La empresa de comercio electrónico más grande de América Latina, Mercado Libre, adquirió la compañía brasileña de logística Kangu, en búsqueda de consolidar su posición dominante en la región.
La empresa de Marcos Galperin ya tenía una sociedad con Kangu, que opera en Brasil, Colombia y México, según un comunicado.
Kangu ofrece más de 5.000 puntos de recolección y entrega, la mitad de ellos en Brasil, para vendedores y consumidores que compran artículos en línea o desean devolverlos, así como servicios de envío. La empresa argentina no reveló el valor del trato.
Mercado Libre, que obtiene alrededor de dos tercios de sus ingresos del comercio electrónico y el resto de los servicios financieros, prosperó en medio de la pandemia cuando los latinoamericanos adoptaron las compras web y los pagos digitales.
A principios de este mes, dio a conocer planes para impulsar su capacidad logística en Brasil, su mercado más grande. La compañía busca cerrar el año con ocho centros de distribución, 18 centros de cross-docking y más de 100 centros de última milla en el país. En Brasil, ofrece entregas el mismo día en 50 ciudades y al día siguiente en otros 2.100 puntos.
"Durante la pandemia, cuando los volúmenes de pedidos aumentaron, la red auxiliar de Kangu jugó un papel importante en el aumento de la eficiencia de la entrega", dijo Renato Pereira, director de desarrollo corporativo de Mercado Libre. "El acuerdo aumentará la eficiencia operativa y capilaridad, en tanto que mantenemos nuestro enfoque en entregar a los clientes brasileños lo más rápido posible".
La compañía ha desarrollado la mayor parte de su negocio internamente, pero también ha adquirido algunas empresas en los últimos años, incluida la brasileña Axado en 2016. En la segunda mitad de 2020, la empresa adquirió una participación en Kangu, cuyo tamaño no fue revelado.
Aproximadamente 91% de los envíos se entregaron a través de la propia red logística de Mercado Libre en el segundo trimestre, según Leandro Bassoi, vicepresidente de la firma.
Empaque y despacho
El e-commerce y los pagos digitales, explotaron el año pasado con Mercado Libre y Mercado Pago a la cabeza, cuando el comercio se volcó a la virtualidad casi en su totalidad, a raíz de la pandemia global de coronavirus COVID-19.
Así, el correo y las empresas de distribución y logística se vieron rápidamente desbordados por la demanda de los consumidores y, en medio del primer colapso, prometieron tiempos de entrega de hasta 15 días.
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Mercado Libre potenció su proceso de despacho, distribución y logística para hacer más efectivas y seguras las compras de los usuarios
Por esa razón, la firma fundada por Marcos Galperin potenció este último tiempo, y sobretodo este último año, el proceso de despacho, distribución y logística en su centro de almacenamiento ubicado en La Matanza, provincia de Buenos Aires.
En un video publicado en su cuenta oficial de Twitter, la firma reveló que, aproximadamente, despacha más de 160.000 paquetes por día desde su hangar.
En la edición de imágenes se observa cómo los empleados del centro se encargan del embalaje de los productos comprados por los usuarios de MELI, desde el empaque, hasta el despacho final.
En el depósito
Una vez que el usuario efectúa una compra, el proceso de delivery se pone en marcha en los centros de almacenamiento, ya sea del propio vendedor, de la plataforma (Mercado Libre) u operador logístico, como el caso de los correos privados.
"CACE diseñó un 'Protocolo de Entrega Segura', tanto para operadores logísticos como para empresas que venden en Internet", confía a iProUP Iván Amas, director de Logística de la CACE y gerente comercial de Andreani, en los que destacan:
- Preparación. Se generan dos turnos para evitar la aglomeración de empleados, a quienes se separan en "células" de trabajo sin contacto entre ellas. Hay protocolos de limpieza en los cambios de turnos
- Transporte. Se capacitó al personal para proceso de contigencia, prevención y desinfección periódica de sus elementos de trabajo, como volante, palanca de cambio y celular con sanitizantes en aerosol y soluciones alcohólicas o cloradas
- Entrega. Se establece una distancia de al menos un metro. Y se exime de la firma al destinatario: como comprobante, se usa la geolocalización del celular o se ingresan los números de casa contiguos
Más allá de estas directivas generales, el centro FullFilment automatizado que Mercado Libre posee en la zona de Mercado Central delineó su propia lista de recaudos ante el fuerte repunte, de más del 50%, de los envíos.
Desde allí se despachan los productos remarcados como "Full" y los pertenecientes a Supermercado Libre, la sección de almacén y limpieza que –como anticipó iProUP– lanzó en la Argentina durante la cuarentena.
"Cada colaborador recibe un kit de limpieza cuando ingresa al predio y guantes al comienzo de su jornada. Además, se instalaron puestos con dispensers de alcohol en gel y es obligatorio su uso cada 30 minutos y antes y después de cada interacción con otras personas", confían a iProUP desde la firma.
Además, recomiendan:
- Mantener una distancia de al menos un metro al recibir la mercadería
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Lavarse las manos luego de recepcionar y abrir los paquetes
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Desinfectarlos con producto a base de alcohol
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Evitar tocarse los ojos, la boca o la nariz luego de abrirlos
Correo Argentino y sus competidores privados –como OCA y Andreani– también forman parte del pool de prestadores de Mercado Envíos: los vendedores (Pymes y comercios) llevan los productos a una receptoría para que el comprador los retire en otra sucursal o los reciba en su hogar. En el medio, son almacenados en un centro de procesamiento.
"En nuestras plantas, desinfectamos cada dos horas todos los espacios comunes, mientras que en las sucursales ocurre cada hora por el tráfico de gente", revela a iProUP Diego Delavault, jefe de seguridad e higiene de Andreani.
La firma también escalonó los horarios de ingresos y egresos, colocó señalética para garantizar el distanciamiento y entregó vestimenta especial al personal sanitario y de seguridad. Además, instaló sólo muebles plásticos –más fáciles de limpiar– en el comedor y sólo ofrecen viandas selladas.
Si bien advierte que no rocían ningún sanitizante sobre los paquetes "porque podrían perjudicarlos", Delavault indica: "Los vehículos son sanitizados con aspersores que se les entrega a los choferes, para que las cabinas y todos los puntos de contacto como volante, picaportes y demás estén desinfectados en todo momento".
