El 13 de abril fue el principio del fin para muchos: el precio de Bitcoin (BTC), la criptomoneda más importante y con mayor cantidad de adeptos en todo el planeta, superaba por primera vez los u$s64.000 por unidad.
Ese día, miles de inversores en todo el mundo expresaban sin dudar su felicidad por haberse animado a invertir e, incluso, instaban a otras personas a sumarse a la "revolución bitcoin", movimiento que propone una economía más descentralizada, entre otros atributos.
Sin embargo, la alegría duró poco. A partir de ese día, inició una caída -luego de experimentar un rally alcista que duró más de año- y los rostros de esos nuevos criptoahorristas comenzaron a exhibir gestos de preocupación.
Con el correr del tiempo, muchos decidieron desarmar sus posiciones ante la preocupación de perder buena parte de lo ganado, y también, ante el continuo arribo de diferentes noticias que, en muchos casos, presagiaban un escenario aún peor.
En aquel momento, debieron volver a escuchar algunos de los consejos-sentencia que parte de sus círculos íntimos se habían encargado de remarcarles antes de entrar: "Bitcoin es muy volátil"; "no se entiende bien cómo funciona ¿en serio vas a invertir ahí?"; "mirá que después te va resultar muy difícil salir rápido".
Cuatro meses y dos semanas después de ese récord, miembros de la comunidad de bitcoiners local le cuentan a iProUP su experiencia personal con la criptodivisa durante la fuerte caída, pero también revelan por qué decidieron mantener sus posiciones.
¿Cómo llegó a Bitcoin?
Gastón Darrigrán (43) es uno de los inversores locales que se anima a contar su vivencia: "Me decidí a invertir en bitcoins, en realidad en cuatro criptomonedas: Bitcoin, Ethereum, USTD, y Uniswap, a través de la aplicación Lemon Cash".
"Un amigo me asesoró sobre cuáles eran las formas de entrar y Lemon Cash fue la aplicación que me pareció más fácil, sencilla, intuitiva, rápida y clara", asegura. Darrigrán asegura que pudo "comprar automáticamente en la app" y hasta probó vender "y también fue en el momento la acreditación".
"Me resultó una interfaz amena, clara y muy segundo a segundo. Simplemente haciendo un clic puedo ver cuánto estaba cotizando, cuándo estoy ganando en pesos o cuánto perdiendo", añade.
Darrigrán confía que tomó la decisión de invertir en Bitcoin porque "se sentía muy afuera del mundo digital".
La mayoría de quienes ingresaron en el corto plazo lo hicieron por recomendación de amigos
"Era como que estaba fuera de algo que me gustaba entender un poco más cómo se movía. Me parecía que la mejor forma de revertir eso era ponerme a jugar en la plataforma. Lo hice desde ese lugar, es decir, no a la espera de un salto de ganancia monumental, sino simplemente para conocer cómo se mueve, por qué fluctúa y si era realmente una inversión a considerar", detalla.
Sin embargo, reconoce: "Entré para desasnarme de lo que eran las criptomonedas. Las creía bastante más lejanas y por lo menos con la app me resultó súper fácil".
Martín Lorea (36) también le cuenta su experiencia a iProUP: "Decidí invertir en Bitcoin por el consejo de un amigo al que le había ido bien. El motivo principal fue básicamente diversificar mis inversiones: nunca me gustó jugar solo (y todo) a una misma carta".
Entre los más experimentados, Nicolás Verdani (29) comparte con iProUP su experiencia: decidió invertir en BTC hace varios años porque es la moneda más fuerte y segura. "Es la que dio origen a todo este ecosistema y, por ende, es la que más va a perdurar en relación a otras. Quizá no sea la que mayor ganancia dé en el corto plazo, pero sí la más sólida", remarca.
A la charla con iProUP se suma también Pamela Fernández (33) y relata: "Llegué al mundo del Bitcoin por dos motivos principales: necesidad económica y porque un amigo conoce del tema. Me alentó para incursionar en el tema de las criptomonedas".
¿Cómo vivió la fuerte caída de Bitcoin?
Al ser consultado sobre la fuerte caída de la criptomoneda líder, Darrigrán fue claro: "Si bien el reciente ajuste fue importante, en el último tiempo había tenido un crecimiento impresionante".
Destaca que "cada vez los países le van dando más solvencia a las criptomonedas, todavía a muchos nos puede generar la duda de que sea una burbuja como pasó con otros negocios digitales".
"Solo el tiempo dirá en qué termina. Por eso, ingresé con una inversión no del todo significativa, aconsejado por un amigo, lo tomo como si hubiese entrado a un casino", agrega. Destaca que no lo toma "como para resguardar los ahorros, sino como un juego: puedo ganar o perder todo. Voy a ver cómo se comporta en el tiempo a largo plazo", resalta.
Darrigrán vive la inversión en Bitcoin como si hubiese entrado a un Casino: "lo tomo como un juego, solo el tiempo dirá en qué termina esto"
Lorea cuenta también su experiencia con la tendencia bajista de los últimos meses. "Fue muy duro. Mi inversión, si bien no fue significativa, se redujo a casi la mitad en un período de tiempo muy corto. Ahora estoy recuperando un poco lo perdido, pero aún me falta para llegar al monto inicial", reconoce.
Verdani, con más experiencia en el tema, cuenta que "vive con mucha tranquilidad" la caída del Bitcoin desde su máximo histórico: "Los ciclos de alzas y bajas siempre fueron del mismo modo: sube al máximo, corrige, sube al máximo, corrige. En esas correcciones la gente entra en pánico y vende a pérdida. Pero el mercado funciona de esa manera: el que tiene paciencia es el que gana".
Fernández reconoce que "al comienzo me afectó el derrumbe de la cotización. Pero a la vez fui consciente, al momento de invertir, que era dinero que podía llegar a perder", añade.
¿Por qué sigue 'adentro' del mundo Bitcoin?
Por último, Darrigrán resalta que sigue estando "adentro" porque "se mueve de una manera muy inquieta". "Tiene bajas del 10%, subas del 10%, es decir, todavía mi inversión no se vio afectada. Incluso, en este momento se podría decir que va en alza, tengo resultado positivo".
"Sigo estando por el mismo motivo que ingresé: por curiosidad, ver cómo se mueve y, en principio, tomándolo como un juego. Si veo que en el transcurso del tiempo y a largo plazo es una forma real de conservar ahorros, en un país donde es una de las cosas más difíciles de sostener por la inflación, mantendré la inversión", completa.
A diferencia de Darrigrán, Lorea reconoce que si bien mantiene su posición, no volvería a invertir en Bitcoin: "Es muy volátil y me genera temor que no sea validado por los bancos centrales. Para obtener una herramienta de financiación alternativa, decidí regresar al dólar MEP", advierte.
Verdani, en tanto, cuenta sus razones para seguir dentro del ecosistema: "Por regla general, nunca se debe vender en pérdida, sobre todo, si se tiene fe en el proyecto en el que se invierte. Comprar caro y vender barato es la forma de perder dinero. Es así de fácil", concluye.
Muchos inversores novatos lo ven como un "juego", otros, como la posibilidad de hacer diferencia a largo plazo
Fernández, por su parte, afirma que "las criptomonedas son muy volátiles y es eso es lo que me lleva hoy a mantenerme dentro del juego, entendiéndolo como una oportunidad a futuro de generar rentabilidad en la compra y venta".
Diferentes opiniones y realidades. Lo cierto es que nadie que entró en Bitcoin quiere salir. Al menos, no hasta ver cómo termina esta película que, para la mayoría, recién está comenzando.