Bitcoin (BTC), la criptomoneda más famosa del mundo y con mayor capitalización de mercado, inició la semana cerca de los u$s50.000 por unidad, cifra impensada por muchos al ver cómo acumuló importantes caídas tras su récord histórico de abril pasado, cuando llegó a los u$s64.000 por unidad.
Sin embargo, pese a lo que popularmente se creyó en torno a su valor luego de alcanzar ese número, BTC acumula tres días consecutivos a la baja.
El rally freno inesperadamente y su caída la acomodó en torno a los u$47.000, lo mismo que valía el 20 de agosto pasado.
Los expertos en el ecosistema señalaron que este retroceso representa un debilitamiento técnico, con un rechazo en la zona de los u$s50.000 por unidad.
Sin embargo los gráficos de los últimos días arrojan que una línea de retroceso del 50% a u$s47.000 por unidad, lo que se traduce en un primer nivel de compra ante una corrección.
La moneda digital de Satoshi Nakamoto superó la barrera de los u$s50.000 por unidad el fin de semana del sábado 21 y domingo 22 de agosto por primera vez desde el 11 de mayo pasado.
Su accionar emocionó a los inversores, ya que en julio apenas llegó a superar los u$s30.000 por unidad. Y aún así, acaecido este leve tropiezo, muchos siguen firmes en su pronóstico de un posible roce de u$s100.000 para fines de año pero con mayor atención en los próximos movimientos de Bitcoin.
Por otra parte, la tasa de hash del Bitcoin mostró signos positivos tras su derrumbe de hace unos meses, ligado a los sucesos de represión a la actividad cripto en general en China.
Según datos proporcionados por el sitio de análisis CryptoQuant, el indicador ya supera los 150 Exahashes por segundo, y triplica los valores de potencia comparados a los de hace tan solo dos meses.
Varios especialistas en la industria destacan que el hash rate, aparte de un indicador de potencia, sirve para medir la seguridad de la red. Es decir que, a mayor hash, más difícil es atacar a Bitcoin. Esto también tiene el efecto contrario.
De acuerdo a Bitinfocharts, el hashrate del Bitcoin alcanzó el 13 de mayo un máximo histórico de 197,6 EH/s. Sin embargo, este cayó 65% durante las 6 semanas siguientes al tiempo que las empresas de minería de China empezaron a desconectar sus dispositivos, para posteriormente mudar sus operaciones.
Bitcoin, la criptomoneda líder, superó recientemente los u$s50.000 por unidad y volvió a entusiasmar a los argentinos, que ya tienen abiertas más de 2 millones de cuentas para apostar a estos activos.
Y apuntan a adquirirlas en lo que algunos llaman "cuevas digitales" (ya que ofrecen una forma "alternativa" de dolarizarse), pero estas plataformas son totalmente legales: al no ser considerado dinero, es como comerciar en "especies". Y, por cierto, se transformaron en un boom en estos meses.
Además, juegan un rol central para ofrecer nuevas operatorias en prácticas ya conocidas en otras épocas devaluatorias y limitaciones de acceso a la divisa extranjera.
Así, por estas horas las siguientes herramientas de la economía digital adquieren un marcado protagonismo:
Así, los argentinos ya no buscan "arbolitos" en la peatonal Florida para conseguir billetes verdes, sino que apelan a estas plataformas para proteger sus ahorros y, por qué no, ganar con el cambio.
Tanto los exchanges como las plataformas P2P deben cumplir con ciertas normas de seguridad como KyC (Conozca a su Cliente, por su sigla en inglés) y leyes antilavado. Por lo tanto, para darse de alta habrá que:
Realizado este proceso, hay que esperar la validación de la identidad. Puede ser instantáneo (en el caso de plataformas argentinas, ya que tienen conexión directa con los sistemas del Registro Nacional de las Personas, RENAPER); o habrá que aguardar (unas horas o un par de días para los servicios del exterior)
En todos los casos, las funcionalidades estarán acotadas hasta que se compruebe la identidad del usuario. Y habrá diferentes maneras de operar según cada plataforma: