En un escenario complejo donde muchas naciones investigan si sacar o no su criptomoneda, la iniciativa de Iberpay junto con los cuatro principales bancos españoles (Santander, CaixaBank, BBVA y Sabadell) apunta a tomar la delantera al resto de las entidades financieras europeas para convertirse en los primeros bancos en poder llevar a cabo transferencias de dinero digital, y en concreto con el futuro euro digital, que cuenta con más de una quincena de adhesiones al proyecto.
En los últimos meses se han sumado a la iniciativa denominada Smart Money Cecabank, Banco Cooperativo, ING, Bankinter, Banco de Crédito Cooperativo, Ibercaja, Kutxabank, Unicaja Banco, Abanca, Liberbank, Laboral Kutxa y Banca March.
Pero además, este proyecto que cuenta con el Banco de España como observador, apunta a "adelantar y posicionar a los bancos españoles de cara a capturar las oportunidades de negocio, de transformación digital y de innovación financiera que se pueden derivar de la futura emisión del euro digital", según explicó un documento de Iberpay.
Preparación previa
No obstante, aunque la puesta en circulación del euro digital no se decidirá hasta las próximas semanas, la banca española quiere estar ya preparada para poder llevar a cabo transferencias en tiempo real con esta moneda virtual en cuanto sea operativo.
Por otro lado, fuentes del sector explican que el objetivo es que los bancos españoles asuman de esta forma "una posición avanzada, liderando los cambios derivados de la digitalización financiera y de la profunda transformación que se está viviendo en el mundo de los pagos". Y además, "para responder a las necesidades de los usuarios y posicionar la industria a la vanguardia de la innovación financiera", subraya Iberpay.
La iniciativa concluyó con la ejecución de más de 20.000 transferencias inmediatas programadas desde la Red-i.
De momento, en noviembre de 2020 Santander, BBVA, CaixaBank y Sabadell superaron con éxito los entonces últimos ensayos para poder realizar transferencias con dinero digital. Ahora están a punto de finalizar unas nuevas pruebas para la distribución rápida del dinero digital en las que están involucradas estas 16 entidades financieras, a las que más adelante se prevé que se sumen el resto de las firmas bancarias españolas.
La prueba de concepto que se está desarrollando en estos momentos culminará con la publicación de un informe sectorial que expondrá las conclusiones obtenidas durante la ejecución de estos ensayos y un análisis del posible impacto de la emisión del euro digital en el sector financiero español.
La iniciativa concluyó con la ejecución de más de 20.000 transferencias inmediatas programadas desde la Red-i (red blockchain interbancaria) gestionada por Iberpay. Esta muestra permitió validar estas pruebas programadas en contratos inteligentes (smart contracts) desde redes de blockchain, mediante su conexión con el sistema nacional de pagos (SNCE), según publicó el medio Cinco Días.
El análisis
Estos ensayos sectoriales y el análisis que se está realizando en Iberpay se circunscriben a los aspectos técnicos y opciones de diseño de la distribución del euro digital. "Un euro digital plantea desafíos a la estabilidad financiera que requieren de análisis, definición y diálogo con las autoridades, previos a la participación de las entidades bancarias en un posible euro digital", apuntó Iberpay.
El reto es que esta moneda digital se pueda utilizar por ciudadanos y empresas en su actividad habitual, de manera sencilla, fiable, sin riesgos y con una plena aceptación, de forma similar a los billetes y monedas físicas.
Christine Lagarde dije que espera que el desarrollo del euro digital sea una realidad en un plazo "de no más de cinco años".
El director general adjunto de innovación financiera e infraestructuras de mercado del Banco de España, Carlos Conesa, ya aseguró la semana pasada que "la decisión de lanzar un proyecto sobre el euro digital es muy cercana".
Por otro lado, el Banco Central Europeo completó recientemente un periodo de consulta pública sobre el euro digital que finalizó con un récord de participación, habiéndose juntado más de 8.000 respuestas realizadas por ciudadanos, empresas, asociaciones empresariales y otras partes interesadas, lo cual hace prever un gran interés en la futura emisión del euro digital.
Tras finalizar esta fase de experimentación y consulta pública, previsiblemente a mediados de 2021, el BCE decidirá si continúa dando pasos adelante hacia el euro digital. No se conocen fechas concretas, pero Christine Lagarde ya ha declarado recientemente que espera que el desarrollo del euro digital sea una realidad en un plazo "de no más de cinco años".