Warren Buffet es una leyenda dentro del mundo de los inversores, y con razones claras: todo lo que toca es oro. Por eso si uno quiere invertir como el "oráculo de Omaha" (como lo llaman los especialistas) no es necesario hacer nada extraordinario. Esto es una sorpresa para muchos nuevos inversores al conocer lo simple que es el método del multimillonario norteamericano para elegir sus inversiones.
Para resumirlo en pocas palabras, Buffett invierte en grandes negocios que cotizan por debajo de su valor intrínseco y, después, se aferra a estas inversiones mientras sigan siendo grandes empresas. Obviamente, es un poco más complejo que eso, pero esa es la idea central.
A continuación los pasos más representativos del "método Buffet" a la hora de invertir en empresas
El método de Warren Buffet para elegir sus inversiones es bastante simple
1. No sigas a la multitud
Según Buffett es extremadamente importante para los inversores principiantes no comprar ciertas acciones solo porque todos los demás lo hacen.
Buffett dice que tampoco hay que ponerse en contra de las tendencias y vender las acciones que todos los demás están comprando. El máximo responsable de Berkshire Hathaway afirma que la mejor manera de invertir es ignorar a la multitud por completo y concentrarse en encontrar valor por tu cuenta.
También afirma que la cualidad más importante para un inversor es "el temperamento", no "el intelecto". Se necesita un temperamento que no cree "el gran placer de estar con la multitud o contra la multitud".
2. Invertir en empresas con un liderazgo vigilante
"Una regla fundamental para invertir es que la empresa debe tener un liderazgo vigilante", explica Pysh, fundador de BuffettsBooks.com, sobre los métodos de inversión del natural de Omaha.
"Todo dentro de la empresa comienza desde arriba y refleja la posición más baja de la compañía, por lo que encontrar el líder adecuado de una organización es de vital importancia para Buffett", añade.
El inversor, por tanto, tiene que mirar hacia las altas esferas de la empresa: al CEO y al presidente de la junta directiva. También, sus salarios, si han mantenido o no la deuda de la compañía bajo control, y sus decisiones pasadas, lo que da una buena idea de cuán propensa a arriesgar es la empresa.
3. No temas las caídas y correcciones del mercado
El objetivo de invertir en acciones de la bolsa es comprar barato y vender caro, pero la naturaleza humana puede obligarte a hacer exactamente lo contrario.
Cuando ves que todos tus amigos ganan dinero, es cuando sentís que debés invertir el tuyo. Y cuando las bolsas colapsan, es natural salir antes de que los precios caigan aún más.
A Buffett le encanta que bajen los precios de las acciones, ya que crea oportunidades para comprar con descuento. Si estás comprando en tu tienda favorita y de repente te enterás de que los precios de toda la tienda son un 20% más bajos, ¿te entraría el pánico y saldrías corriendo? Esa es la cuestión.
Buffett acepta las caídas en sus acciones predilectas y asegura que "las oportunidades se presentan con poca frecuencia".
4. Invertir en empresas con perspectivas a largo plazo
Es fundamental considerar si la empresa podrá o no vender su producto en 30 años. Una buena pregunta que a Buffett le gusta hacerse es: "¿Internet cambiará la forma en que usamos el producto?" Si la respuesta es afirmativa, eso significa que el producto pronto podría volverse irrelevante eliminando su atractivo para invertir en él.
Por esto apostó por los chicles de Wrigley, ya que consideraba que estarían en el mercado durante mucho tiempo.
5. Centrarse en compañías estables
Es vital que la acción de una empresa sea estable y comprensible. Para resolver esto, Buffett analiza pormenorizadamente las métricas de la empresa durante los últimos 10 años para asegurarse de que sus beneficios hayan sido consistentes y tengan la tendencia correcta.
6. Apostar por negocios con un valor intrínseco atractivo
Buffett predice lo que valdrá en el futuro una empresa. Si puede comprar los títulos de las compañías por mucho menos que su valor intrínseco, entonces invertirá. No es lo mismo un dólar mañana que un dólar hoy.
7. No tengas miedo de vender si el escenario cambia
Una de las frases más famosas de Warren Buffett cuando le preguntaron sobre una inversión que decidió vender con pérdidas es "lo más importante que debés hacer si te encontrás en un hoyo es dejar de cavar".
A pesar de que quieras vender todas las acciones que compraste para siempre, la realidad es que las perspectivas cambian.
Hace un par de décadas, por ejemplo, Buffett tomó una gran posición en la agencia hipotecaria Freddie Mac. Unos años antes de la crisis financiera, notó que el equipo gestor del prestamista había comenzado a correr riesgos innecesarios con el capital de la empresa y decidió vender. Años más tarde, cuando estalló la crisis financiera, quedó claro que Buffett había hecho un movimiento inteligente, según destacó una nota del sitio Business Insider.