gobierno para cumplir el plan de abonar u$s70.000 millones al organismo de crédito multilateral. En este contexto, un proyecto del Frente de Todos para crear un programa especial de repatriación de bienes de argentinos en el exterior que incluye el lanzamiento de un "blanqueo" de criptomonedas fue aprobado en el Senado hace dos semanas y espera la aprobación de Diputados.
Pero en las últimas horas, el presidente Alberto Fernández envió a la Cámara de Diputados un proyecto de ley para conferirle autonomía a la Unidad de Información Financiera (UIF), el organismo que investiga el lavado de activos.
La iniciativa apunta a crear la UIF "como organismo descentralizado de la Administración Pública Nacional, en jurisdicción del Ministerio de Economía, con personería jurídica propia, que funcionará con autonomía y autarquía funcional, administrativa, económica y financiera, según las normas de la presente ley".
El proyecto introduce modificaciones en la legislación vigente, elevando las sanciones a los delitos de lavado de activos, financiación del terrorismo y financiamiento de la proliferación de armas de destrucción masiva.
Por otra parte, se incluyen como sujetos obligados a las personas físicas o jurídicas que operen con activos virtuales, con foco especial en el mercado de criptomonedas.
"Se realiza un reordenamiento del elenco de sujetos obligados, organizándolos por sector financiero (Instituciones Financieras), Proveedores de Servicios de Activos Virtuales (PSAV), Actividades y Profesiones No Financieras Designadas (APNFD) y sujetos obligados no incluidos en el estándar internacional", explica el proyecto.
Según el texto, "los activos virtuales representan un negocio en expansión en todo el mundo y han cobrado enorme relevancia económica en los últimos tiempos, conllevando riesgos para el sistema de prevención y lucha contra" los delitos financieros.
Con esta reforma, el Gobierno busca evitar que el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) coloque a la UIF en la lista gris que incluye a jurisdicciones "bajo monitoreo intensificado". La Argentina estuvo incluida en esa lista entre 2009 y 2014, durante la presidencia de Cristina Kirchner.
Esta iniciativa se suma al denominado "blanqueo cripto", que propone el un programa especial de repatriación de bienes de argentinos en el exterior, que luego de ser aprobado en el Senado será debatido en Diputados.
Este proyecto establece una alícuota de 20% para quienes deseen declarar fondos en monedas digitales (se estiman en u$s68.800 M en manos de argentinos) según cifras de Chainalysis provistas en exclusiva a este medio.
Pero no sólo eso: la AFIP buscará el apoyo de más de 120 países "cooperantes" -entre ellos, los crypto-frienly El Salvador, Gibraltar, Malta y Liechtenstein- para compartir información dentro del standard common reporting, un sistema de intercambio de datos entre Estados similar al que existe con entidades bancarias, que analiza la OCDE.
El proyecto produjo un fuerte cimbronazo en el sector, que por estas horas no atraviesa un buen momento. "Hay que subirse a la ola: plazos fijos cripto, tarjetas, cashback, NFT, metaverso para incentivar operaciones", afirma a iProUP un referente de la comunidad cripto.
En el ecosistema, creen que esta avanzada redundará en un escenario más adverso no sólo para el rubro, sino fundamentalmente para los fines recaudatorios del Gobierno: la suba del "bitcoin blue".
Si bien no cuenta con una ley específica, la industria cripto en la Argentina comenzó autorregulándose y hoy cumple con disposiciones de:
Sin embargo, existe otro tipo de transacciones que está fuera del radar del Estado: las plataformas persona a persona (P2P), que permiten a los usuarios intercambiar saldos digitales. Y que suele denominarse "blue", pese a que son operaciones legales entre privados.
Nicolás Verderosa, CEO de Kephy Gallery, afirma a iProUP que el "blanqueo cripto" provocará que "más gente se vuelque al P2P y abandone a los exchanges locales para evitar la persecución impositiva. Esto generará mayor demanda, que aumentará las comisiones de compraventa, con lo cual el usuario cripto verá efectivamente un incremento respecto al precio 'oficial'".
En efecto, ese desacople entre ambas cotizaciones comenzó a notarse al cierre de esta edición en los exchanges locales (cuyo precio promedio mide coinmonitor.info) y las P2P, que están mostrando mayor demanda:
Gastón Levar, representante argentino de Airtm, afirma a iProUP que "las plataformas P2P será cada vez más populares debido a que el gobierno 'amagará' con regular los entornos cripto". En su visión, "son muy difíciles de regular: los Estados serán los mismos que las potencien", adelanta el ejecutivo.
En el mismo sentido, Nahuel Burbach, representante argentino de la billetera Zerion, pronostica a iProUP que " las transacciones P2P irán creciendo con el aumento de la presión gubernamental".
"Los diferentes tipos de cotizaciones sufrirán variaciones que se equilibrarán en el corto plazo", añade. Asegura que esta presión hará aumentar el precio local de las cripto, ya que "la existencia de spreads (diferencia entre precio vendedor y comprador) hace que el mercado busque formas de arbitrarse con gran imaginación".
"El precio se elevará porque el cupo que manejan los vendedores P2P es casi siempre el mismo. Al haber un incremento de demanda, las comisiones van a elevarse", completa Verderosa.
"El Gobierno no lo admite, pero los freelancers traen, a su modo, mucha divisas del exterior que se vuelcan al mercado local", afirma a iProUP un importante empresario cripto.
Según su análisis, "además de que bajaron las transacciones, hay mucha cripto 'blue' de los freelancers que ayudan a bajarle presión al precio local". De hecho, el dólar bitcoin (diferencia entre el precio global en dólares y el local en pesos) es de alrededor 205 pesos, detrás de los 207 del blue.
"Los freelancers son los primeros en buscar las mejores herramientas para hacer rendir su plata. Las criptomonedas son uno de los medios, otro es Airtm, la opción más elegida para traer el dinero atrapado de Paypal", señala Levar.
Para Verderosa, más allá del blanqueo, "los freelancers que reciben ingresos periódicos por tareas prestadas para empresas del exterior seguirán liquidando sus ganancias como lo hacen hoy".
"Este tipo de transacciones, que no dejan de ser bancarias y pasibles de control, son más difíciles de detectar: en esencia, al usuario le llega una trasferencia de otro 'a cambio de nada'", revela.
El ejecutivo, que además es abogado, afirma que "es poco probable que el proyecto se apruebe, pero ocurre, es improbable que muchos decidan blanquear tenencias, por la alta tasa del 20%".
Verderosa agrega que hay otra traba, "más fundamental e ideológica" de los grandes usuarios de criptomonedas: "No están de acuerdo con la intervención estatal en la economía personal".
En este sentido, Levar nota que "en Argentina crece progresivamente la adopción de formas de ahorro y atesoramiento de criptomonedas. Muchas marcas cripto globales llegaron al país para quedarse. Estamos viviendo un punto de inflexión: muchas personas ya han agregaron a las criptomoneda a su ciclo de dinero".
Los expertos creen que también aumentará el almacenaje de estos activos en billeteras sin custodia, como Trust, Munn, Metamask, Klever y otras. Estas apps permiten usar una clave privada (cadena alfanumérica) o frase semilla (serie de palabras) para acceder de manera directa a la información en la blockchain y comenzar a operar, sin que ningún tercero se entere, salvo que el usuario dé a conocer la clave pública (similar al CBU) y logren identificarlo con su cuenta cripto.
"Para aumentar la privacidad, los usuarios aprenden más sobre qué opciones brinda esta tecnología y son muy meticulosos para evitar pasarse detalles por alto", señala Burbach.