Máximiliano Batista, el número dos de Generación Zoe y principal socio de Leonardo Cositorto llegó esta mañana a Ezeiza con el fin de entregarse a la justicia Argentina.
Batista, al igual que Cositorto, tenía pedido de captura internacional por formar parte de una estafa piramidal y llevaba prófugo más de un mes.
El ahora detenido llegó en un vuelo proveniente de París y en tierra lo esperaban una brigada de Interpol.
Juliana Companys, la fiscal que entiende en el caso contaba con un pedido de captura internacional, acusado de estafa y asociación ilícita, con más de diez víctimas que se presentaron en Villa María, provincia de Córdoba para denunciar al grupo.
La semana pasada, la Policía Federal allanó en Belgrano a la hija de Batista: le secuestraron un Mercedes Benz y una decena de teléfonos y computadoras, además de dólares y pesos.
Mientras que todavía se esperan las detenciones del ceo, Leonardo Cositorto, que se encontraría en Colombia, y Héctor Luis Yrimia, ex juez y fiscal federal devenido en empresario, que se denominaba a sí mismo el "director jurídico de Generación Zoe" . La semana pasada, la PFA allanó el estudio de Yrimia. Ya serían 18 los detenidos en total por la causa.
Generación Zoe es una organización que opera hace poco más de cinco años y que se presenta en sociedad como una compañía de coaching y liderazgo, además de ofrecer paquetes educativos.
Esta empresa está dirigida por Leonardo Cositorto, quien lleva adelante la firma a partir de su base principal en la provincia de Córdoba, pero que logró de forma reciente una gran expansión internacional, en la cual ofrece desde paquetes educativos hasta criptomonedas.
Asimismo, desde principio de este mes de marzo, la Justicia ordenó la intervención de las firmas Generación Zoe S.A. y Zoe Capital S.A. y dictaminó decretó la inhibición general de bienes de su presidente Leonardo Cositorto, que se encuentra prófugo.
Las medidas tomadas por el juez nacional en lo Comercial, Pablo Frick, corresponden a otros expedientes iniciados a partir de presentaciones realizadas hace una semana por la Inspección General de Justicia (IGJ).
Además, la medida de inhibición también alcanza al socio de Cositorto, Maximiliano Bustos y será, en principio, por el período de dos años.